EXCLUSIVO 24

EL RIESGO DEL LABERINTO

De las libretas de Néstor K. al Excel de Kulfas para Alberto F.

La melancolía no es buena compañera. Provoca una incorrecta conclusión inicial: "Todo tiempo pasado fue mejor". Luego, cada tiempo tiene sus desafíos y sus oportunidades. Alberto Fernández debería tenerlo presente cuanto antes.

Muy ilustrativa la nota de Carlos Burgueño, en el diario Ámbito Financiero, en especial porque se le reconoce tener acceso directo a la fuente más interesante en Casa Rosada. La idea de que Alberto Fernández manda a sus colaboradores a repetir la rutina que seguía con Néstor Kirchner es preocupante por 3 motivos:

** Néstor K renunció a tener una política económica, en especial desde el despido de Roberto Lavagna, y decidió acotar su territorio de información y decisión a la errática coyuntura (el famoso 'día-a-día'), pese a las advertencias de muchos acerca de que era una forma precaria de gestión que, sin una soja a US$750 la tonelada, hubiera explotado antes que llegara CFK al poder.

Burgueño cuenta: "(...) Cada jornada, por la mañana, la rutina es la misma. Santiago Cafiero, Cecilia Todesca y Raúl Rigo se reúnen en un despacho del primer piso de la jefatura de Gabinete para analizar, computadora en mano, las variables fundamentales de la economía. El anfitrión, la vicejefa de Gabinete y el secretario de Hacienda repasan detenidamente lo que sucedió el día anterior en cuanto al comportamiento de la recaudación impositiva, especialmente las liquidaciones que hacen las grandes empresas y contribuyentes en el IVA y Ganancias, como también lo que aporta cada jornada el flamante impuesto PAIS a las compras de dólares hasta $200 mensuales por cuenta. (...)".

Provoca comentarios que el ministro Martín Guzmán no aparece mencionado entre quienes se reúne. Por un lado, ratifica su circunscripción a la deuda pública. Luego, su ausencia concede verosimilitud a la hipótesis de que la clave de la gestión es la disponibilidad de 'Caja'. En definitiva era lo que interesaba a Néstor K. Gestionar una economía desde la disponibilidad cotidiana de recursos provoca un exceso de celo por el cortísimo plazo, casi lo que en finanzas sería un 'overnight', pero ¿contra qué variables se comparan? ¿Cuál es el 'benchmark', si es que hay alguno? ¿Permite definir las correcciones necesarias?

** Los líderes políticos tienen un problema con la inflación, no la comprenden pero igual toman decisiones y, a menudo, así sólo se potencia el problema. La inflación que había cuando asumió Néstor K, comparada con la que dejó CFK, sólo revela un fracaso rotundo que luego Mauricio Macri convirtió en un apocalipsis

Burgueño afirma: "(...) Finalmente, Cafiero, Todesca y Rigo pasan al último capítulo de la rutina matinal. Desde hace un mes funciona de manera diaria un Excel preparado por el Ministerio de Producción de Matías Kulfas, con la evolución del precio diario de 900 productos de primera necesidad (alimentos, bebidas y consumo masivo), que incluye tanto los que están dentro del programa Precios Cuidados como otros “liberados”. Y cada vez que hay algún tipo de distorsión en el listado, los responsables del área son contactados para advertirlos y pedirles explicaciones; las que, irremediablemente, al otro día deben ser enviadas para el análisis del grupo. (...)".

Este relato obliga a imaginar a un Guillermo Moreno de buenos modales, según explicaría José Luis Espert.

Creer que así se frena la inflación puede provocar conclusiones peligrosas.

** Hay quejas de que el Estado se está movilizando a una velocidad extremadamente baja. Y aparecen ejemplos acerca de esa ineficiencia en la gestión gubernamental.

Burgueño otra vez: "(...) Una vez terminado el control de fiscalización de los tres funcionarios, se elabora un “paper” de tres pantallas de computadora, que inmediatamente es enviado al Presidente. El trío debe esperar a que el jefe de Estado las analice, saque sus conclusiones, dicte sus órdenes sobre si se necesita más información de alguno de los ítems y si hay algún funcionario del gabinete que debe ser consultado para profundizar alguna cuestión (en general, vinculado con el dólar, la inflación y las reservas), antes de dar por terminada la sesión. Sólo después del visto bueno de Alberto Fernández, Cafiero, Todesca y Rigo pueden volver a sus otras tareas habituales y desarrollar el resto de su rutina."

Es decir que 3 de los funcionarios más importantes de la Argentina dedican gran parte de su actividad cotidiana a tareas casi administrativas, lo que supone una productividad muy baja y un derroche de recursos humanos altamente calificados.

Luego, ¿Alberto Fernánez es el Presidente de la Nación o el jefe de Gabinete de Ministros?

Porque el Jefe de Gabinete de Ministros aparece haciendo casi de secretario privado del Presidente, y se desconoce, en el relato muy confiable del periodista de Ámbito Financiero, por qué motivo Alberto F. eligió una metodología de gestión sin delegación de funciones.

Si Alberto F. es el Presidente pero el Jefe de Gabinete de Ministros, la ralentización de la gestión es explicable aunque no justificable.

** Otra vez: ¿hay plan o no hay plan?

Burgueño describe: "A partir del análisis del Excel de las últimas semanas, el Gobierno sacó algunas conclusiones (...)".

¿El rumbo de la economía argentina se está definiendo según la evolución cotidiana de una planilla Excel?

Urgente24 no deslizará ninguna opinión propia al respecto. Sin embargo, es difícil imaginar a Donald Trump o Vladímir Putin (quien heredó una Rusia más complicada que la Argentina 2020), gestionando el Estado en un modelo equivalente.

Al respecto hay un agregado en la pluma de Burgueño: "(...) La costumbre del Excel es un revival de algo que Alberto Fernández le vio hacer a Néstor Kirchner durante los cuatro años de gestión entre 2003 y 2007. El entonces presidente llevó a la Casa Rosada una costumbre que, a su vez, trajo de Santa Cruz. Todos los días, desde el Ministerio de Economía, se le debía enviar una hoja impresa con los resultados de las principales variables macroeconómicas; especialmente los ingresos tributarios, gastos y el nivel de reservas. También cada mañana plasmaba esos números en un cuaderno Gloria que luego servía de control fiscal. Aseguraba Kirchner que ese método algo anticuado sería la base para sostener el superávit fiscal ya que “el criterio almacenero” nunca fallaría. (...)".

Las libretas de Néstor K fueron en su momento motivo de muchas bromas. 

En verdad, los superávits gemelos se mantuvieron gracias 

** al precio de la soja, 
** a una economía que todavía era competitiva (la infraestructura y la capacidad instalada que dejó Carlos Menem toleró toda la desinversión posterior hasta la fecha) y 
** a que Lavagna era un ministro con autonomía por personalidad, contactos y capacidad de decisión.

Así como algunas de sus malas decisiones iniciaron el derrotero de la inflación, algunas de sus buenas decisiones mantuvieron el doble superávit aún cuando Néstor K no lo escuchó en temas decisivos como el peligro de enamorarse del atraso tarifario.

Ahora bien, los cuadernos de Néstor K tenían un problema de fondo: comparar la gestión de una provincia con la Nación. La complejidad de la tarea de Alicia Kirchner no es la de Alberto Fernández, por dar un ejemplo concreto.

Está muy bien que Alberto F. valore sus 4 años junto a Néstor K, es encomiable su devoción hacia su amigo y líder, y es elogiable que no oculte su aprendizaje. Pero la Argentina 2020 requiere que revisar algunos conceptos básicos.

Dejá tu comentario