Por la escalada de la inflación, estiman que el índice creció nuevamente en 2022. ubicándose en torno al 40%.
Según los últimos registros oficiales, la pobreza fue del 40,6% en el primer semestre de 2021, por lo que afectaba a 11,7 millones de argentinos, retrocediendo 1,4 puntos respecto de fines de 2020 y 0,3 frente al primer semestre del año anterior.
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A la vez, con la difusión de los datos de la incidencia de la pobreza y la indigencia del segundo semestre de 2021, se conocerá el acumulado del indicador durante todo el año, una cifra que seguirá de cerca el FMI, que aseguró querer "sacar al país de la alta inflación y la pobreza", según la propia directora del FMI, Kristalina Georgieva.
Por el momento, el gobierno no pudo ni puede controlar la inflación (la medición de febrero arrojó una aceleración del 4,7% en febrero), y si bien para la pobreza esperan una leve disminución, la inflación que no cede promete arruinar toda esperanza, y hacerla subir mucho más.
"La medición de pobreza es muy imperfecta en la Argentina porque hay mucha economía informal. La presunción es que la inflación le va a pegar a esos bolsones de pobreza e indigencia que no podemos medir, pero podemos ver simplemente saliendo a los conurbanos de las grandes ciudades", advirtió el economista Eduardo Levy Yeyati.
Anoche 'Telenoche' mostró un informe del que da cuenta 'TN' hoy donde pude observarse la pobreza extrema que se ve en las calles del conurbano, de las que habla el economista.
Pobreza, entre el 38% y el 40%
Según la opinión de analistas, la desocupación, que bajó al menor nivel desde 2017 puede ser una explicación que justifique la baja de los indicadores de pobreza e indigencia en comparación con 2020, cuando finalizaron en 42% y 10,5%, respectivamente, y también mejor que en el primer semestre de 2021, con indicadores que alcanzaron el 40,6% y 10,7%, para cada caso.
La semana pasada el organismo de estadísticas oficiales dio a conocer que la Argentina logró la menor desocupación desde 2017 y mostró un fuerte avance -de 3,5%- en la tasa de empleo, que creció de 40,1% a 43,6 por ciento. En el cuarto trimestre de 2021, la tasa de empleo alcanzó el 43,6% de la población. Asimismo, la tasa de desocupación cayó al 7% de la Población Económicamente Activa, y así se ubicó en su nivel más bajo desde 2016.
No obstante, dada la alta inflación – en febrero fue 4,7% y acumuló 52,3% en los últimos doce meses según el INdEC- para el primer trimestre de este año, estimaciones privadas que suelen anticipar con alta precisión el dato oficial, indican que la pobreza volvió a subir y alcanzaría al 40,3% de la población. Otra vez, el acelerado avance de la suba de precios, particularmente de alimentos, es uno de los principales argumentos para explicar la situación.
Pobreza, según la UCA
El director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), Agustín Salvia, anticipó que la estimación propia que hace ese organismo fue de "43% en el tercer trimestre, con tendencia a la baja". "Si analiza la proyección de los últimos meses, había una recuperación del empleo, muchos de ellos precarios pero con familias que pudieron reintegrarse" al mercado laboral, indicó.
Respecto a los índices oficiales, anticipó que "la tendencia estaría por debajo del 40% para el segundo semestre en promedio" lo que estará explicado por "un proceso que mejoró, no porque la inflación haya bajado sino porque el empleo y la inversión pública mejoró. Recuperó empleo perdido, aunque haya sido informal y precario", consideró.
Cabe recordar que la incidencia de la pobreza y la indigencia resultan de la capacidad de los hogares de acceder a la canasta básica alimentaria (CBA) y a la canasta básica total (CBT) mediante ingresos monetarios.
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