David Lynch, el genio del surrealismo cinematográfico, hoy hubiera cumplido 79 años

La semana pasada David Lynch, uno de los directores de cine más aclamados de todos los tiempos, pasó a la eternidad. Lo recordamos en su cumpleaños.

Por GERMÁN MOLKUC

El pasado 15/01, el cine perdió a David Lynch, un quimérico creador que redefinió los límites del arte audiovisual. Hoy, el director de "Twin Peaks" habría cumplido 79 años, dueño de una carrera repleta de obras tan inquietantes como brillantes, que abarcaron tanto el cine como la televisión, e incluso pasando por la pintura y la música.

Los comienzos de David Lynch: de la pintura a las películas

David Lynch nació el 20 de enero de 1946 en Missoula, Montana, en una familia que, debido al trabajo de su padre como científico forestal, se mudaba constantemente de casa. Fue durante esta época en la que Lynch empezó a mostrarse interesado por el arte, soñando con convertirse en pintor, una pasión que lo llevó a estudiar en instituciones prestigiosas como la Pennsylvania Academy of the Fine Arts.

image.png

$David Lynch tiene la honra (o en algunos casos, deshonra) de haber dirigido algunos de los mayores clásicos del cine. Ya sea, "Blue Velvet" o "Dune" (la versión mala, no la de Timothée Chalamet), que fue un fracaso pero hoy es un filme de culto.$

David Lynch tiene la honra (o en algunos casos, deshonra) de haber dirigido algunos de los mayores clásicos del cine. Ya sea, "Blue Velvet" o "Dune" (la versión mala, no la de Timothée Chalamet), que fue un fracaso pero hoy es un filme de culto.

Allí Lynch experimentó por primera vez con el cine, creando en 1967 Six Men Getting Sick, un corto de 4 minutos que mezclaba animación, pintura y escultura, y que sería el germen de su estilo perturbador. En 1970 ingresó al American Film Institute, donde trabajó en su primer largometraje, Cabeza de borrador (1977). La película, de una atmósfera opresiva y surrealista, se convirtió en un fenómeno de culto y llamó la atención de la industria, lo cual le permitió dirigir su siguiente gran éxito, El hombre elefante, en 1980.

Este conmovedor drama, que tenía a John Hurt en la piel de John Merrick (un hombre con una extraña enfermedad que le desfigura la cara pero con un gran corazón) le valió dos nominaciones al Oscar y confirmó su capacidad para explorar tanto lo extraño como lo profundamente humano.

Mucho más que un director de cine

Así como Lynch pudo innovar en su carrera, también tuvo algunas controversias. En 1984, intentó adaptar la novela Duna, pero fracasó tanto comercial como críticamente (al punto que exigió que retiraran su nombre de la película), pero no tardó en reivindicarse con Blue Velvet (o Terciopelo azul en inglés), que fue considerada una obra maestra del misterio y lo perturbador, redefiniendo el cine de autor estadounidense. Sin embargo, fue con la serie Twin Peaks de 1990 que Lynch revolucionó la televisión a nivel mundial, mezclando misterio con surrealismo y drama humano.

image.png

Lynch tenía un estilo muy particular. Sabía encontrar la belleza incluso en lo extraño.

Su filmografía incluye joyas como Sueños, misterios y secretos (o Mulholland Drive) de 2001, una película que explora de manera compleja los sueños y la psique, y que le valió el premio a Mejor Director en Cannes y una nominación al Oscar. Pero Lynch no se quedó únicamente en el cine: también otros campos como la música, la fotografía y la pintura, mostrando un espíritu inquebrantable y creativo por el que fue homenajeado con un Oscar honorífico en 2019.

A 79 años de su nacimiento, Lynch es recordado como un artista que nos enseñó a encontrar la belleza de lo extraño.

--------------------------------------------------------------------