El normal desarrollo de los vuelos comerciales en Argentina se ha vuelto un verdadero desafío para el Gobierno nacional que mantiene enfrentamientos con sectores clave en la materia. Si bien el conflicto con Aerolíneas Argentinas e Intercargo son los principales, ahora se sumó uno con los controladores aéreos.
CIELOS CUBIERTOS
Vuelos en jaque: Las torres programan paros en septiembre
La tensión aeronáutica es cada vez mayor. Ahora, las torres de control podrían entrar en “guerra” sindical con el Gobierno nacional.
Se trata de los trabajadores nucleados en la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA), que anticiparon un cronograma de medidas de fuerza que afectará a todo el sistema aeronáutico nacional a partir de septiembre. Con asambleas programadas al menos hasta el día 13 del corriente mes, los controladores prometieron dar lucha en reclamo a una recomposición salarial acorde a la tarea, una de las más demandantes del universo laboral nacional.
Las medidas dispuestas por el gremio que nuclea a 1200 afiliados a lo largo de todos los aeropuertos nacionales corresponden a asambleas de entre 2 y 3 horas por turno, lo que supondría severos problemas para las operaciones tanto de cabotaje como internacionales que parten y llegan al país. Así, cientos de miles de pasajeros quedarían a merced de la protesta a la hora de ejecutar sus viajes, al igual que las respectivas aerolíneas o servicios.
El Gobierno quiere asegurar los vuelos
Con vista a ese frente de conflicto, el Gobierno nacional instruyó a la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) declarar ilegal la medida de fuerza de los controladores que apunta a suspender el despegue, restringiendo las autorizaciones de aeronaves y vehículos en tierra y la recepción o transmisión de planes de vuelo en los horarios publicados. Según la compañía estatal encargada de explotar y mantener el sistema de control, el paro programado “no responde a los intereses de los trabajadores”.
Así, EANA planteó la posibilidad de recurrir a medidas judiciales contra los controladores que se plieguen al paro dispuesto por ATEPSA. Con esa presión, el Gobierno nacional intentará desactivar la medida, que tiene como fecha de inicio el próximo 6 de septiembre.