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IMPACTO POLÍTICO

Elecciones: La Delta y el tiro por la culata del oficialismo

Postergar elecciones pudo no haber sido la mejor decisión. La Delta y los no vacunados pueden arrasar con el discurso oficial, y la oposición sacar el "jugo"...

Con más o menos días de diferencia, las predicciones de los analistas sanitarios se vienen cumpliendo. Pasó la primera ola del Covid-19; llegó la segunda con fuerte impacto de la variante Manaos, y la situación sanitaria se muestra estable entrando al mes de agosto, justo cuando debían celebrarse las elecciones primarias, que el oficialismo decidió postergar por el coronavirus y una vacunación que no se ve en los hechos tan efectiva como en el discurso.

La variante Delta compromete ahora la situación y hace reflexionar a la coalición gobernante: ¿haber postergado un mes las elecciones primarias y la general fue una pésima decisión? ¿habrá que lamentar no haber ido a las urnas el 8 de agosto en lugar del 12 de septiembre?

Los argentinos con el esquema completo de vacunación son muy pocos. Recién esta semana se llegó a superar los 6 millones de habitantes con vacunación completa, porque ya se sabe que para estas nuevas cepas, una sola dosis no alcanza. En efecto, en muchos países analizan aplicar terceras dosis para reforzar algunas vacunas.

La llegada de la Delta al país ya es un hecho. En efecto, en las últimas horas se conoció el caso de un cordobés, que llegó con esta cepa, no respetó el aislamiento y contagió a 13 personas.

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La llegada de la cepa Delta al país ya es un hecho.

La llegada de la cepa Delta al país ya es un hecho.

En el actual escenario, sería casi inminente el ingreso del país a la tercera ola, y si la curva comienza a subir, restringir nuevamente las actividades sería demasiado impopular. Cerrar todo otra vez, es un nuevo golpe al bolsillo difícil de sostener.

Además, quiénes cerrarían: ¿Alberto Fernández? ¿Los gobernadores? Llegar a las elecciones primarias sumando muertos y pobres no es, sin dudas, el mejor escenario.

Acelerar la vacunación de aquí a las PASO puede dar ventajas. Pero para ello, solo la Sputnik y los problemas con la segunda dosis, complicaría los planes. Los resultados de los estudios sobre combinación de vacunas tampoco le ganarían la carrera a la Delta.

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"La puerta de salida está acá nomás", dijo Alberto Fernández, sobre la vacunación en un acto en Florencio Varela, donde habló del eventual fin de la pandemia en el país.

Dejar de lado la "vacuna" en la campaña y apuntar a la economía, podría ser aún más fatal para los fines electorales. Ventaja que también apunta la oposición, que pasa de las críticas a la "lenta vacunación" a destacar que "con la vacuna no alcanza".

Por supuesto, llega ahora el momento de "repartir" o "dilapidar", según se lo considere. Bonos extraordinarios para jubilados y beneficiarios de planes, créditos blandos, rebaja del gas natural para la mitad de los usuarios de red, suba del salario mínimo, devolución de Ganancias, alivio a monotributistas y llevar la pauta "oficial" para paritarias al 45%, con el puntapié inicial de CFK y Sergio Massa en el Congreso.

Pero la inflación juega en contra y ni siquiera evitar la devaluación, planchar (algunas) tarifas y controlar el dólar, pueden evitar que se encamine a los números de 2019. Si llega al 50%, claramente, no estará muy lejos del tan criticado 57% de Mauricio Macri.

Entonces, ¿fue bueno atrasar las elecciones? ¿Aguantarlas hasta la próxima ola o a que la situación económica destroce los bolsillos siendo que ni siquiera las PASO serán tal cuando lo que se intenta es armar una sola lista, en la que no tendrán participación los ciudadanos?

Lo dijo el propio Macri, luego de que el presidente realizar el homenaje a los fallecidos por la pandemia: "Al final tenemos las dos cosas: 10% más de pobres y 100.000 muertos".

Falsa elección, con más hambre y más muertes. El único sentido que podrían tener las elecciones es transformarse en una gran paliza a la gestión de Alberto Fernández, pues este tipo de castigo se luce en las primarias.

Claro que aún hay tiempo para que la Delta de más excusas (pese a la cláusula cerrojo para evitar una nueva postergación) para patear la pelota para adelante. Quizás entonces resuelvan, al menos, el "problemita" de los no vacunados o los de 1 dosis.

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