La carta de despedida a una de las víctimas
La muerte de la niña de 12 años era la hija de Susan Carmín, maestra del Centro de Primera Infancia “Los sueños de Patricia”. Las compañeras de trabajo fueron hasta el lugar del derrumbe para acompañarla.
Natalia Izquierdo, maestra de la institución y docente auxiliar de la sala de 3 años, comentó a Télam que “Susan estaba en la vivienda, lo que pasa es que la hija que falleció estaba en su habitación por irse a descansar, en ese sector era donde se derrumbó todo”.
Además, Marcelo Lodigiani, padre de una compañera de la menor fallecida, escribió una carta de despedida titulada “Adiós Gaby”:
“Acaba de morir una niña de 11 años, querida amiga desde Jardín de nuestra hija... aplastada, reventada por el derrumbe de un precario edificio en Floresta, destruida por la desigualdad y la ausencia del Estado, por nuestra anestesia social. Dolor, dolor dolor... Ella muerta y el resto internado
Es la hija de todos y todas!! Es nuestra hija!! Son nuestros hijos!!!
Ella, que en paz descanse, fue hasta ayer una alumna brillante de escuela pública, que en pocos días sería abanderada, elegida por sus compañeras y compañeras por su calidad humana,
La mamá, con 3 trabajos para sobrevivir, y aún asi no lograr una vivienda que no mate a sus hijas.
Una familia humilde, super unida, super trabajadora, de qué sirvió?
La desigualdad que empuja una vez más la muerte de inocentes.
Con varios trabajos y apenas poder pagar un alquiler en un edificio precario, codeándose con la miseria y la muerte.
Una vez más la ausencia y anuencia total del Estado bobo.
La descomunal desproporción que las políticas y la ambición profundizan, alimentados por los discursos de odio.
Decenas de familias fueron sepultadas, en el derrumbe, en una ciudad rica e insensible. Se quedaron sin nada.
Somos fundamentalmente sus sostenedores, por....
Mirar para otro lado
Aceptar políticas públicas de desigualdad y clasismo.
Alimentarnos de discursos de mierda
Y siempre cobrándose a los más débiles
Y seguirá ocurriendo, muriendo y hambreando niños y niñas, y seguiremos cada vez más insensibles, Por más que se esfuercen, por más que sean los mejores estudiantes, por más que tengan 3 trabajos.
Querida niña, que en paz descanses, Y jamás nos disculpes!! Somos tus verdugos!!!”