La Selección Argentina sigue de fiesta. Jugadores, cuerpo técnico, utileros, médicos, kinesiólogos y allegados regresaron a sus respectivos hogares para celebrar y descansar. A pesar de la tranquilidad que se respira por el logro en Medio Oriente, Chiqui Tapia debe resolver qué será de Lionel Scaloni y su Scaloneta.
INCERTIDUMBRE
Tapia no cierra los números con Lionel Scaloni y hay dudas
El presidente de AFA, Claudio Chiqui Tapia, aún no tiene cerrada la renovación de Lionel Scaloni, cuyo vínculo vence el próximo 31/12.
Muy pocos creían en él. Tal vez solamente el propio entrenador. Y eso fue motivación suficiente para encabezar el proyecto futbolístico más importante de la Argentina en la historia reciente.
Más allá de las tres copas logradas -de las que se jacta Alberto Fernández (?)-, lo de Scaloni pasa por otro lado. Será su sencillez, su humildad o sus planteos, pero tiene 'eso' que cautivó a toda una nación.
Confió en los procesos, tiempos y necesidades de cada uno. Apostó por futbolistas que no estaban en el radar de nadie y que, hoy por hoy, se piden que hayan monumentos y calles a su nombre, el ejemplo más claro es el del 'Dibu' Martínez.
El técnico del seleccionado nacional convirtió su propia figura: fue del "joven inexperto" -así lo llamaron dentro del ámbito periodístico-deportivo- al mandamás absoluto y en un líder inamovible.
Lionel nació en Pujato y es allí en donde se encuentra para pasar las fiestas. Sus padres viven allí mientras que su esposa e hijos yacen en Mallorca.
Precisamente, su ciudad natal se revolucionó por completo con la llegada del DT campeón del mundo. Él, como un civil más y con su vergüenza en los grandes escenarios, se tomó el tiempo de saludar y dedicarle unas palabras a su pueblo.
"Creí que había llorado todo, pero todavía me quedan emociones. Veo gente del pueblo y de alrededores. Esto es el triunfo de todos. Ni de un club ni de otro sino de todo el país. Esta selección jugó para la gente. Es muy emocionante y gratificante esto", resaltó.
El sábado 24 de diciembre, antes de Nochebuena, el director técnico de la Selección anduvo en bicicleta por las calles de la localidad santafesina y hasta frenó cuando algunos lo reconocieron y le pidieron fotos.
Eso es 'Scalonismo' en estado puro: la simpleza. Tanto en la vida real como trasladado a la cancha.
El futuro de Scaloni en Argentina, una preocupación
El DT de la celeste y blanca tiene contrato hasta el próximo 31 de diciembre de 2022. Hay voluntad de ambas partes -de AFA y del pujatense- para renovar, pero por ahora no es sencillo.
De manera extraoficial, cuando la Albiceleste estaba en una gira por Estados Unidos, fue Tapia quien anunció la continuidad del hombre de 44 años.
El 'Gringo', cauto, como él suele decir, respondió ante el interrogante: "Claro que sí. Quién no va a tener ganas de seguir. Con el presidente tengo la mejor relación. Tuvimos reuniones, encaminado, hay cosas para aceitar. Las ganas están, la predisposición también, más con el grupo que se brinda de esta manera. En base a pensar en un proceso, y no depender de resultados. Soy un agradecido del presidente y de la gente".
Pero hay dos cuestiones que analizar en torno al caso. Ninguna es de fácil resolución. Veamos:
- La primera, y para nada menor, es la cuestión económica. El conductor de la Scaloneta tenía hasta diciembre un contrato muy bajo en comparación con otros entrenadores de selecciones y hasta de clubes. Ahora, con la copa bajo el brazo, el DT tendrá pretensiones más grandes, lógicamente. Según los medios, Scaloni y Tapia están muy lejos en lo numérico.
- La familia. Como mencionábamos previamente, Scaloni tiene a su familia cercana en España y a sus padres en Pujato.
Tampoco hay que esquivar que el entrenador tendrá un importante foco de atención por parte de los grandes clubes de Europa, quienes querrán contar con sus servicios.
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