APUNTES PARA 2012

Dolarización nac & pop

Es curioso que una Administración que tanto ha reivindicado (en su discurso) "lo nacional y popular", termine provocando un afán casi desmedido por el atesoramiento en dólares estadounidenses.

 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). En su informe 2011, el estudio de Carlos Melconian y Rodolfo Santangelo destacó varios acontecimientos que no solamente condicionaron el ejercicio que pasó sino que influirán en el que ha comenzado.
 
Por ejemplo:
 
1. La fortísima dolarización de ahorros que terminó en el control de cambios,
 
2. El salto de los precios internacionales que aportó divisas adicionales claves al mercado cambiario, 
 
3. La vuelta del tipo de cambio real prácticamente al “1 a 1 “, 
 
4. La mejora de poder adquisitivo y un nuevo aumento de los costos laborales en dólares, 
 
5. El salto del déficit fiscal primario y la consolidación de la “maquinita” para financiarlo, 
 
6. Los confusos anuncios de reducción de subsidios, 
 
7. La explosión del crédito bancario alimentada por la emisión de moneda del BCRA, 
 
8. El corte del crédito en dólares por la salida de “argendólares”, 
 
9. La caída de las reservas del BCRA, y
 
10. La “reactinflación” por segundo año consecutivo. 
 
 
Pero Urgente24 prefirió indagar un poco más en los apuntes de Overview (así se llama la newsletter de Melconian-Santángelo) en lo de la dolarización, por el fenómeno socio-político que supone, además del macroeconómico, en una Administración que en su discurso opina lo contrario a la extranjerización y que acaba de ser reelegida para un nuevo mandato con un 54,11% de los votos emitidos.
 
El texto a considerar:
 
"El proceso de dolarización de ahorros de Argentina se inició hacia mediados de 2007 y se extendió durante 52 meses consecutivos hasta octubre de 2011 cuando al gobierno no le quedó otra que frenarlo con el garrote del control de cambios. De lo contrario, el nivel de actividad iba a una contracción segura y las reservas a una caída pronunciada.
 
El año pasado había arrancado con el mercado cambiario tranquilo: la dolarización de ahorros cerró en 2010 en torno a US$ 700 millones por mes, un valor relativamente bajo para la historia reciente. Se preveía una mayor tensión a medida que se acercara la elección presidencial de octubre pero “el barco se empezó a mover antes y más de lo previsto”.
 
En el primer trimestre, la dolarización de ahorros pegó un saltito de US$ 700 millones a US$ 1.300 millones por mes y en el segundo a US$ 2.200 millones. 
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Julio cerró en más de US$ 2.300 millones, agosto en casi US$ 2.900 millones, septiembre en más de US$ 3.200 millones y octubre en US$ 3.700 millones. La cifra trepó a niveles críticos, insostenibles. Ya sea por motivos culturales históricos y/o porque el dólar está “barato” y/o porque hay muchos pesos dando vuelta, la gente se lanzó a comprar dólares en forma masiva, predominando las operaciones “chicas” por bajos montos por sobre las más grandes.
 
Una salida de capitales tan elevada generaba dos efectos diferentes y simultáneos: 
 
1) el BCRA se veía obligado a vender dólares en el mercado cambiario y absorber pesos, subió la tasa de interés y la economía iba seguro a una recesión; 
 
2) las reservas caían fuerte por las ventas del BCRA en el mercado y por su uso para los pagos de la deuda en dólares. A US$ 3.000 millones de dolarización por mes, 2012 era intransitable.
 
La respuesta del gobierno frente al torniquete monetario y la caída de reservas fue la creación de la ONCCA cambiaria. 
 
Post – controles del 31 de octubre, la dolarización de ahorros dejó de ser una decisión de la gente y pasó a ser una variable de política económica. 
 
En noviembre pasado, OVERVIEW estimó las ventas de dólares por atesoramiento autorizado en “apenas” US$ 800 millones y en diciembre incluso algo menor contra una dolarización de ahorros de US$ 3.700 millones en octubre. Comprar dólares para atesoramiento a $ 4,30 es una opción que “no está más disponible”. 
 
Las operaciones grandes están “prohibidas”: o la AFIP o el BCRA las rebotan (“macro” o sea más allá del embudo “micro” donde a partir de que comenzó el nuevo año sorpresivamente la AFIP ha habilitado a algunos “inconsistentes” a volver a compra dólares). 
 
La demanda potencial de dólares a la cotización oficial es hoy inconmensurable.
 
La prioridad del racionamiento es que el BCRA compre la mayor cantidad posible de dólares. En pos de cumplir con esta meta, la demanda privada de dólares para atesoramiento está “prohibida”, la remisión de utilidades y dividendos y los pagos de importaciones están por el momento “semi – permitidos” y se obligó a las petroleras, las mineras y las compañías aseguradoras a vender más dólares en el mercado. La demanda de divisas está ahogada por los controles y la oferta exprimida al límite.
 
Por los controles y las divisas extra liquidadas (aseguradoras, petroquímicas y mineras), el BCRA compró casi US$ 2.500 millones en diciembre. Se pareció “artificialmente” a un mes de liquidación estacional de la cosecha como son mayo o junio. 
 
Entre comprar dólares restringiendo la demanda a riesgo de que se vaya ampliando la brecha entre la cotización del dólar “oficial” y el “paralelo”, el gobierno elige lo primero e intentará restarle relevancia a lo segundo cuando se produzca. (...)".
 
 
Sin embargo, otra vez, pasada la fecha límite de pago del impuesto a los Bienes Personales, para el cual están exentos los depósitos en moneda extranjera, muchos ahorristas decidieron retirar las divisas que habían colocado en sus cajas de ahorro o en plazos fijos.
 
Sólo en los primeros 4 días del año 2012, el sistema llegó a perder un tercio de todo lo recuperado en dólares sobre el final del 2011. Y que al menos falta mucho para decretar que se recobró la confianza en el sistema tras la implementación de los controles de la AFIP.
 
“Esto está directamente relacionado con las limitaciones del mercado cambiario: en la medida en que la AFIP no libere muchos dólares, el crecimiento del fondeo en moneda extranjera tiene su techo y vamos convergiendo a un sistema prácticamente todo en pesos”, planteó un ejecutivo bancario a Ignacio Olivera Doll, del diario El Cronista Comercial.
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En el sector reconocen que la venta de dólares por ventanilla sigue con grandes obstáculos: los más optimistas estiman que la AFIP está autorizando 60% de la demanda minorista; otros, en cambio, hablan de apenas un 30%. Así y todo, los dos coinciden en que la proporción de rechazo se redujo, pero más por el desaliento de los clientes –que reciben la negativa cada vez que se acercan a la sucursal– que por las concesiones del organismo oficial.
 
“La venta de dólares está en la mitad de los niveles previos al ‘corralito cambiario’. Hace un mes que está estabilizada en la mitad de lo que se operaba antes de la crisis”, comentó el gerente de un banco privado.
 
En el Banco Central aseguran que durante la semana posterior al 6 de enero, que aún no aparece publicada en sus estadísticas, se habría notado cierta estabilización. Aún así, los banqueros admiten que el freno aparece como una señal de alarma en el sistema por las dificultades que todavía perciben para fondear sus préstamos destinados al comercio exterior.
 
Eso es lo que conduce al anticipo de Urgente24: que directivos de la Unión Industrial Argentina con diálogo con el Ejecutivo Nacional, han planteado la oportunidad de un nuevo 'blanqueo' de capitales en el exterior.
 
Sucede que el sector empezó a sentir más escasa la liquidez en dólares que obtiene a través de las líneas con corresponsales de entidades en el exterior. De acuerdo con los datos del BCRA, los bancos locales tomaron US$ 211 millones en octubre y noviembre por “obligaciones vinculadas al comercio exterior”. Pero ese stock aparece congelado, ahora, cercano a US$ 790 millones. Desde hace ya un mes.
 
Así, los controles han llegado... para ser profundizados pero, pese a ellos, si no hay correcciones inmediatas en el sesgo, mucho se le complicará a la conducción "nacional y popular" la dolarización que termina alentando.