La Justicia de Estados Unidos acusó formalmente a una banda de catorce ciudadanos norcoreanos de conspirar contra Washington bajo identidades falsas para obtener empleos en empresas estadounidenses y desde allí desviar 88 millones de dólares para el Gobierno de Corea del Norte.
DESVÍO DE FONDOS
El FBI desmanteló una banda de norcoreanos que coopera con Pyongyang
El FBI desarticuló una banda de trabajadores norcoreanos que bajo identidades falsas se infiltró en distintas empresas estadounidenses y desvío online USD 88 millones para un plan de armas de Corea del Norte.
Fue este miércoles (11/12/24) que el tribunal federal de St. Louis, Missouri, dictaminó que los catorce ciudadanos norcoreanos conspiraron durante seis años desde la jurisdicción de Estados Unidos y cometieron fraude electrónico, lavado de dinero, extorsión y robo de identidad para desviar 88 millones de dólares a programas de desarrollo de misiles balísticos y otras armas del régimen de Pyongyang.
Según el departamento de Justicia de USA, que divulgó el caso, los conspiradores norcoreanos que en realidad trabajaban para las empresas extranjeras norcoreanas Yanbian Silverstar y Volasys Silverstar, ubicadas en la República Popular China (RPC) y la Federación Rusa (Rusia), conspiraron bajo identidades falsas, robadas a estadounidenses, para enlistarse como trabajadores remotos de tecnología de la información (TI) para empresas estadounidenses y organizaciones sin fines de lucro.
“Para apuntalar su brutal régimen, el gobierno norcoreano ordena a los trabajadores de TI que obtengan empleo mediante fraudes, roben información confidencial de empresas estadounidenses y desvíen dinero hacia la RPDC”, dijo la fiscal general adjunta Lisa Monaco.
La banda de norcoreanos está en el exterior
Los catorce norcoreanos acusados el miércoles (11/12/24) por Estados Unidos de conspirar contra el Gobierno y desplegar mecanismos de extorsión, desviaron fondos millonarios de empresas estadounidenses a los programas de armas de Pyongyang.
Los investigadores consideran que los sospechosos están en Corea del Norte, por lo que es poco probable que algún día se enfrenten a la justicia de Estados Unidos. De cualquier manera, el Departamento de Estado de USA actualmente ofrece una recompensa de hasta 5 millones de dólares a cualquiera que pueda proporcionar más información sobre los sospechosos.
La acusación formal de la Justicia estadounidense afirma que los acusados norcoreanos y otras personas que trabajaban con ellos, generaron al menos 88 millones de dólares (51,5 millones de libras esterlinas) para el régimen de Corea del Norte durante un período de seis años.
En ese sentido, el FBI además sugiere que, aunque han descubierto a sólo catorce, el plan real involucra a miles de trabajadores de TI de Corea del Norte que usan identidades falsas, robadas y prestadas de distintas personas para trabajar de forma remota en empresas de distintos países, de manera tal que puedan desviar fondos o realizar espionaje.
Los fiscales que llevan adelante el caso revelaron que los sospechosos trabajaban para dos empresas controladas por Corea del Norte: Yanbian Silverstar, con sede en China, y Volasys Silverstar, con sede en Rusia, en donde incluso se los conocía como "Guerreros de TI", según el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
A los conspiradores norcoreanos se le había ordenado reclamar a sus empleadores estadounidenses salarios de al menos 10.000 dólares al mes. Además de su salario mensual, recaudaban fondos para el régimen norcoreano, robando información valiosa de la empresa y amenazando con filtrarla a menos que el empleador realizara un pago de extorsión.
Los norcoreanos enfrentan cargos de fraude electrónico, lavado de dinero, robo de identidad y extorsión.
Asimismo, los fiscales dijeron que los sospechosos norcoreanos pagaron a personas residentes en Estados Unidos para que recibieran, instalaran y alojaran computadoras portátiles proporcionadas por empleadores estadounidenses.
Tras ello, instruían a los residentes para que les instalaran un software con acceso remoto que les permitiera aparentar que trabajaban desde Estados Unidos, cuando en realidad estaban en el extranjero.
“La acusación formal de ayer es la última de una serie de acciones en el marco de una iniciativa de la División de Seguridad Nacional lanzada a principios de este año para interrumpir los esfuerzos de Corea del Norte por generar ingresos engañando a las empresas estadounidenses para que contraten a sus ciudadanos para que trabajen a distancia”, dijo el fiscal general adjunto Matthew G. Olsen, de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia.
“Los catorce conspiradores acusados ayer atacaron a empresas de todo Estados Unidos, así como a muchos estadounidenses cuyas identidades robaron, para generar ingresos para el régimen norcoreano”, dijo el subdirector Bryan Vorndran de la División Cibernética del FBI.
“El FBI seguirá trabajando con nuestros socios para exponer y mitigar estos esquemas fraudulentos de TI y brindar apoyo inquebrantable a las víctimas de los actores cibernéticos norcoreanos”, agregó.
Más contenido de Urgente24
Dicen que las aseguradoras de salud en USA parecen las prepagas argentas
Reja o tobillera: En Córdoba apuntan contra la prisión preventiva
Las universidades caen bajo la lupa de Milei y no tendrán contratos directos
El Gobierno disolvió la CONAMI: "No se sabía bien dónde estaba la plata. Por eso, se cierra"