John Kerry y Xie Zhenhua, los enviados climáticos de las 2 economías más grandes del mundo, se han comprometido a cooperar "para hacer frente a la crisis climática", comprometiéndose a "acciones concretas en la década de 2020" para reducir las emisiones de acuerdo con los objetivos de 2015.
ESPERADO PREACUERDO
USA y China trabajarán por el cambio climático pero qué hacer con el fracking
USA y China se han comprometido a trabajar juntos para combatir el cambio climático, a pesar de las crecientes tensiones sobre las políticas asertivas de Beijing sobre Taiwán y el Mar de China Meridional y sobre los derechos humanos en Hong Kong y Xinjiang. Pro, según publica The Guardian, algunas empresas petroleras están actuando irresponsablemente para no perder dinero y pasar por encima de la ley estadounidense.
“Ambos países recuerdan su contribución histórica al desarrollo, adopción, firma y entrada en vigor del Acuerdo de París a través de su liderazgo y colaboración”, dijeron en un comunicado conjunto.
La promesa, que sigue a 2 días de reuniones de gran importancia en Shanghai, es una señal de que el cambio climático podría ser un área de colaboración en una relación tensa.
La política climática del presidente estadounidense Joe Biden ya se ha alejado drásticamente de la de su predecesor, Donald Trump, y USA regresó al acuerdo de París antes de establecer un nuevo objetivo climático para 2030.
Según el acuerdo de París, los países se comprometieron a limitar el calentamiento global a “muy por debajo” de 2°C, preferiblemente alrededor de 1,5°C, en comparación con los niveles preindustriales.
Li Shuo, un oficial de política energética de Greenpeace en Beijing, dijo que la declaración entre USA y China siguió a "conversaciones difíciles" y se produjo "en medio de grandes desafíos geopolíticos".
“Es muy importante que el resto del mundo comprenda que, al menos en el tema del cambio climático, el G2 está unido nuevamente”, dijo Li.
Él añadió: "Todos sabemos lo que podría suceder cuando estos países se alineen en este tema en particular porque todos lo vimos en el período previo a la cumbre climática de París".
El viaje de Kerry a China se produjo antes de una cumbre estadounidense que ha sido anunciada como una vidriera de las nuevas políticas climáticas de Biden, y mientras Beijing compite por ser visto como líder en las negociaciones climáticas globales.
En el comunicado, los países se comprometieron a cooperar en procesos multilaterales, incluida la próxima conferencia climática de la ONU COP26 en Glasgow, Escocia.
Sin embargo, no llegaron a establecer un grupo de trabajo entre USA y China sobre el cambio climático, una sugerencia que había sido planteada por la parte china durante las conversaciones bilaterales en Anchorage en marzo.
Un tema crítico es si los 2 aceptarán nuevos recortes de emisiones en el corto plazo, y la declaración sugirió avances en esto.
"Estados Unidos y China seguirán discutiendo", dijeron Kerry y Xie.
USA anunciará nuevos objetivos climáticos esta semana.
China ha estado bajo presión para adelantar su objetivo de emisiones máximas antes de 2030.
Edgare Kerkwijk, miembro de la junta de la Asociación de Energía Eólica de Asia, dijo que si bien la declaración entre USA y China "proporciona solo un compromiso de alto nivel" y carecía de detalles, las promesas conjuntas acelerarán la transición mundial de los combustibles fósiles.
"La probabilidad de que logremos un acuerdo climático más completo durante la próxima conferencia climática en Glasgow ha aumentado significativamente", dijo Kerkwijk, y agregó: "Será más difícil para las economías más pequeñas no unirse al proceso de transición energética".
El fracking
Según publica el diario inglés The Guardian, algunas empresas petroleras están actuando irresponsablemente para no perder dinero y pasar por encima de la ley estadounidense que indica que los productores de petróleo deben cerrar los pozos y torres de perforación que no utilicen para evitar que se filtren en el suelo causando un impacto negativo en el medioambiente porque estos pozos contienen sustancias perjudiciales como el metano.
El tema del fracking es muy importante que reciba una visión concreta y con autoridad de parte de la Administración Biden.
Lo cierto es que si bien la ley estadounidense regula la producción de esquisto para que no dañe el medioambiente, muchas de las empresas no se toman muy en serio y optan por pasarlo por alto, ignorando que más adelante se necesitarán cientos de miles de millones de dólares para revertir las consecuencias ambientales.
The Guardian cita como ejemplo a la cuenca Pérmica una región petrolífera situada en el territorio de Texas y Nuevo México, considerada el centro de la industria petrolera en Estados Unidos, donde una empresa que producía esquisto quebró y dejó unas cuantas docenas de pozos sin cerrar en la propiedad donde operaba.