¿Por qué ya no quiero tener sexo? ¿Por qué no me dan ganas de tener relaciones sexuales? ¿Debo preocuparme si no tengo deseo sexual? A menudo, a las mujeres les angustia el hecho de no tener ganas de practicar relaciones sexuales. Incluso, si llegan a tener sexo, este puede no ser satisfactorio ante la falta de apetito sexual.
¿TE HA PASADO?
6 razones por las que ya no quieres sexo (la N°2 ni te la imaginas)
Saber el motivo por el que ya no quieres tener sexo, puede ayudar a encontrar la solución y mejorar tu vida sexual.
Hay varias razones que pueden estar detrás de esto, pero muchas veces pasan desapercibidas. En ese sentido, es importante identificar la causa del problema para solucionarlo y que la vida sexual vuelva a ser satisfactoria.
Aquí hay algunos posibles motivos por los que algunas mujeres pierden el deseo sexual:
Métodos anticonceptivos
¿Puede la píldora anticonceptiva afectar el deseo sexual? Sí. “Debido a que hay hormonas en la píldora anticonceptiva, la reacción puede variar de una persona a otra, dependiendo de la química de su cuerpo y del tipo de combinación hormonal en la píldora”, dice la Dra. Jennifer Wider, MD, experta en salud de la mujer, autora y presentadora de radio, al sitio Women's Health. Por eso, si si su libido disminuye justo después de comenzar a usar un nuevo método anticonceptivo hormonal, hable con su médico. “Existen muchas opciones para elegir y la mayoría de las personas pueden superar fácilmente el hecho de que la medicación afecte su vida sexual”.
No has dormido bien
¿Sabías que la falta de sueño y los problemas para dormir podrían tener la culpa de tu bajo deseo sexual? Si bien, se sabe que los problemas de sueño pueden aumentar el riesgo de enfermedades, casi no se habla del efecto negativo que tienen en la vida sexual. Es real y hay un porqué. "Cuando el cuerpo no duerme lo suficiente, produce menos testosterona, lo que puede provocar una disminución del deseo sexual", explica la Dra. Laura Purdy, MD, médica de familia certificada a Women's Health. "Además, la falta de sueño puede provocar irritabilidad y agotamiento, lo que puede hacer que la actividad sexual sea menos atractiva", agrega.
Embarazo
El embarazo provoca cambios físicos, mentales y sexuales significativos en las mujeres. Es posible que la falta de deseo sexual sea más pronunciada durante el primer trimestre.
En un estudio que aparece en PubMed, en el que participaron 295 mujeres embarazadas, los investigadores encontraron que "el bajo deseo sexual y la angustia sexual son experiencias sexuales relativamente comunes durante el embarazo".
La libido baja también puede ocurrir durante el postparto, además, en esta etapa muchas mujeres sufren de sequedad vaginal, lo que puede hacer que el sexo sea más doloroso y que las mujeres terminen evitando el acto sexual.
Mucho estrés
Ser pareja y madre, trabajar, hacer las cosas del hogar y lidiar con el día a día puede causar muchísimo estrés, lo cual no es bueno. Tanto el estrés como la ansiedad son enemigos de las relaciones sexuales.
La Clínica Mayo explica que, por ejemplo, la ansiedad puede provocar un aumento de los niveles de la hormona cortisol, también conocida como la “hormona del estrés”, y los niveles altos de cortisol pueden suprimir las hormonas sexuales que afectan el deseo sexual. En consecuencia, las mujeres con mucho estrés o ansiedad pueden tener menos deseo sexual.
Menopausia
Las mujeres menopáusicas y posmenopáusicas sufren muchos cambios y pueden notar que no se excitan tan fácilmente como antes. Esto puede provocar un menor interés en el sexo.
Jhons Hopkins Medicine indica que, "la incomodidad es un aspecto de la menopausia que puede afectar la actividad sexual (...) A medida que envejece, la sangre llena sus genitales más lentamente a medida que se excita sexualmente, lo que significa que puede no tener la misma sensibilidad que tenía antes de la menopausia".
Aburrimiento
El aburrimiento y el bajo deseo sexual pueden estar más relacionados de lo que se cree. "El aburrimiento sexual se asocia con una reducción de las respuestas sexuales , incluida una menor excitación y deseo sexual", explican en Psichology Today.
"En el caso de las parejas en las que uno o ambos miembros experimentan aburrimiento sexual, la frustración sexual que lo acompaña suele erosionar la satisfacción general de la relación, mientras que es posible que las parejas disfruten de la satisfacción de la relación sin satisfacción sexual". Esto puede ser una señal de que la relación necesita revitalizarse.
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