CFK presa: El plan secreto del Gobierno para trasladar a Cristina Kirchner a Comodoro Py

CFK tendrá que cumplir su condena por corrupción en la obra pública.

Arranca una semana decisiva para Cristina Fernández de Kirchner (CFK) y en las próximas horas la ex presidenta será el eje central de la política argentina. En ese sentido, mientras avanza el proceso judicial que derivará en el cumplimiento de la condena a seis años de prisión, el Gobierno ultima un dispositivo de seguridad de máxima escala para su traslado.

En concreto, el gobierno de Javier Milei, con la ministra Patricia Bullrich a la cabeza, ultima detalles para lo que será el operativo de máxima seguridad que acompañará el traslado de Cristina Kirchner desde su domicilio hasta los tribunales de Comodoro Py.

Según fuentes oficiales, el operativo involucrará a las cuatro fuerzas federales y busca minimizar cualquier riesgo durante el traslado y en el perímetro de los tribunales.

Cómo será el traslado de CFK

La coordinación del despliegue está a cargo del Ministerio de Seguridad, bajo la conducción de Patricia Bullrich, prevé blindar la zona de Comodoro Py con un vallado perimetral similar al que se implementa en grandes movilizaciones en el Congreso. La idea es establecer un doble anillo de seguridad y aplicar cortes parciales en las inmediaciones para impedir desbordes o enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad.

Además de custodiar el recorrido desde el departamento de la expresidenta, ubicado en el barrio porteño de Constitución, el Gobierno también prevé el despliegue preventivo de efectivos de la Policía Federal, Gendarmería, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires, con el objetivo de contener las movilizaciones convocadas en respaldo a la exmandataria. En Balcarce 50 remarcan que buscarán evitar el bloqueo total de calles y aplicar el protocolo antipiquetes para mantener el flujo del tránsito.

El Gobierno busca evitar "el show mediático"

En la Casa Rosada subrayan que el traslado se realizará bajo estricta discreción. “No queremos un show mediático, ni filtraciones de imágenes del procedimiento de detención, ni de los trámites de rigor como la toma de huellas o la foto de registro”, remarcan funcionarios del entorno presidencial al periodista Ignacio Salerno, de TN. Desde el oficialismo insisten en que el operativo respetará el protocolo correspondiente a una ex jefa de Estado.

Cristina Kirchner confirmó públicamente, a través de sus redes sociales, que se presentará este miércoles ante el Tribunal Oral Federal 2 para formalizar su detención. Como respuesta, el Partido Justicialista y distintas agrupaciones sindicales —entre ellas ATE, las dos CTA, la UOM, La Bancaria y SMATA— anunciaron una movilización en su respaldo. Algunos sectores sindicales ya comenzaron a realizar cortes en puntos estratégicos, como la autopista Panamericana, el mismo día en que se oficializó la condena.

Deciden en Comodoro Py

Mientras tanto, el Gobierno presentó ante la Justicia una propuesta concreta para su eventual lugar de detención dentro del Servicio Penitenciario Federal, en caso de que la prisión domiciliaria solicitada por la defensa no sea concedida. El ofrecimiento fue entregado en sobre cerrado por el Ministerio de Seguridad el jueves pasado.

No obstante, el escenario judicial aún no está cerrado. El TOF 2, a cargo del juez Jorge Gorini, evalúa la posibilidad de definir la prisión domiciliaria antes de que Cristina Kirchner deba trasladarse físicamente a los tribunales. Incluso se analiza realizar la notificación de manera remota mediante una audiencia virtual. En su solicitud, la expresidenta planteó que su traslado implicaría un "desgaste innecesario" tanto para el Estado como para la seguridad pública.

En paralelo, dentro del propio oficialismo conviven miradas contrapuestas sobre el clima de tensión social que pueda generarse. Algunos funcionarios consideran que, ante eventuales disturbios, el Gobierno podría capitalizar políticamente la imagen de orden frente al desorden callejero. “La gente está cansada de los cortes y la violencia. Si hay incidentes, nos beneficia”, analizan en la mesa chica de Casa Rosada.

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