El Frente de Todos atraviesa una profunda crisis que pega de lleno en la gobernabilidad del presidente Alberto Fernández, quien insiste en la posibilidad de conciliar posiciones con La Cámpora sin lanzar lo que pide el mercado: el Albertismo.
¿NACE EL INTERBLOQUE FDT?
La Cámpora frente a 2 hipótesis pensando el 2034
La Cámpora vive sus horas más críticas dentro del Frente de Todos. El mercado hace sus apuestas mientras la discusión de fondo es mucho más compleja.
Sin embargo, el acuerdo con el FMI podría caerse por falta de votos oficialistas de la Casa Rosada en la Cámara de Diputados, motivo por el cual empezó el poroteo sobre la oposición y ya hay posiciones encontradas también en Juntos por el Cambio, que también se va a romper sin lugar a dudas.
Hipótesis 1: Hay quienes especulan con la posibilidad de que La Cámpora dé quorum con sus 18 diputados pero se abstenga al momento de votar. Sobre ese punto surge una pregunta, entonces: ¿nace el interbloque Frente de Todos? Y de allí, naturalmente, se desprende otra: ¿quién logra conciliar todas las partes? ¿en quién está pensando Fernández? El problema es su falta de reflejos para rápidamente poner sus cartas sobre la mesa.
Hipótesis 2: Si La Cámpora no da quorum, se recorta demasiado el margen de maniobra para el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien está trabajando por estas horas un rearmado del bloque y un relanzamiento de la gestión parlamentaria.
Pero más allá de lo que está pasando en específicamente en el bloque de la Cámara baja, la discusión es más profunda. La Cámpora desnudó la realidad: el kirchnerismo se partió en demasiados pedazos para la etapa que viene en la Argentina y peligra su núcleo duro del 25%. Hoy cuenta con ello y se repliega para poner al resto del oficialismo contra las cuerdas de cara al 2023.
El punto acá es que los pilares fundacionales del kirchnerismo están recibiendo un misilazo por el acuerdo entre el Fernández, Guzmán y el FMI:
- Déficit fiscal
- Congelamiento de tarifas
- Dólar
- Suspensión del artículo IV que permite al FMI auditar las cuentas públicas.
- Emisión monetaria.
Por lo tanto, no hay ningún incentivo en La Cámpora de acompañar un acuerdo que marcará el destino de la Nación hasta 2034 -y eventuales waiver y reperfilamientos del préstamo-. Es una discusión netamente ideológicamente y aquí se está poniendo a prueba en diferentes versiones del peronismo si están en condiciones de actualizar su ideología o romper con "el imperialismo".
A propósito, muy interesante la visión que planteó el analista político Rosendo Fraga esta mañana (01/02) en A24 junto a Antonio Laje:
En este esquema planteó: "¿Cómo se resuelve esto? Doy el quorum para que se trate el tema y me abstengo de votar. Es decir, facilito, como lo dijo Máximo Kirchner en su comunicado. Si fuese así, creo que no sería un tema difícil lograr el acuerdo con el FMI.
Ahora, lo más difícil sería que cada cosa se empiece a debatir con el gobierno en una posición débil en el hecho de que dice que esto no es ajuste pero todos sabemos que lo es. En este segundo escenario entramos en una situación que se complica porque te enterrás en una discusión.
Lo más deseable sería un acuerdo entre el sector que responde al presidente Alberto Fernández con la oposición; no quiere decir que eso sea lo más probable porque en la Argentina no siempre sucede lo lógico".
"Este momento es más complejo -que el vaciamiento del Gabinete tras las PASO- por el contexto político y económico.
Esto podría ser controlable si hubiese voluntad: La Cámpora tiene 5 senadores y 18 diputados para dar quórum y abstenerse pero, ¿hay capacidad y voluntad política hacer eso? No lo sé", esquematizó.
"Si esto sale en el Congreso, el presidente Alberto Fernández queda fortalecido en la gestión. Como líder político es otra discusión", cargó Fraga.
"Esto termina con un bloque del Frente de Todos fracturado y formándose un bloque de La Cámpora de 18 diputados. Eso no lo podemos descartar. En el Senado eso es más difícil conjeturarlo porque Cristina ha demostrado cohesión. El tema es que si vos formás un interbloque en Diputados, se maneja política. Ahora, si la lucha oficialismo vs. oposición dentro del Frente de Todos se transforma en lucha política descontrolada, ahí va a ser un problema para la gobernabilidad", adelantó.