El desgaste de Guillermo Francos y la crisis del ala política de LLA

Con el mandatario de Chubut, el macrista Ignacio Torres, discutió aspectos relacionados a la actividad pesquera y acordó cambiós en la letra de la 'Ley ómnibus'. Con el tucumano Osvaldo Jaldo, comentó, habló de la industria azucarera y del impuesto a las Ganancias.

Estos encuentros se realizaron el jueves. Horas antes, el vocero presidencial, Manuel Adorni, desmentía versiones de internas dentro del gabinete que pudieran conducir a la renuncia de Francos. "Falso de toda falsedad", dijo el vocero.

Las postales de gestión de Francos también pretenderían mostrarlo firme en su cargo.

Pero es inocultable el desgaste del ministro político de Milei, cuando el Presidente ha optado por reducir la negociación política. Ya ha amenazado con llamar a una consulta popular o emitir más DNUs si el Congreso no le aprueba la 'Ley ómnibus'.

Francos está alejado de la mesa chica del Gobierno, integrada por Milei, la hermana Karina, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello. Esto fue reconocido por el propio ministro del Interior en conversaciones privadas. Él puede prometer, pero eso luego debe ser convalidado por una unidad política superior.

A pesar de la desmentida de Adorni, las internas dentro del gobierno libertario están a la orden del día. Al ministro del Interior le estarían facturando no haber convencido a los gobernadores, con uno u otro método, para que garanticen los votos para sacar el paquete de reformas y la delegación de facultades en el transcurso de enero.

Algunos le adjudican al jefe de Gabinete acicatear animosidad sobre ese presunto fracaso de Francos. Otro señalado puertas adentro de la Casa Rosada por las demoras sería el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, pero este tiene mandato por un año y no está a tiro de decreto como Francos.

En ese marco, aparece la versión de que Mauricio Macri quiere la cabeza del ministro del Interior para reemplazarlo por Diego Santilli.

Publica este viernes La Política Online:

"Mauricio Macri decidió profundizar su ofensiva contra el ministro del Interior Guillermo Francos. El ex presidente pretende que Javier Milei acepte nombrar en su lugar al diputado Diego Santilli, que luego de las elecciones se alineó con Macri y obedeció su orden de abrindarle un apoyo cerrado al gobierno de Milei.

Mientras la ley ómnibus empieza a carretear con dificultad en el Congreso con la conformación de las comisiones, en los bloques aliados del gobierno observan con inquietud la actuación de Francos.

Ausente en la reunión que el presidente Javier Milei tuvo con los diputados libertarios esta semana, y apuntado además por la escasez de resultados en las negociaciones con gobernadores y CGT, la continuidad del exfuncionario de Daniel Scioli y Domingo Cavallo fue motivo de rumores estos días en Córdoba.

Particularmente, porque en el Ejecutivo que lidera el gobernador Martín Llaryora no encuentran avances en el diálogo con el interlocutor entre Nación y provincias; y también porque los diputados que estuvieron en las últimas horas en el Congreso observaron con atención un rumor fuerte: la intención del expresidente Mauricio Macri de impulsar para ese ministerio a Diego Santilli. El líder del PRO tiene la intención de que el exfuncionario larretista desplace a Francos de Interior y sea quien interactúe con los gobernadores.

[...] Milei esta en el peor mopmento de su relación con Macri porque como reveló LPO, se enteró de un nuevo encuentro secreto entre el ex presidente y Victoria Villarruel. Pero al mismo tiempo la situación de Francos en el gobierno es muy delicada porque viene de chocar con Karina Milei y acumula tensiones con el ministro de Economía, Luis Caputo. No es un secreto que Francos estaría exigiendo la embajada ante el Reino Unido para liberar el cargo".

La versión dispara la pregunta sobre si la eventual incorporación de Santilli cambiaría en algo la dinámica del Gobierno. Para estar en una situación mejor que la de Francos el diputado del PRO debería tener un lugar en la mesa chica del Presidente, apertura que a priori parece poco probable.

Luego, debería haber una mayor vocación del Presidente en no subestimar la rosca política y de no apoyarse sólo en la legitimidad que dan los votos. La negociación es importante para lograr éxitos. Fue una lección que les dejó la aprobación del paquete fiscal y el endeudamiento que buscó Axel Kicillof (que reeligió con 20 puntos de distancia en una única vuelta) en la legislatura bonaerense, algo que en la Casa Rosada, sin embargo, parece molestar.

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