VIOLENCIA POLICIAL

Periodista denunció que fue detenido y amenazado

Los policías lo detuvieron y le hicieron borrar la filmación de una violenta detención que había registrado con su celular al cierre del festival de Jesús María, en Córdoba. Estuvo preso 9 horas, y a su amigo lo golpearon.

 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) Un periodista cordobés denunció que fue arrestado y amenazado por policías que lo obligaron a borrar la filmación de una violenta detención que había registrado con su teléfono celular, al cierre del festival de Jesús María.
 
Según publica La Voz, Franco Farías efectuó ayer una presentación ante el Tribunal de Conducta Policial por los hechos que sufrió en la mañana del domingo y ahora se apresta a efectuar una denuncia penal por "privación ilegítima de la libertad".
 
"Cuando me llevaron a la comisaría les dije que era periodista y eso agravó la situación. Me pidieron que borre la filmación y me negué. Pero después lo hice por miedo", dijo a La Voz Farías, de 21 años.
 
Julio Herrera Martínez, secretario de Inteligencia del Tribunal de Conducta Policial, dijo a dicho diario que tras la recepción de la denuncia se ha iniciado una investigación y que hoy dos de los policías nombrados brindarán su testimonio.
 
Además, informó que se analizarán los videos de las cámaras de seguridad de la zona de la terminal de ómnibus de Jesús María, donde ocurrieron los hechos.
 
Todo comenzó a las 7.30 del domingo, cuando se producía la detención de un joven. "Estaban siendo muy violentos. Eran cuatro o cinco policías que estaban deteniendo a un chico que después vi en el calabozo y que me contó que lo habían arrestado porque en la terminal hubo empujones y él estaba en el medio", dijo el periodista, que se había trasladado a Jesús María para disfrutar el festival.
 
Esa detención y la intervención posterior de un miembro de la Guardia de Infantería fue filmada por Farías con su celular. "La gente los abucheaba. Y se baja del colectivo de la Policía uno de Infantería y le pega con la mano abierta en la cabeza", relató.
 
Cuando Farías y su amigo Alexis Ibarra, también de 21 años, estaban viendo el video en la terminal, cuando se les acercaron policías y los llevaron hacia la comisaría. "¡Borralo ya! ¡Borralo ya! Te vas ahorrar una banda de problemas", dijo uno de los policías, según relata Farías.
 
"En la comisaría nos recibió el sargento Germán Pereyra. Estaba identificado. Es pelado y gordo. Y otro policía, José Luis Salzar, que después se cambió la identificación. Ellos me metieron sólo a mí a una oficina y me piden que les muestre el video. Les digo que soy periodista y que no voy a borrarlo", agregó Farías.
 
En su cuenta de Facebook, relató: "me llevaron a una oficina donde me arrinconaron y amenazaron con golpearme si no les mostraba el video, luego de verlo me obligaron a que lo borrara sino me iba a ir muy mal, también me preguntan quién soy o de que trabajo y respondí periodista lo cual agravó mucho mas la situación. Mientras esto sucedía otro policía mas golpeo a Alexis en la cabeza contra la pared "
 
Farías dijo que tras borrar el arresto una cabo de apellido Gigena le informó que estaba detenido y que, cuando fue liberado, 9 horas después, le dijeron que era por estado de "ebriedad".
 
"Les pregunté qué médico me había revisado, cuál había sido el dosaje de sangre que me habían hecho...", recuerda el periodista.
 
"Pereyra me dijo: Seguís haciendo preguntas pelotudas, ¿querés que te meta dos dias más acá? Vos entraste acá por eso ¿ok?".
 
"Callate la jeta -continuó el sargento, según la denuncia - y agradecé que te soltamos. Vos sos periodista, hacé tu trabajo. Nosotros somos policías y hacemos el nuestro y si tenemos algún error lo corregimos nosotros".
 
"Por último le vuelvo a insistir con la revisación médica y a repetirle que nadie me vio y me respondió en tono irónico que la doctora me estaba viendo. Todo esto sucedió frente a la médica policial (que no se identifico) que estaba al frente mío la cual solamente se reía. Vale destacar que esta “Profesional” firmaba todos los certificados sin revisar a ningún detenido y si mirabas lo que ella escribía el AGENTE ZANINI comenzaba a intimidarte con violencia".
 
"Además debo agregar que dentro del calabozo éramos alrededor de 30 detenidos, la mayoría por contravenciones entre los que había un hombre llamado “Hugo” el cual fue terriblemente patotiado por la policía y tenia múltiples lastimaduras en rostro, cabeza, brazos, piernas etc. un joven con el labio partido y sangrando también producto de los golpes policiales, otro hombre más el cual sufrió una crisis nerviosa al punto que rompió a golpes y forcejeando el candado de la reja del calabozo logrando abrirla. Sumando también a un joven de nombre Federico Torres quien contaba haber sufrido prácticamente la misma suerte que nosotros siendo detenido sin justificación en la vía publica, a él también le respondieron riéndose que entró por ebriedad. Por último aclarar que la mayoría de los efectivos policiales no estaban identificados y particularmente uno de ellos se cambiaba la identificación a propósito", relató.