CÓRDOBA. Si hay un momento de relax en la vida cotidiana es el de las vacaciones. Ese tiempo que se destina a descansar luego de un arduo año de trabajo para volver todavía mejor.
Dentro de ello, hay quienes buscan conectarse con la naturaleza para poder lograr esa relajación tan ansiada. Y Córdoba es una de las opciones más elegidas del país para hacer ese tipo de turismo.
Si bien la provincia ofrece otros turismos, como el de espectáculos, deportivos o históricos, la relajación natural es una virtud geográfica del territorio cordobés, y se puede encontrar ese relax en todos lados. Pero los mejores puntos de relajación son los escondidos.
En ese orden, las cascadas que los ríos de Córdoba forman en terrenos poco explorados son el lugar perfecto para alcanzar el relax deseado. Agua corriendo, sol y naturaleza a la orden del descanso.
Un ejemplo de esto es la cascada de la Reserva Natural La Cascada, en Santa Rosa de Calamuchita. Este punto de relax pasado por agua, ubicado al sur de la cadena serrana, se esconde tras un sendero de fácil acceso, en el cual los visitantes tienen que caminar poco más de dos kilómetros.
En el norte, y más concretamente en Río Ceballos, se encuentra la mítica cascada de Los Hornillos. Este curso de agua frondoso rodeado de piedra pulida por el paso del río está escondido entre el follaje de la Reserva Hídrica Natural Provincial Parque La Quebrada, cuyo acceso implica una caminata de dificultad moderada.
También al norte, en el paraje turístico de La Falda, está enclavada la cascada de Olaén. Esta caída de agua es más reconocida que las anteriores, ya que está a muy pocos kilómetros de distancia de la ciudad de La Falda, y cuenta con ollas profundas para refrescarse.
Otra vez al sur, en el pueblo peatonal de La Cumbrecita, se encuentra uno de los tramos más lindos y desafiantes para llegar a una cascada: el de la cascada Almbach. El curso hídrico se encuentra a unos 20 minutos a pie desde el centro del municipio y tiene algunos desafíos por su terreno irregular, aunque el relax que ofrece el premio es impagable.
Y por último, nuevamente en el norte cordobés se encuentra la Cascada de Vaquerías. En ese lugar, apostado en Valle Hermoso, se puede disfrutar de la Reserva Natural Vaquerías, lugar a atravesar para poder llegar a la refrescante cascada.