Benjamín Netanyahu en la mira: Lo culpan y piden su renuncia

El miércoles (11/10) el historiador y filósofo israelí Yuval Noah Harari en una columna para el diario de Ynet News responsabilizó directamente al primer ministro Benjamín Netanyahu por la guerra desatada entre el estado judío y el grupo terrorista palestino. Además clamó por su dimisión.

Escribió:

“Netanyahu debe asumir inmediatamente la responsabilidad de su terrible fracaso, dejar espacio para personas más talentosas y valiosas, y dar a sus reemplazos su bendición para que acepten con un comité”.

Netanyahu tiene una última oportunidad de hacer lo correcto y entrar en los libros de historia no sólo como el responsable de un desastre nacional, sino también como quien en el último momento eligió el bien del país por encima de su bien personal Netanyahu tiene una última oportunidad de hacer lo correcto y entrar en los libros de historia no sólo como el responsable de un desastre nacional, sino también como quien en el último momento eligió el bien del país por encima de su bien personal

Solo fue el comienzo de una acusación a la que acabaría sumándose la mayoría de la opinión pública, según reveló una encuesta a la que accedió The Jerusalem Post (ya recuperado de los ciberataques).

El estudio del Centro de Diálogo publicado este jueves reveló que una abrumadora mayoría del 86% de los encuestados, incluido el 79% de los partidarios de la coalición, sostuvo que el ataque sorpresa desde Gaza es un fracaso del liderazgo del país.

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Yuval Noah Harari sostiene que el populismo de Benjamín Netanyahu es uno de los causantes de la guerra.

“Además, casi todos los encuestados (94%) creen que el gobierno tiene responsabilidad por la falta de preparación en materia de seguridad que condujo al ataque al Sur, y más del 75% dice que el gobierno tiene la mayor parte de la responsabilidad”, remarcó el diario israelí.

A ojos de la opinión pública, el gobierno y el primer ministro Benjamín Netanyahu son los culpables de la infiltración masiva de los terroristas de Hamás y de la masacre del sur de Israel.

Además, la encuesta a 620 judíos israelíes de todo el país, también encontró que la mayoría de los encuestados (56%) piensa que Netanyahu debería dimitir tras la conclusión de la Operación Escudos de Hierro. También el 52% desea la renuncia del ministro de Defensa, Yoav Gallant.

Si bien el sondeo se realizó antes de que el gobierno anunciara un gabinete de guerra que involucra a la oposición al mando del ex ministro de Defensa de Israel, Benny Gantz, los israelíes no confían en el liderazgo del gobierno en la guerra de Gaza. Tal ve la instauración de un gobierno de emergencia prolongue su salida.

Benjamín Netanyahu en la mira

Una de las interrogantes que más afligen a los israelíes es ¿Cómo lograron penetrar los terroristas en Israel, un estado con servicio militar obligatorio para mujeres y hombres y con grandes avances en materia de defensa? ¿Cómo milicianos con equipamiento militar inferior lograron engañar a la compleja, amplia y famosa inteligencia israelí?

Harari y la mayoría de los encuestados atribuyen a la falta de preparación y de competencia de las FDI y la policía por una desidia del gobierno israelí, centrado más en su coalición para eludir cargos de corrupción. Algo que se evidenció con la polémica reforma judicial que pretende cercenar el poder de la corte sobre el ejecutivo.

“Los jefes del establishment de seguridad y una larga lista de expertos han advertido al gobierno una y otra vez que sus políticas ponen en peligro a Israel y perjudican la disuasión israelí en una época de crecientes amenazas externas. Netanyahu y sus socios mesiánicos despreciaron a los expertos e ignoraron todas las advertencias. Más bien, interpretaron estas advertencias como una expresión de deslealtad política”, apunta Harari.

Justamente uno de los jefe de Hamas explicó que lo que inspiró al ataque fueron las provocaciones por parte de derechistas israelíes alimentadas por el gobierno y colonos que incursionaron en mezquitas como la de Al-Aqsa y que devino luego en fuego cruzados entre Israel y Gaza.

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Benjamín Netanyahu en la mira de todos los israelíes.

El historiador sostuvo en otra columna en The Guardian que el conflicto palestino-israelí durante décadas se ha desarrollado con prueba y error.

Asimos explicó el recrudecimiento del conflicto palestino-iesraelí con la llegada de Benjamín Netanyahu y sus gobiernos de línea dura. La izquierda, desacredita por su fracaso al intentar dejar a mediados de la década de 2000 Gaza pero imponiendo un bloqueo parcial a la Franja de Gaza y ocupando Cisjordania, contribuyó al ascesno de Hamas al poder.

Los israelíes esperaban que con su retiro, los palestinos construyeran un estado pacífico y próspero, pero con un bloqueo parcial se convirtió en una compleja faena. Hamás se apoderó de la Franja de Gaza y la convirtió en una base terrorista.

Populismo

Harari también apuntó contra el populismo de Netanyahu en The Washington Post al que, según él, construyó su carrera dividiendo a la nación contra sí misma.

Lo acusó de formar en 2022 un gobierno compuesto por una alianza de fanáticos mesiánicos y oportunistas descarados, que "ignoraron los muchos problemas de Israel –incluido el deterioro de la situación de seguridad– y, en cambio, se centraron en hacerse con un poder ilimitado. Para lograr este objetivo, adoptaron políticas extremadamente divisivas,difundieron escandalosas teorías de conspiración sobre instituciones estatales que se oponen a sus políticas y etiquetaron a las élites que servían en el país como traidoras del “Estado profundo” .

Pero el populismo no tendría éxito sin la legitimación de la ciudadanía crédula y desinformada. Por ello pidió a los israelíes que no sólo "exijan cuentas al actual gobierno, sino que también abandonen las conspiraciones populistas y las fantasías mesiánicas".

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La guerra no ceja y recrudece.

Futuro

El filósofo dejó un escenario aterrador. La masacre podría recrudecer por una lucha en busca de una limpieza étnica. El propio ministro de finanzas Bezalel Smotrichhan advertido incluso a los ciudadanos árabes de Israel que “estáis aquí por error porque Ben-Gurion [el primer primer ministro de Israel] no terminó el trabajo en 1948 y no os echó”.

“El año 2023 podría permitir a los fanáticos de ambos bandos perseguir sus fantasías religiosas y reescenificar la guerra de 1948 con venganza. Podría ser la peor crisis humanitaria que la región ha experimentado desde aquel año”, amplió Harari.

Al final propone: “Una coalición de dispuestos –desde Estados Unidos y la UE hasta Arabia Saudita y la Autoridad Palestina– debería quitarle a Hamás la responsabilidad de la Franja de Gaza, reconstruir Gaza y simultáneamente desarmar completamente a Hamás y desmilitarizar la Franja de Gaza”