Boca dio una buena bocanada de aire y respiró hondo: le ganó Godoy Cruz por 4 a 1, en la fecha 21 de la Liga Profesional. El Xeneize empezó perdiendo al minuto de partido, pero se repuso rápidamente y al final terminó coronando un marcador abultado.
LIGA PROFESIONAL
Boca dio una clase abierta de psicología frente a Godoy Cruz en La Bombonera
Boca venció de manera contundente a Godoy Cruz por 4 a 1. El partido del equipo de Fernando Gago fue una muestra de cuánto influye lo mental.
06 de noviembre de 2024 - 19:00
Cavani lo grita con todo: fue el empate de Boca tras ir perdiendo desde el minuto 1
Esta tarde, Boca fue una muestra de la influencia de lo mental y emocional en el fútbol. Una clase abierta de psicología. En tiempos en donde muchas veces se reduce a lo táctico y estratégico, el factor humano golpeó fuerte la mesa en La Bombonera este miércoles y dijo: "Yo también juego".
A Boca lo cachetearon y despertó
Es que el Xeneize jugó, hoy, como si no fuera el Xeneize. Es decir: como si fuera el Xeneize de otro tiempo; el del primer semestre, quizás, cuando Diego Martínez era DT y había encontrado un funcionamiento que gustaba y se imponía. Hoy, el conjunto de Fernando Gago jugó como si Fernando Gago estuviera hace meses en el banco de suplentes, y como si los futbolistas en cancha se conocieran desde hace años y se entendieran a la perfección.
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Bastó empatar el partido para que Boca se sintiera fuerte, capaz, competitivo, experimentado. Godoy Cruz, al minuto de partido, se puso al frente con un gol de Fernández. A partir de ahí, el elenco local fue otro. Empujado por una hinchada que iba entre el aliento y la bronca, a los 9 minutos lo igualó Aguirre.
Y, a los 22´, una jugada espectacular entre Pol Fernández, Zeballos, Belmonte y Barinaga, que el lateral derecho culminó con un centro rasante para que Cavani la enviara a la red. Barinaga fue un buen reemplazo de Advíncula; el entrenador decidió dejar al peruano en el banco.
Boca mostró un buen nivel general en sus futbolistas
Godoy Cruz, si en algún momento estuvo en partido, fue solo en ese primer minuto en que madrugó al rival. Después fue todo del Xeneize, que aprovechó todas las licencias del conjunto mendocino. Saracchi, de gran partido, demostró ambición al no dar por perdida una pelota que parecía sencilla entre defensor y arquero del Tomba, que se molestaron ridículamente entre sí y que el defensor de Boca aprovechó. Fue a los 48´.
A lo largo del encuentro, y asentado en un sistema 4-3-3, Boca se sintió cómodo. Juntó pases, ganó duelos, cortó rápidamente los ataques de Godoy Cruz. Se amigó con la pelota, fue paciente y verticalizó cuando tuvo que hacerlo. Tuvo varias chances de gol para extender el marcador desde el tanto de Saracchi (que le devolvió el voto de confianza a Gago tras haberlo elegido como titular por sobre Lautaro Blanco). Pero el cuarto tanto llegó a los 82´, en los pies de Exequiel Zeballos y tras una gran pared con Merentiel (que había ingresado hacía poco). El Changuito volvió al gol y vaya que lo necesitaba: lo festejó entre lágrimas.
Boca consiguió tres puntos fundamentales. Fue una bocanada de oxígeno. Es verdad que sirve sumar para la tabla de la Liga Profesional y también para la tabla general, que define quiénes ingresan a la s copas. Pero más sirve para recuperar confianza.
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