Mientras se esperan los resultados de los estudios toxicológicos para determinar si los detenidos y la víctima de la violación grupal en Palermo estaban bajo los efectos de estupefacientes y si la joven había sido drogada, la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta planteó su visión del hecho y generó un debate en las redes sociales.
GÓMEZ ALCORTA
Violación en Palermo: "Son prácticas aprendidas"
La ministra de Mujeres planteó que la violación en Palermo forma parte de "prácticas aprendidas" por "varones socializados en esta sociedad".
02 de marzo de 2022 - 13:02
Los detenidos por la violación en Palermo.
“Monstruos” o “varones socializados”
Los peritajes realizados en el marco de la investigación por la violación en Palermo confirmaron el ‘acceso carnal’ a la joven de 20 años que fue rescatada por un grupo de vecinos del interior de un auto con 6 varones que estaban abusando de ella.
Este miércoles (2/3) se esperaba la declaración de los jóvenes acusados de violación, cuya situación judicial podría agravarse por el concurso de más de 1 persona y la premeditación, en caso de que hayan intoxicado a la joven para cometer el delito.
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Para Elizabeth Gómez Alcorta, el caso "no se trata de un hecho aislado" y afirmó que los responsables "no son monstruos, son varones socializados en esta sociedad".
"No se trata ni de hechos aislados, ni de hechos que estén vinculados a personas, varones, con algún problema en particular", amplió la ministra en declaraciones a la TV Pública.
Gómez Alcorta insistió que "no son monstruos, son varones socializados en esta sociedad. Eso implica que todos tenemos que comprometernos", y agregó que al nombrarlos de esa manera, " pareciera que el problema está en algunos individuos que tienen algunos problemas, y no en la sociedad".
“Prácticas aprendidas”
Para la ministra, la violación en Palermo forma parte de prácticas que fueron "aprendidas".
"Así como nosotras aprendemos a cuidarnos y a saber cuáles son los riesgos, los varones también aprenden ciertas prácticas: la práctica de que nuestros cuerpos, nuestra vida, no tienen valor", dijo.
También habló de que existe una "lógica corporativa" entre los hombres, "donde quizás algún varón puede sentir que está mal, pero tiene costo decirlo y salirse de lo corporativo, de la cofradía: ese es el modo en que se socializa".
"Lo que falta es cambiar la matriz de la sociedad", concluyó.