¿Cuántas conciliaciones obligatorias debe conceder por estas horas el Ministerio de Trabajo? Sinónimo de conflictividad social. En este caso, para impedir que cierren los puertos exportadores en días de cosecha gruesa.
HUELGA
Incumple Buyatti, bloqueo de puertos exportadores... conciliación obligatoria
"No tenemos nada que ver", se quejan numerosas empresas aceiteras que sufren las consecuencias del conflicto del gremio SOEA con la empresa Buyatti. Se presentaron ante el Ministerio de Trabajo y acaban de conseguir una conciliación obligatoria.
La aceitera Buyatti mantenía hasta fines de 2020 un contrato de trabajo “a fasón” con Vicentin, que se cortó tras la crisis de esta última.
En febrero, la aceitera Buyatti cerró definitivamente su planta de soja que puso a la venta a comienzos de enero y que arrastraba una crisis de 2020. No han aparecido, desde entonces, posibles interesados por la compra del complejo. El asunto fue complicándose más y más.
El establecimiento, ubicado en la localidad de Puerto General San Martín (Provincia de Santa Fe), ya venía trabajando por debajo de su nivel habitual en los últimos meses.
A fines de 2020, operó al 60% de su capacidad, hasta que paralizó la operación a mediados de noviembre, a la espera de una definición para evaluar la continuidad de su actividad.
El proceso de crisis, que llevaba adelante la cartera de Trabajo de Santa Fe, garantizaba el pago del salario de los empleados pese a que la planta de la firma no estaba en funcionamiento desde hacía 1 año.
Al dar por terminado el trámite el Ministerio, se dejó en libertad de acción tanto a la firma como al gremio para que llegaran a un acuerdo entre partes, sin intervención estatal. Esto concluyó en el cierre definitivo de la planta y precipitó los telegramas de despidos.
“Se agotaron las instancias y los plazos”, confirmó el ministro de trabajo provincial, Juan Manuel Pusineri: 70 empleados perdieron sus fuentes laborales.
“Sabemos que 30 trabajadores realizaron el retiro voluntario, otros lograron insertarse en otras compañías tras arreglos por indemnización con Buyatti y un sector está definiendo si litigan y van a juicio”, agregó el funcionario.
Pero ahora ha ocurrido una novedad: Buyatti incumplió con los pagos de las indemnizaciones del personal despedido de su planta en Puerto San Martín, provocando una escalada de tensión sindical que complica toda la operatoria en los puertos cerealeros del Gran Rosario.
Según denunciaron a la prensa los empleados, la semana pasada en Reconquista, donde se encuentra la sede social el grupo, la empresa firmó con el gremio aceitero (SOEA) los términos de la desvinculación del personal.
Sin embargo, al ir a firmar los acuerdos particulares al Ministerio de Trabajo, los empleados se encontraron que las cifras de las indemnizaciones eran hasta 50% menores a las acordadas. En concreto, les incluían en el monto todas las deudas pendientes y no sólo las indemnizaciones, tal como había sido el acuerdo firmado en Reconquista.
El sindicato de aceiteros de San Lorenzo se solidarizó con sus empleados prescindidos y lanzó un paro por 24 horas desde hoy (16/04).
El sábado 17/04 evaluarán qué harán. Otras aceiteras hacien gestiones porque reclaman que no tienen nada que ver con el conflicto pero el sindicato dispone piquetes para impedir el acceso a sus plantas.
Además, al parece ese sindicato, SOEA, se encuentra en un proceso interno de confrontación política de 2 sectores que pugnan por quedarse con el control de ese gremio estratégico.
Todo esto se produce en plena cosecha gruesa.
La huelga perjudica a 10 plantas ubicadas al norte del Gran Rosario, en las localidades de Puerto San Martín, Timbúes y San Lorenzo: son las mayores exportadoras del país y, por ende, las principales generadoras de divisas.