Victoria Villarruel protagonizó en las últimas horas un cortocircuito mediático que sacudió las redes sociales y demostró nuevamente que en Argentina los chismes políticos pueden surgir de los lugares más insospechados. El escenario: un local de decoración. Los personajes: la vicepresidenta y una ex participante de Gran Hermano. El resultado: una explosiva controversia que rápidamente captó la atención de todos los seguidores.
¡NO LE GUSTÓ NADA!
Victoria Villarruel estalla contra un local de muebles: "Antes de usar mi foto..."
El negocio de muebles que promocionó a Victoria Villarruel en Instagram se convirtió en un escándalo, provocando la furiosa respuesta de la vicepresidenta.
Todo comenzó con un posteo que pretendía ser un simple halago comercial y terminó convirtiéndose en un verdadero escándalo. Carla De Stéfano, dueña de "Chula home deco", un negocio de muebles, consideró que la visita de la funcionaria merecía ser celebrada con bombos y platillos en su perfil de Instagram. Sin embargo, su estrategia publicitaria salió completamente por la tangente.
Las frases textuales que desataron la tormenta fueron lapidarias: "Hasta la vicepresidenta elige Chula para amueblar y decorar su hogar" y "Nuestra relación precio-calidad es tan buena que hasta la vicepresidenta sabe que vale la pena venir a Chula". Asimismo, un detalle que no pasó desapercibido fue la imagen de Victoria Villarruel sentada en un sillón de 1,50 metros valorizado en $360.000.
El tema está, en que la respuesta de Villarruel no se hizo esperar, y con la precisión de un bisturí, la funcionaria manifestó su molestia: "Creo que antes de usar mi foto para promocionar productos debieran haberme preguntado. Sobre todo porque hice una compra como la que hace cualquier ciudadano y no fue por canje". Su descargo fue contundente y dejó poco espacio para la interpretación.
"La próxima vez pregunten así uno no es acusado de recibir cosas gratis", culminó diciendo.
El inesperado conflicto de Victoria Villarruel con un local de muebles
La situación escaló rápidamente cuando "La Chula" decidió defenderse. Con un discurso que mezclaba su formación profesional y sus principios éticos, la empresaria aclaró: "Soy abogada recibida en la UBA, los ideales de justicia, libertad, justicia social, el respeto hacia los DD HH y los rectores de la Constitución nacional son los pilares de mi vida y de mi manera de pensar". Agregó aclarando que recibir a la vicepresidenta no implicaba compartir necesariamente sus ideas.
“La recibimos como a todos ustedes, con la particularidad que me resultó notorio que venga a Chula y subí las imágenes. Apelo a vuestra razonabilidad y criterio”, añadió De Stéfano.
En lo que respecta al desenlace, este fue tan vertiginoso como los inicios del conflicto. El local de muebles experimentó una masiva baja de seguidores, mientras que las redes sociales hervían con comentarios y especulaciones sobre el encontronazo entre la política y la cultura de famosos.
La ex Gran Hermano optó por eliminar las fotos de su perfil, aunque las redes continúan recordándolas.
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