La ONU afirma que el mundo será el hogar de 11.000 millones de personas en 2100, pero estas estadísticas están siendo refutadas por el Instituto para la Métrica y Evaluación de la Salud (IHME, por sus siglas en inglés) preveía una población de 8.800 millones en 2100, una diferencia de algo más de 2.000 millones. África el gran protagonista.
La elevada expectativa de vida sumado a la caída de las tasas de fertilidad en todo el mundo hace que la expectativa para el futuro sea un mundo con menos jóvenes y más ancianos.
En 2100, se espera que más de una cuarta parte de la población mundial tenga 65 años o más.
Statista publicó un informe basado en datos de ONU, DSW y The Lancet a través de Visual Capitalist, la demografía mundial experimentará profundos cambios en las próximas décadas. De hecho, de los diez países que se espera que sean los más poblados en 2100, cinco estarán situados en África. El más poblado de ellos será Nigeria (2º del mundo), con una población estimada de 791 millones, seguido de la República Democrática del Congo (6º con 246 millones).
Otro dato interesante, que aporta Statista, es que China va a experimentar un fuerte descenso demográfico en las próximas décadas. Con una población de algo más de 1.400 millones de habitantes en 2021, se espera que se reduzca a unos 732 millones a finales de siglo, es decir, casi la mitad. Esto se debe a los efectos de las políticas de control de la natalidad aplicadas por Pekín desde finales de la década de 1970. India, en cambio, se prevé que alcance los 1.090 millones de habitantes en 2021, siendo el país más poblado del mundo para entonces.
Nigeria
Nigeria ya es el país más poblado de África y la economía de mayor crecimiento de la región. Pero como menciona Edward Kallons, el coordinador residente de ONU para Nigeria que acaba de concluir su mandato de 5 años, el país africano representa tanto las grandes posibilidades como una amenaza para la región en general. Debe abordar cinco factores de riesgo críticos para garantizar la paz, la seguridad y la estabilidad en el país: cohesión social, igualdad y no discriminación; seguridad interna; estabilidad económica; justicia y estado de derecho; y desplazamiento y migración.
Otras de sus conclusiones es que Nigeria se enfrenta a una serie de tendencias negativas, como la pobreza multidimensional, el déficit de gobernanza y de derechos humanos, el cambio climático, el lento crecimiento económico en un momento de gran crecimiento demográfico, la escasa participación de las mujeres en la sociedad civil y la política, el desempleo juvenil, y los focos de conflicto, bandolerismo, delincuencia y terrorismo impulsados por las diferencias étnico-religiosas, y el aumento de la incitación al odio.
Los conflictos entre agricultores y pastores pasaron a ser parte de mayores tensiones entre diversos agentes; la proliferación de armas pequeñas y ligeras sigue amenazando la seguridad nacional, y Nigeria cuenta con el 70% de los aproximadamente 500 millones de armas ilegales que se cree que circulan por África Occidental.
Sin embargo Nigeria cuenta con una ventaja muy importante: los 41 millones de nigerianos con edades comprendidas entre los 18 y los 29 años constituyen aproximadamente el 40% de la población del país y cerca del 20% de población joven en África. Frente a una población que envejece, Nigeria tiene el potencial de construir un país realmente poderoso.
Covid-19
Solo cerca del 3% de la población de Nigeria ha recibido las dos dosis de las vacunas contra el Covid-19. Reuters informó que Nigeria tiene una gran reserva de vacunas vencidas que no ha utilizado, pudiendo alcanzar hasta el millón de dosis.
Nigeria recibió 700.000 dosis de la vacuna AstraZeneca de Reino Unido en agosto, 800.000 de Canadá en septiembre y otras 500.000 de Francia en octubre. Aproximadamente al mismo tiempo, Nigeria también recibió cuatro millones de dosis de Moderna y 3.6 millones de dosis de Pfizer de USA.
El Ministerio de Salud de Nigeria dijo que algunas de las vacunas donadas le fueron entregadas próximas a su fecha de vencimiento, lo que planteaba serios desafíos logísticos, con tiempo limitado para distribuirlas y administrarlas. Por lo que el gobierno decidió deshacerse de las vacunas vencidas.