SOCIEDAD

SE QUIERE IR DEL PAÍS

Guillermo Salatino: "Cobro $28.000 después de que me sacaron guita como loco durante 50 años"

Mientras la titular de ANSES, Fernanda Raverta, se pasea por todos los canales y radios con su mejor sonrisa celebrando el aumento del 5% en las jubilaciones para cerrar el 2020, luego haberles de que el presidente Alberto Fernández les haya ajustado un 20% con la suspensión de la fórmula de actualización, los jubilados siguen enfurecidos porque no son más que $900 en medio de una fuerte disparada inflacionaria.

Luego de un aumento de $900 a los jubilados, quienes en su gran mayoría no pueden salir a trabajar para compensar sus gastos, la titular de ANSES Fernanda Raverta continúa paseándose por todos los canales, radios y redacciones de diario, celebrando que "este fue un buen año para los jubilados".

Allegada a la vicepresidenta Cristina Fernández, Raverta continuó recortándole a los adultos mayores que cobran por encima de la mínima para que los que no aportaron pero entraron al sistema previsional con moratorias puedan "ganarle a la inflación".

Ocurre que esto se da en el marco de un remate de bonos en dólares del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de ANSES para mantener calmado al tipo de cambio paralelo Contado con Liquidación.

Jubilados salieron enfurecidos a repudiar sus festejos en medio de un fuerte aumento generalizado de los precios. Recordemos que el triste 5% no alcanza siquiera a cubrir el 6,6% que aumentó solo en octubre la canasta básica. ¿En qué país vive Raverta? No se puede ser tan caradura.

Hasta la diputada Mirta Tundis, del propio Frente de Todos, tuvo que reconocer que "me quedó sabor a poco el aumento".

Guillermo Salatino, periodista deportivo, salió a mostrar su enojo en Twitter: "Pensé que vivíamos en un país lógico y que, después de aportar tanta plata, uno se podía retirar tranquilo con todo lo que aportaste para seguir viviendo en paz en tu casa pero no, hay que salir a laburar. No hay más remedio.

Yo ya no creo nada. Escuchaba al presidente en la campaña diciendo que le iba a poner la plata a los jubilados en el bolsillo y que al día siguiente del 10 de diciembre les iba a aumentar un 20%, yo qué sé... Cuando uno escucha que para estar por encima de la línea de pobreza tiene que cobrar $46.000 y yo que cobro $28.000 después de que me sacaron guita como loco durante 50 años, me siento el hijo de la pavota. Me siento como un estúpido, me están tomando el pelo y no se ponen colorados cuando te anuncian estas cosas. Te lo están dando como si fuera el Gordo de Navidad".

En diálogo para el canal LN+, comparó: "El jubilado alemán, italiano, español o francés sigue cobrando lo mismo que cobraba y, a medida que le van aumentando al que quedó en su puesto en el que estaba trabajando, le van aumentando a él".

Luego, respondió a los funcionarios que justifican sus aumento con el inmueble o los bienes en general de los adultos mayores: "Sí, yo tengo una casa pero me la compré cuando laburaba. Si a mí me empiezan a subir los impuesto y las tarifas, y cobro $28.000, yo ya no lo puedo pagar porque no tengo más la entrada que tenía. No hay sentido común.

Te dicen: 'mirá la casa que tiene este, la puede pagar'. No, no, yo la podía pagar y me la pude comprar cuando laburaba. Ahora soy jubilado".

Resignado, contó que también se quiso ir del país: "Yo no soy optimista, ya estoy entregado. Mi mujer es uruguaya, y no quiso porque obviamente su vida son los nietos, pero me hubiera ido para vivir tranquilo con la plata que tengo ahorrada.

Estoy muy preocupado porque quiero a este país y todos los gobernantes desde que tengo que uso de razón se han encargado de arruinar el mejor país del mundo".

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