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DICE LUKASHENKO

"Se arriesgan a comenzar la Tercera Guerra Mundial"

USA, Reino Unido y Canadá aplican sanciones contra el régimen de Aleksandr Lukashenko, quien arremete que se arriesgan a "comenzar la Tercera Guerra Mundial".

El lunes 9/8, Estados Unidos siguió el camino de Canadá y Reino Unido imponiendo duras sanciones contra el régimen de Aleksandr Lukashenko, en Bielorrusia. El gobierno de Joe Biden sancionó a casi medio centenar de altos funcionarios y empresas clave de los sectores de defensa, agricultura y energía. Lukashenko arremtió advirtiendo que las potencias occidentales se están a arriesgando a "comenzar la Tercera Guerra Mundial".

Entretanto, el presidente bielorruso, duramente cuestionado por sus violaciones a los derechos humanos, dijo que podría dejar su cargo "muy pronto". "No hay que especular sobre cuándo se irá Lukashenko y demás. Muy pronto", dijo el mandatario. Lukashenko fue reelecto hace un año con más del 80% de los votos -cómputo que tanto la oposición como Occidente rechazan-. En cuanto a la polémica Constitución que rige el país, el presidente dijo que habrá una reforma tras reconocer que la actual Carta Magna es "autoritaria".

"Habrá un nuevo presidente. Eso está claro. Pero no se puede traspasar esta Constitución, que realmente es autoritaria, al presidente que venga. Y es que no se sabe quién será y cómo se comportará", señaló. También admitió que fue él quien ordenó reprimir "sin disparar" las protestas antigubernamentales que estallaron tras las elecciones de 2020, aunque negó las denuncias de tortura a miles de detenidos. "En mi país no hubo ni habrá ninguna represión (...), nunca cruzaré esa línea", afirmó.

Sin embargo, luego de que en agosto pasado Lukashenko se declarara vencedor sobre Svetlana Tikhanovskaïa -elección que los organismos internacionales rechazaron como fraudulentas-, cuando los bielorrusos salieron a las calles, la respuesta dejó 35.000 detenidos y hay testimonios de torturas. Hay al menos 3 muertes que resultan sospechosas pero Lukashenko niega que se pueda hablar de represión, explica el diario La Vanguardia. “Todo es un complot entre la oposición y los servicios de inteligencia estadounidenses”, dijo.

En cuanto a las nuevas sanciones, Lukashenko calificó a las autoridades británicas de "lacayos" de Estados Unidos. "¿Quién introducirá sanciones económicas hoy? ¿Reino Unido? No, conocemos a Reino Unido desde hace 1.000 años y no queremos saberlo. Secuaces estadounidenses" dijo el presidente. "Se arriesgan a comenzar la Tercera Guerra Mundial. ¿Es eso a lo que están tratando de empujarnos a nosotros y a los rusos?", apuntó.

Las sanciones

El departamento del Tesoro estadounidense sancionó a un total de 44 empresas, entre ellas a una de las mayores compañías de fertilizantes del mundo, la poderosa Belaruskalia, y también lo hizo al Comité Olímpico Nacional bielorruso y a empresas de construcción y tabaco.

Las sanciones se impusieron por el presunto papel de esas figuras y compañías "en los ataques a la democracia y los derechos humanos, la represión" más allá de las fronteras de Bielorrusia y la "corrupción", aseguró Biden.

"Los actos del régimen de Lukashenko constituyen un intento ilegítimo de retener el poder a cualquier precio", denunció el presidente de Estados Unidos.

Tsimanouskaya habla desde Varsovia

Recordemos que recientemente la atleta bielorrusa Krystsina Tsimanouskaya denunció un intento de secuestro por parte de autoridades del Comité Olímpico de su país. Tras haber realizado críticas por cuestiones organizativas, 2 hombres intentaron forzarla a regresar a Bielorrusia, según relató. Tsimanouskaya se resistió, buscó refugio en la policía de Tokio y se encuentra a salvo en Varsovia.

Ayer, Tsimanouskaya dijo en entrevista con AFP que su país “ya no es seguro para sus propios ciudadanos”.

“La gente tiene miedo de ir a manifestaciones porque teme ser golpeada, tiene miedo de acabar en prisión”, aseguró la joven de 24 años desde una oficina de Varsovia de la Fundación Bielorrusa de Solidaridad Deportiva (BSSF). “Querría que mi país fuera libre, querría que cada ciudadano tenga derecho a la libertad de expresión, que todo el mundo pueda vivir una vida normal y deje de tener miedo”, afirmó.

Tsimanouskaya reconoció que solo se sentiría segura de volver si Lukashenko no estuviera más al poder: “Probablemente solo podría ser libre sin él”.

La deportista reveló que lo que la convenció de no regresar a su país fue una llamada de su abuela: “Ella me llamó y me dijo que no debía regresar a Bielorrusia y que debía hacer todo lo posible para no volver”.

Además, confesó que temía que si volvía iba a acabar “en una clínica psiquiátrica o en prisión”.