A está altura de la vida y del avance de la tecnología, existen muchas plataformas digitales para ver películas y series. Es tanta la variedad, que los usuarios no pueden decidir solo por una y, en muchos casos, se terminan suscribiendo a todas. Sin embargo, existe un número de gente que, para evitar gastar plata en ver su programa favorito, deciden recurrir a una plataforma específica que, no solo posee todo tipo de contenido, sino que es gratuita: Cuevana.
INTERNET
Cuevana: Ni siquiera la ley lo puede tocar
Uno de los sitios web más antiguos y de los que más ha quedado vigente hasta ahora, Cuevana es la página que no pueden cerrar.
La plataforma digital Cuevana, es un sitio web argentino que se dedica a distribuir cine y series de televisión. Fue fundada por Tomás Escobar en 2007 y, desde entonces, se ha convertido en uno de los preferidos de los usuarios, ya que permite disfrutar de producciones internacionales sin gastar un solo peso.
En 2011, la página fue uno de los 20 sitios web más visitados de Argentina, con más de medio millón de visitas diarias. Ese mismo año, Cuevana estrenó el primer lanzamiento de una película que no había pasado por las salas de cine, fue la película titulada Stephanie fue dirigida por el cineasta argentino Maximiliano Gerscovich.
Sin embargo, tras conocerse la resolución emitida por la Indecopi, donde ordena a los proveedores de servicios de internet bloquear distintas páginas que atenten contra los derechos de autor, la plataforma web fue una de las que encabeza la lista de ese tipo de portales.
Tomás Escobar, en una entrevista al diario La Nación en 2011, declaró:
En el proyecto también estuvieron involucrados Mario Cardosio y David Fernández, compañeros de universidad de Escobar. Los tres estudiaban ingeniería juntos y crearon la plataforma que para el 2011, era un gran éxito en diversos países como Chile, México y Perú.
Cuevana vs La Ley
Desde su gran crecimiento en 2011, la plataforma digital empezó a enfrentar distintas causas legales por diversos motivos, principalmente por la reproducción de programas o películas sin autorización de los estudios o casas televisoras.
Como consecuencia, se vieron obligados a cerrar el sitio web. En noviembre de ese año la cadena televisiva, HBO, demandó a sus fundadores por violar la Ley Intelectual que está establecido en el territorio argentino.
Sin embargo, la Cámara del Crimen de Buenos Aires negó la petición de la firma que ordenaba la restricción del acceso a la web en el país. Pero eso cambió cuando Ricardo Sénz, fiscal general de la Cámara del Crimen porteña, abrió una causa penal contra los responsables del sitio.
Se pudo probar que los fundadores conseguían recaudar plata con pagos online a través de donaciones, esas mismas llegaban a una cuenta a nombre de Escobar. Así lo confirmó el informe de la División Delitos Tecnológicos de la Policía Federal.
Efectivamente, ese tipo de demandas se siguieron repitiendo a lo largo de los años. Telecentro, en su momento, había bloqueado el acceso de los usuarios a Cuevana, lo que duró 24 horas porque cuando se hizo público, la compañía decidió sacar el bloqueo.
Las variantes de Cuevana
Con la gran popularidad que posee el sitio, la demanda de los usuarios fue masiva por lo que fueron expandiéndose pero con distintos nombres. Por lo tanto, comenzaron a aparecer muchas versiones como Cuevana 2, Cuevana 3, Cuevana Storm en Alemania, y así sucesivamente.
Sin embargo, muchas personas utilizaron el nombre de la página para atraer gente pero no otorgaban el mismo servicio, ni eran sitios web seguros.
Si bien Cuevana está en constante lucha por el cierre del sitio,existe un vacío legal en la ley de derecho a la información en Argentina. La misma establece que comete un delito quien almacene o exhiba copias ilícitas de un material protegido.
Pero la norma no aplica a un medio virtual como este, porque es un buscador de material protegido por lo que no almacena ni exhibe. Así lo señaló el experto en derecho informático Nicolás Tato a la cadena BBC.
Esta ley data de los años 30 y, al igual que en gran parte del mundo, está desactualizada respecto a los avances de la tecnología y la aparición de nuevos sitios, como las redes sociales.
Cuevana solo las exhibe pero estas están almacenadas en otros sitios webs, por lo tanto no alberga el contenido con derecho de autor. Este es el motivo por el que no infringe ninguna ley.
Cuevana 3, el sitio que “elude” la suspensión
El famoso sitio de streaming dejó de existir por unos instantes en marzo de este año pero, al poco tiempo, retornó a la web sin ningún problema.
Al principio, como muchas páginas piratas, fue despojado de su dominio por infracciones de derechos de autor. Con el correr de las horas, logró rebuscarsela para seguir en funcionamiento en el mismo portal pero con un dominio distinto.
Aún en la actualidad, no se sabe qué organización fue la causante de la baja de Cuevana 3, pero sí se sabe que no fue la Alianza para la Creatividad y el Entretenimiento (ACE), que es la que suele investigar a las personas que controlan estos sitios piratas.
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