Britney Spears vuelve a la Corte para recuperar su libertad

Britney Spears quedó bajo la tutela de su padre, Jamie Spears, en el 2008, luego de atravesar una crisis mental expuesta a los medios. A lo largo de los años, los acuerdos fueron cambiando y el control sobre la vida de la cantante pasó de mano en mano.

Eran muchos los rumores sobre su vida, hasta que ella misma lo confirmó: relató que no tenía control sobre su vida, que la medicaban en exceso, que la hacían trabajar hasta cuando estaba enferma y que sus tutores legales disfrutaban verla sufrir. Llegó al punto de expresar que deseaba demandar a toda su familia.

Las polémicas declaraciones de Britney Spears desataron una serie de eventos dentro del equipo que manejaba la tutela.

Acusaciones internas

Jamie Spears y Jodi Montgomery, una fiduciaria y profesional del cuidado, comenzaron a acusarse sobre quién era el verdadero responsable del malestar de la cantante.

Ambos se echaron la culpa entre sí a través de informes legales y de declaraciones a los medios. Jamie Spears solicitó que se abriera una investigación oficial sobre las acusaciones de su hija mientras Jodi expresó, a través de textos presentados a la Corte, que la estrella de 39 años confiaba en ella.

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Así mismo, Montgomery pidió que se le asignara seguridad especial a Britney ya que había comenzado a recibir amenazas de vida. En respuesta, Jamie Spears completó los papeles necesarios para bloquear dicha petición.

El papá de Britney estuvo a cargo desde el 2008 del cuidado total de la cantante hasta que, en el 2019, debió ceder parte del control a Montgomery. A partir de ese entonces, él se ocupaba del manejo de sus finanzas y ella de su cuidado personal.

Las idas y vueltas entre los dos tutores no serán el centro de la audiencia del miércoles por la tarde. Una de las temáticas centrales de la jornada será el asunto del abogado de Britney.

¿Quién representa a Britney Spears?

El discurso de Britney Spears generó muchas acusaciones hacia su abogado, Sam Ingham. En especial, porque ella aseguró que no sabía que podía pedir que se terminara la tutela cuando quisiera y que él “tenía mucho miedo de que fuera para adelante” en la terminación del acuerdo.

Samuel D. Ingham III es el abogado de Spears desde el 2008, pero nunca avanzó sobre la terminación de la tutela. Sin embargo, el New York Times reportó en un artículo que él intentó que se realizaran modificaciones sobre el acuerdo, incluyendo la remoción de Jamie Spears alegando que su hija le tenía miedo.

Las lealtades de Ingham no quedaron nunca claras al público ya que, fuentes cercanas a la familia Spears habían asegurado que el abogado le informaba a Jamie Spears todos los movimientos de su hija.

Una semana antes de la segunda audiencia, Ingham renunció. Su firma de abogados, Loeb & Loeb, también se separó del acuerdo de la tutela.

A pesar de que Britney Spears había pedido elegir a su propio abogado, la jueza a cargo del caso todavía no determinó si la cantante está en condiciones de seleccionar un abogado por sí misma y, en caso de que no, quién lo hará por ella.

Según el New York Times, Britney estuvo en contacto con Mathew Rosengart, un abogado de Hollywood que estará presente en la audiencia del 14 de julio.

Todos con Britney Spears

El mundo entero está pendiente de cuál será el resultado de la audiencia, no sólo por la salud de Britney Spears, sino porque el caso dio lugar a la conversación sobre lo abusivas que pueden llegar a ser las tutelas legales.

Por eso, no sólo decenas de artistas y fans demostraron su apoyo hacia la princesa del pop. Son varias las organizaciones de defensores de derechos que se involucraron en su lucha.