El desbalance se atenuó por aportes extraordinarios por 1.709 millones de pesos, de los cuáles 1.499,8 millones fueron girados por la ANSES.
En tanto, el resultado primario -previo al pago de intereses de la deuda pública- arrojó un superávit de 1.061,4 millones de pesos, lo que implica una caída interanual de 46,2 por ciento.
El deterioro de las cuentas públicas se explica porque mientras los gastos subieron 32,1 por ciento a 37.650,5 millones de pesos, los ingresos lo hicieron 25,6 por ciento y se ubicaron en 40.632,5 millones.
Con el resultado de abril, el primer cuatrimestre cerró un con rojo financiero de 6.975,1, un bache que es 9 superior al que se había producido en abril de 2011 -759,9 millones de pesos.
[ pagebreak ]
Por su parte, el saldo primario muestra un superávit de 3.230,8 millones de pesos, pero es un 52,6 por ciento menor respecto al primer cuatrimestre del año pasado.
Según la planilla oficial este año los aportes fueron: 1.499,8 millones de ANSES, 187,4 del BCRA y 22,5 millones de las demás áreas.
La diferencia sustantiva con abril de 2011 es el origen de ese financiamiento extra, ya que en aquel mes el BCRA había aportado 823,6 millones de pesos y la ANSES 71,7 millones. El pago de deuda durante abril de 2012 aumentó 22,4 por ciento en forma interanual y alcanzó a 2.924,7 millones de pesos.
Agustín Monteverde explicó en un informe de la consultora Massot & Monteverde la gravedad de la situación:
"• Con datos finales de un trimestre y números de recaudación del cuarto mes del año, ya se va vislumbrando el comportamiento de las cuentas públicas para el corriente año.
• El déficit fiscal final —luego de pagar los vencimientos de la deuda— del primer trimestre se multiplicó por 14: estalló 1.369% interanual.
• El resultado primario —antes de pagar vencimiento de la deuda— se derrumbó 55%; de todas formas, cocina contable mediante, fue positivo.
• Este alarmante desempeño fiscal se dio tomando los datos a moneda corriente; si ajustamos por inflación los números, podemos ver que la situación es aun más delicada.
[ pagebreak ]
• El gasto primario creció 9 puntos porcentuales por encima de los ingresos; esto es, en términos relativos, 30% más rápido.
• El gasto de consumo y operación del estado aumentó 35,7% interanual.
• Las remuneraciones treparon a un ritmo de 40,2 % interanual, impulsadas por el fuerte crecimiento de la nómina de personal estatal.
• Los intereses en moneda extranjera, en cambio, tuvieron una leve suba de 6,1%, lo que permitió que la suba del gasto total no fuera bastante mayor.
• Otro rubro que sube con fuerza es prestaciones de la seguridad social, que salta 42,1% interanual, impulsadas por la concesión de jubilaciones a personas que nunca aportaron.
• El alza de los intereses en moneda local tuvo un fuerte salto de 62,3%.
• Otra cuenta que contribuyó a que el gasto no mostrase un salto mayor fue la de transferencias corrientes.
> Los subsidios al sector privado comenzaron a mostrar una desaceleración, ascendiendo 18% interanual, por debajo del ritmo de inflación.
[ pagebreak ]
> Las transferencias a provincias exhiben un freno más brusco: crecieron apenas 15,3 %, lo que significa una caída apreciable en términos reales.
• Pero, en lo que hace a aumentos, las palmas se la lleva el déficit operativo de las empresas públicas, que estalla 130% frente al mismo trimestre del año pasado.
• Otra cuenta que sirve para esconder el aumento de las pérdidas generadas por las empresas estatizadas es otros gastos corrientes, que vuela 121,1% interanual.
• Entre ambas, se gastaron nada menos que $ 4.276 millones; es decir, casi US$ 1.000 millones (N. de la R.: al tipo de cambio oficial).
• En lo que hace a los gastos de capital, se destacó una fuerte suba de 51,8% en la obra pública federal y un alza de 34,6% en las transferencias de capital a provincias.
• Los ingresos corrientes tuvieron una suba de 29,7% interanual, algo superior a la inflación.
• Los recursos tributarios del trimestre comenzaron a insinuar una suave declinación, que se pronunció en el cuarto mes del año.
[ pagebreak ]
• Las contribuciones apropiadas a la seguridad social superaron el desempeño de los impuestos, mostrando un alza de 32,3%.
• Las rentas de la propiedad —cuenta en la que se computa la distribución de pseudodividendos del BCRA y del Fondo de Sustentabilidad de la Seguridad Social— crecieron 17,7%, bien por debajo de la inflación.
• La perspectiva del gasto público es aun más sombría si consideramos la tendencia que insinúa el mes de marzo.
• El gasto de operación del estado —de muy difícil reestructuración— trepa nada menos que 50,3% frente a un año atrás.
• Las remuneraciones del personal estatal vuelan 58,2% interanual.
• Las prestaciones de la seguridad social escalan a una tasa de 49,3% interanual.
• Los intereses en moneda local estallan 87,2%.
• El único rubro del gasto corriente que sufre una desaceleración significativa son las transferencias corrientes.
> Los subsidios al sector privado profundizan la ralentización iniciada en los meses previos, subiendo sólo 15,6% interanual.
> Los subsidios dirigidos a las provincias son los que sufren un frenazo de magnitud: ascienden apenas 6,7 %, lo que marca una caída de casi veinte puntos en términos reales."