CÓRDOBA. Juan Schiaretti parece dispuesto a jugar fuerte en 2023. El saliente gobernador de Córdoba ya no tendrá otro periodo local y, con vistas a eso, se cree que hará un último intento para poder cumplir el sueño del cordobesismo de poder tener un dirigente con proyección nacional.
CHANCE
Juan Schiaretti acelera en el peronismo (Llaryora también)
Juan Schiaretti comenzó una fuerte levantada de perfil y parece jugarse por una chance nacional. ¿Lo de CFK mejora sus chances?
En ese orden, el mandatario cordobés experimenta una fuerte levantada de perfil que lleva apenas unos días, pero que sin dudas se va a intensificar. Si bien los esfuerzos no están puestos en los medios de comunicación, fuertemente distraídos por el Mundial, sí lo están colocados en reunirse con la mayor cantidad de dirigentes posibles para darle forma a una propuesta amplia que se contraponga a la grieta.
Con esa misión por delante, Juan Schiaretti pretende ofrecer el “modelo Córdoba” como opción para el país. Para ello, necesita lograr un consenso con dirigentes de casi todos los colores, con especial importancia en algunos opositores.
Un ejemplo de ello fue su último encuentro con el radical jujeño, Gerardo Morales. El discurso que quiere hacer propio el cordobés es el mismo que vienen trayendo varios dirigentes que hablan de “acuerdos básicos”, como el propio gobernador de Jujuy.
Pero no solo el ‘Gringo’ se encuentra trabajando en ello. Todo el peronismo cordobés parece ir orientándose de cara a un potencial trabajo nacional.
El candidato a gobernador, Martín Llaryora, también tomó parte en ese discurso y comenzó a hacerlo propio, luciendo muy alineado con el líder cordobés. Claro, la sinfonía tiene que ser la misma.
En la Bolsa de Comercio de Córdoba, el actual intendente compartió mesa con el diputado Rogelio Frigerio (un dirigente que sería apuntado por Schiaretti), el intendente de Tres de Febrero Diego Valenzuela, y la economista Diana Mondino, entre otros. Allí, se vertieron conceptos más que interesantes pensando en la conformación de una suerte de tregua a la grieta en pos de la recuperación nacional.
“Se requiere una coalición, más extensa que los partidos políticos. Por lo general estamos esperando los líderes salvadores y no alcanzan”, aseguró, dejando entrever que su partido está dispuesto a conversar en el plano nacional.
Para el peronismo cordobés, el paso evolutivo es necesario para lograr la continuidad. Tanto Juan Schiaretti como Martín Llaryora saben que ceñirse a los últimos 23 años de gestión donde se personalizó la imagen de todo un partido (entre el propio gobernador y José Manuel de la Sota) sería un error.
Ahora, con un escenario más que incierto desde lo político, y con dos figuras polarizadas como la de Cristina Kirchner y Mauricio Macri que parecen estar más lejos que cerca de ser protagonistas directos en 2023, la rápida respuesta de construcciones robustas como la del peronismo cordobés puede valer un futuro promisorio. Ante la ausencia de esos pesos, las acciones de los moderados se levantan fuerte, más aún en un caso tan concreto como el de Hacemos por Córdoba.
Más contenido en Urgente24:
Finde XXL: Un plan diferente para hacer en la Patagonia