Al menos 12 representantes al Congreso en San Miguel de Tucumán habían estudiado Teología, y al menos 11 fueron ordenados sacerdotes católicos apostólicos romanos, entre ellos el fray tío de Domingo Faustino Sarmiento. Aquí un breviario de quienes declararon la independencia.
09/07, GENTE DE LA INDEPENDENCIA (4)
El tío de Sarmiento quería una República y vetó la Monarquía
El tío de Domingo Faustino Sarmiento fue Justo de Santa María de Oro y Albarracín, mucho más que el nombre de una calle en Ciudad de Buenos Aires.
Por San Juan
Justo de Santa María de Oro y Albarracín, formado en el convento de Santo Domingo en San Juan, y en la Recoleta Dominicana de Santiago de Chile, impulsor de que el Congreso designara a Santa Rosa de Lima como patrona de la independencia.
Francisco Narciso de Laprida, egresado del Real Colegio de San Carlos, y de la Real Universidad de San Felipe de Santiago de Chile, donde estudió Derecho.
Por Tucumán
Pedro Miguel Aráoz, doctor en Teología por la Universidad de Córdoba. Interesado en la ciencia de la educación.
José Ignacio Thames, abogado por la Universidad de Córdoba, luego fue ordenado sacerdote católico apostólico romano.
Por Mendoza
Tomás Godoy Cruz, egresado en Filosofía, Derecho Canónico y Civil por la Real Universidad de San Felipe y Santiago, Chile.
Juan Agustín Maza, también egresado de Leyes por la Real Universidad de San Felipe y Santiago.
Por San Luis
Juan Martín de Pueyrredón, quien estudió Humanidades en París, y en Buenos Aires creó el Regimiento de Húsares para combatir a los ingleses. Entonces fue designado teniente coronel por Liniers, grado que confirmó el rey Carlos IV. Elegido diputado por San Luis, Pueyrredón no tuvo tiempo de destacarse en el Congreso. El Congreso lo hizo Director Supremo el 03/05/1816, y brigadier.
Por Buenos Aires
Pedro Medrano, quien había nacido en Maldonado, estudio Leyes en Córdoba, y se doctoró en Charcas. Fue cabildante asistente al Cabildo Abierto del 22/05/1810, integró la Asamblea del año XIII y la Junta de Observación redactora del Estatuto Provisional de 1815.
Juan José Paso, secretario de la Primera Junta, vocal del 1er. y 2do. Triunvirato, secretario diputado en el Congreso de Tucumán, leyó el Acta de Independencia en la sesión del 09/07/1816.
Antonio Sáenz, tal como la mayoría estudió en el Colegio de San Carlos y luego en la Universidad de Charcas, estudios eclesiásticos y jurídicos. Fue ordenado sacerdote en 1806. Integró la Sociedad Patriótica dirigida por Bernardo de Monteagudo y fue co-redactor del proyecto de Constitución de las Provincias Unidas del Sud.
José Darregueyra había nacido en Lima pero él vivió su adolescencia en Buenos Aires donde estudió en el Colegio de San Carlos y luego en la universidad de Charcas, donde logró un Doctorado en Hurisprudencia. Electo diputado por Buenos Aires, hizo notar que él era extranjero lo que hacía nulo su nombramiento según el Estatuto Provisional. Pero igual lo mandaron a Tucumán.
Cayetano José Rodríguez estudió en el convento franciscano de Buenos Aires y se doctoró en la Universidad de Córdoba. Entonces él fue ordenado sacerdote. Fue el periodista de las Asambleas, y una persona de referencia para Mariano Moreno. Fue el primere bibliotecario de la Biblioteca Pública, fundada por la Junta.
Tomás Manuel de Anchorena nació en Buenos Aires en 1783. Estudió en el Real Colegio de San Carlos, “el colegio de la Generación de Mayo”. Estudió leyes en la Universidad de Charcas, donde se graduó en Jurisprudencia. Fue protector y consejero de Mariano Moreno. Votó en el Cabildo el 22 de mayo por la deposición del Virrey. Fue el secretario de Belgrano en el Alto Perú. Fue elegido diputado por Buenos Aires el 15 de agosto de 1815.
Esteban Agustín Gascón nació en Oruro, Provincia del Alto Perú, antes Provincia de Charcas. Él también estudió en el Real Colegio de San Carlos y fue a la Universidad de Charcas donde se doctoró en Derecho. Ejercía la presidencia de la Audiencia de Oruro y coparticipó la revolución del 25/05/1809 en Chuquisaca. Fue elegido presidente de la Audiencia de Charcas y Gobernador Intendente de la provincia de La Plata y formó un ejército que puso a las órdenes de Manuel Belgrano. Fue uno de los principales redactores del Estatuto Provisional del 5 de mayo de 1815, el instrumento jurídico convocador del Congreso de Tucumán.
Diputado por La Rioja
Pedro Ignacio de Castro Barros fue pupilo en el Colegio de Monserrat en Córdoba. Luego fue ordenado sacerdote. Ejerció como profesor en la Universidad de Córdoba y adhirió a la Revolución de Mayo. Fue de los diputados que llegaron con antelación a la apertura de las sesiones en Tucumán. Fue comisionado para intentar acordar con Martín Miguel de Güemes ante las diferencias entre el jefe salteño y el general José Casimiro Rondeau Pereyra.
Por Córdoba
José Antonio Cabrera, licenciado en Derecho por la Universidad de San Carlos, alcalde de primer voto del Cabildo de Córdoba en enero de 1811, y un decidido partidario de José Gervasio de Artigas. Él integró la delegación que envió Artigas a Buenos Aires a resolver las diferencias con el Director Supremo, Ignacio Álvarez Thomas, quien los secuestró para que no avisaran que había enviado tropas a la Provincia de Santa Fe para atacar a los de Artigas, motivo por el cual esos pueblos federales, con la excepción de Córdoba, no estuvieron en Tucumán.
Luis Jerónimo de Salguero de Cabrera y Cabrera, también bachiller en Derecho por la Universidad de Córdoba. Adhirió a la Revolución de Mayo y fue el de síndico procurador de la ciudad. Luego, ministro de Hacienda del gobernador José Javier Díaz. Renunció por su elección de diputado al Congreso General de las Provincias. Tal como sucedió en reiteradas ocasiones en Tucumán, los representantes de Córdoba fueron impedidos de participar de varias sesiones.
Eduardo Pérez Bulnes estudió en el Colegio de Monserrat e integró un regimiento de milicianos luego de la Revolución de Mayo. En 1816 fue electo diputado al Congreso de Tucumán, proclamó la Independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata y fue expulsado del Congreso a principios de 1817 porque, fiel federalista, se negó a traslado a Buenos Aires.
Miguel Calixto del Corro, otro egresado del Colegio de Monserrat y luego de la Universidad de Córdoba donde se doctoró en Teología, para 2 años después ser ordenado sacerdote, más tarde vicario provisor del Obispado y canónigo magistral de la Catedral cordobesa.
Por el Alto Perú
José Mariano Serrano nació en Chuquisaca, consiguió el título de abogado en la Real y Pontificia Universidad de San Francisco Javier, participó de los movimientos revolucionarios de Chuquisaca y La Paz, fue perseguido luego dde la derrota en Huaqui y debió emigrar a Tucumán. En 1815, él fue elegido para la Junta de Observación, redactora del Estatuto Provisional, y elegido por los emigrados diputado por Charcas al Congreso de Tucumán.
Pedro Ignacio de Rivera nació en Mizque, provincia del Alto Perú, se graduó en Leyes en Charcas, luego fue minero y azoguero en Oruro, jefe de las milicias de Mizque con el grado de coronel, síndico procurador del Cabildo y uno de los líderes de la revolución de Chuquisaca el 25/05/1809. Representó a Mizque en la Asamblea de 1813 y llegó en Tucumán.
Mariano Sánchez de Loria nació en Chuquisaca, estudió en la Universidad de San Francisco Javier y participó en la revolución chuquisaqueña de 1809. Él emigró a Salta después de la derrota en Sipe Sipe y llegó al Congreso de Tucumán por elección de emigrados.
José Andrés Pacheco de Melo cursó sus estudios universitarios y eclesiásticos, en Córdoba. Su correspondencia con Martín Miguel de Güemes, con quien se conocía desde la escuela primaria, demuestra la ayuda que prestó a las milicias rurales. Ocupada Tarija por las tropas del Virreynato del Perú, el Cabildo local no pudo enviar diputados al Congreso de Tucumán. En el caso de la vecina región de Chichas, el director supremo Gervasio Posadas reconoció a los exiliados -coronel mayor Juan José Feliciano Alejo Fernández Campero y sacerdote párroco de Livi, José Andrés Pacheco de Melo, la elección del 17/10/1815 en la villa de Tupiza. Pero sólo Pacheco de Melo pudo integrarse al Congreso de Tucumán.
Por Salta
José Ignacio de Gorriti se doctoró en Cánones y Leyes por la Universidad de Chuquisaca. Adhirio a la Revolución de Mayo, combatió contra los españoles en el Norte, acompañó a Martín Miguel de Güemes en Suipacha; integró patrullas de caballería para atacar la vanguardia enemiga durante el Éxodo Jujeño; combatió en Las Piedras, Tucumán y Salta. Fue confidente de Güemes, firmó en su nombre el pacto de Los Cerrillos que ordenó la relación con el general Rondeau. Luego del Acta de la Independencia, renunció a su cargo de diputado para volver a Salta y continuar con su lucha montonera.
Mariano Boedo estudió en Córdoba y en Chuquisaca. Fue gobernador interino de Córdoba. Muy cercano a Martín Miguel de Güemes. Él fue presidente del Congreso de Tucumán en 1817.
Diputados por Catamarca
Manuel Antonio de Acevedo y Torino estudió tanto Derecho civil como teológico en la Universidad de Córdoba, fue ordenado sacerdote por el obispo de Tucumán, Ángel Mariano Moscoso, y fue un fervoroso patriota, colaborando con Manuel Belgrano en la atención a los heridos en Tucumán. Fue uno de los primeros oradores del Congreso de Tucumán.
José Eusebio Colombres Thames nació en Tucumán, estudió en Córdoba, donde doctoró en Teología en 1803, fue ordenado sacerdote y era el párroco de Piedra Blanca cuando se realizaron las elecciones para diputados por Catamarca al Congreso de Tucumán. Después de declarada la Independencia, Colombres renunció a su representación y regresó a Catamarca. Fue el impulsor de la industria azucarera, base de la economía tucumana.
Por Santiago del Estero
Pedro Francisco de Uriarte estudió en la escuela franciscana de Santiago del Estero y luego Artes y Teología en Córdoba, donde también fue ordenado sacerdote. En Buenos Aires fue capellán de la Casa de Ejercicios fundada por la beata María Antonia de la Paz y Figueroa. Fue elegido diputado por Santiago del Estero e incorporado a la llamada Junta Grande. Devolvió al Cabildo la mitad del dinero para viáticos. En octubre de 1815 lo eligieron diputado al Congreso de Tucumán.
Pedro León Gallo también estudió maestro en Artes en la Universidad de Córdoba. Fue elegido diputado por Santiago del Estero en reemplazo del renunciado franciscano P. Ignacio Gara.
Por Jujuy
Teodoro Sánchez de Bustamante, quien estudió en Buenos Aires en el Real Colegio de San Carlos y, en Charcas se recibió en Sagrada Teología y de abogado. Fue relator de la Real Audiencia y presidente de la Academia de Práctica Forense. Participó en la revolución de Chuquisaca el 25/05/1809 y fue enviado por los promotores a Salta para extender la rebelión a Tucumán. Acompañó a Manuel Belgrano en la Expedición al Alto Perú como auditor y secretario general del Ejército del Norte. Se incorporó al Congreso recién en mayo de 1816.
El tío de Sarmiento
Pero volvamos a Justo Santa María de Oro, tío segundo materno de Domingo Faustino Sarmiento. Él destacó como un defensor de un modelo de gobierno republicano, oponiéndose a la propuesta, mayoritaria, de una monarquía constitucional.
Previsor, en 1809 viajó a Roma, donde negoció un Breve para la anexión a Buenos Aires de los conventos de su orden en Cuyo, que hasta entonces integran la Provincia Eclesiástica de San Lorenzo Mártir, en Santiago de Chile, dependiente hasta entonces del General de la Orden de España.
Él tuvo alguna participación política en Chile ya que fue expulsado en 1814 por el general José Miguel Carrera. Así llegó a la ciudad de Mendoza, donde conoció a José de San Martín.
Se le atribuye haber organizado entre los dominicos de ambos lados de la Cordillera un correo secreto que utilizó San Martín.
En 1816 fue elegido diputado al Congreso de Tucumán, junto con Francisco Laprida.
Fue un veto poderoso porque satisfizo la ambición de Buenos Aires.
Renunció al Congreso en 1817, cuando se decidió mudarlo a Buenos Aires. En esta ocasión él no consiguió igual predicamento. Buenos Aires ya había alcanzado su objetivo.
Es cierto que el Congreso recibió comunicaciones del general Martín Miguel de Güemes y del coronel Juan José Feliciano Fernández Campero y Pérez de Uriondo Martiarena advirtiendo el peligro del avance de los españoles en dirección a Tucumán e invitando a los representantes a ponerse a cubierto de riesgos eventuales.
Sin embargo, por ejemplo, los diputados cordobeses se opusieron a la decisión, sin que previamente se consultara a las provincias. La respuesta fue su expulsión del Congreso.
Gravísimo error porque a partir de entonces, todo el interior se desinteresó por el Congreso, y viceversa.
Quedó condenada a muerte en forma preventiva la Constitución de 1819, cuyo trabajo comenzó a través de una comisión integrada por Antonio Sáenz, Teodoro Sánchez de Bustamante, Diego Estanislao Zabaleta, Mariano Serrano y Juan José Paso.
Es posible que quienes votaron a favor del traslado tuviesen más temor a los caudillos provinciales, aparentemente descontentos con la marcha del Congreso, que a los españoles.
Luego, Oro participó de la política en San Juan hasta que fue deportado a Chile en 1818, y luego fue el superior de los Dominicos de ese país.
Regresó a San Juan en 1828, como vicario apostólico para la diócesis de San Juan de Cuyo. En 1830 fue consagrado obispo. Él se negó a participar de la contienda entre unitarios y federales.
Un hombre valiente porque no era sencillo escapar de aquella Grieta y declararse neutral.