Uruguay tendrá una nueva Ley de Medios tras su aprobación en Diputados en la medianoche del miércoles. Una sesión acalorada, con chicanas y ambiente hostil, por críticas del frente amplismo (FA) por el artículo 71 -que genera controversias sobre la libertad de prensa-.
URUGUAY
Ley de medios 'pro-monopolio': Diputados la aprobó y Lacalle Pou no va a vetarla
La Cámara Alta (Diputados) de Uruguay aprobó la ley de medios impulsada por Lacalle Pou que favorece la concentración mediática y cuyo artículo 72 de "imparcialidad" genera controversias. El presidente no la vetaría.
La nueva regulación mediática, luego de ser aprobada en Cámara Alta —con 50 votos a favor y 41 en contra—, pasa a firma presidencial y todo indica que Lacalle Pou, impulsor de esta ley de medios, no va vetarla.
Diputados trató por más de diez horas el proyecto de Rendición de Cuentas, pero recién a las 21.30 de ayer retomó el proyecto de ley del Poder Ejecutivo que modifica la ley de medios. La votación se reanudó luego de la fallida y acalorada sesión del martes, entre chicanas y cruces por esta nueva regulación que habilitaría al monopolio y atentaría contra ciertas libertades de expresión: de cualquier manera se aprobó.
Tanto la Oposición como organizaciones de la Sociedad Civil cuestionan esta ley de medios y hablan de un retroceso en materia de DD.HH porque este proyecto de ley sería contrario a los estándares interamericanos de libertad de expresión, ya que favorece la concentración, la extranjerización de la propiedad de los medios de comunicación, y eliminaría la participación pública y control ciudadano en los procesos de adjudicación de frecuencias, tal como contó Urgente24.
Ahora bien, el artículo 72 de la nueva ley de Medios, el quid de la polémica, es una enmienda de la coalición oficialista Cabildo Abierto y establece que "los servicios de difusión regulados por la presente ley tienen el deber de brindar a los ciudadanos información, análisis, opiniones, comentarios y valoraciones de manera completa, imparcial, seria, rigurosa, plural y equilibrada entre los actores políticos y respecto a los mismos".
"Esta obligación comprende a todos los programas y espacios que emitan análisis, opiniones, comentarios, valoraciones e información de carácter político en el sentido más amplio del término, incluyendo contenidos de alcance gubernativo, parlamentario, legislativo, administrativo, partidario, jurídico, académico y electoral", según señala.
Pero la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y parlamentarios del Frente Amplio (FA) repudiaron tal artículo porque afirman que impone obligaciones a los medios de comunicación y que atenta contra la libertad de expresión al no poder dar puntos de vistas.
Voces a favor y en contra de la ley de medios
La ley de Medios aprobada este miércoles en Diputados, aumenta el máximo permitido de licencias por titular, por lo que habilita a la concentración mediática.
Según lo estipula esta nueva ley de medios, una persona física o jurídica o un grupo económico puede ser titular de hasta cinco licencias en la zona metropolitana y de hasta seis licencias en el resto de Uruguay para “para prestar servicios indistintamente en cualquiera de las bandas de radiodifusión y de televisión abierta”.
Esta nueva ley de medios propuesta por Lacalle Pou establece que “en caso de que la misma persona física o jurídica o grupo económico sea titular total o parcialmente de licencias tanto en la zona metropolitana como en el resto del país, no podrá superar en su conjunto la cantidad de seis licencias”.
En el caso de la televisión para abonados por cable, se impone un nuevo tope de ocho licencias.
En ese sentido, el diputado del Frente Amplio (FA) Carlos Varela fue el primero en hablar en la sesión de este miércoles sobre la nueva ley de medios aprobada y la 'doble vara' del oficialismo. Aseguró que fue un “acto más de un largo proceso de debate, que comenzó antes de la aprobación de la actual ley de medios” (19.307), que se aprobó a fines de 2014, durante el gobierno del entonces presidente José Mujica, sólo con los votos del FA.
“Esa noche, cuando se aprobó el proyecto, comenzó este debate. Cuando, quienes en aquel momento eran oposición, señalaron que apenas cambiara la correlación de fuerzas, iban a derogar la ley que estábamos aprobando. Y desde entonces hasta ahora, de una manera o de otra, se ha estado debatiendo respecto al contenido de la ley que hoy finalmente, seguramente con las mayorías adecuadas, quedará derogada”, sostuvo.
En ese sentido, el frenteamplista Varela recordó que el actual candidato del Partido Nacional (PN), Álvaro Delgado, qe pregona por la nueva regulación mediática, cuando en 2014 era diputado e integraba la Comisión de Industria que trató aquel proyecto, criticaba tal ley de medios al decir que era una iniciativa “enorme, un código”, porque tenía más de 202 artículos.
El diputado del FA luego recordó que cuando Delgado asumió este gobierno, una gestión que presentó un proyecto de 476 artículos, la ley de urgente consideración (19.889), la "nueva ley de medios", no criticó nunca su extensión.
“Ahora estamos aprobando un proyecto cuando faltan seis semanas para el receso [parlamentario], pero con una diferencia sustancial: cuando aprobamos esto en 2014, ya la ciudadanía se había expedido y el gobierno [siguiente] era del mismo signo del que estaba aprobando el proyecto de ley; los próximos cinco años el FA iba a ser gobierno. Ahora tenemos una incertidumbre, no sabemos quién va a gobernar. Pero acá hay elementos que obligatoriamente van a tener que ser cumplidos por el próximo gobierno, esté o no esté de acuerdo”, recalcó.
A lo que hace referencia es a la ley de medios frenteamplista, aún vigente hasta que rija la nueva (si Lacalle Pou no la veta), que estipulaba como límite un máximo de 3 licencias para radiodifusión abierta de radio o televisión y de seis licencias para televisión para abonados por cable. Además disponía que este último número “sea reducido a tres en el caso de que una de las autorizaciones o licencias incluya el departamento de Montevideo”, una manera de evitar el monopolio mediático.
Sin embargo, la nueva ley de medios oficialista aprobada en Diputados establece que ninguna persona podrá ser titular al mismo tiempo de una licencia para “prestar servicios de difusión de contenido audiovisual de televisión satelital o por cable para abonados” y de una licencia para “prestar servicios de radiodifusión abierta o de otras licencias para difusión de contenido audiovisual de televisión para abonados”.
“La televisión para abonados ya no va a tener ningún tipo de límite”, por lo que “alguien con suficiente billetera podría comprarse todos los cables del país”, afirmó el director del Observatorio Latinoamericano de Regulación, Medios y Convergencia (Observacom), Gustavo Gómez, en declaraciones a la emisora M24.
En cuanto a la televisión abierta y radio, pone mayores límites a la restricción para concentrar licencias y permisos. “una sola persona o empresa podría llegar a tener todos los medios de un departamento o de una región”, implicando un problema para “la democracia”.
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