No existe un consenso respecto de las causas por las cuales ocurrió la detonación pero sí está confirmado que en el puerto de Beirut, capital del Líbano, había 2.750 toneladas de nitrato de amonio, que equivalen a 1,1 kilotón de TNT, almacenadas durante 6 años, sin cumplimentar las medidas de seguridad indispensables, más allá de que no es conveniente semejante polvorín en medio de un centro urbano. Es la efeméride de hoy.
Si bien el epicentro del estallido se circunscribió al puerto, las repercusiones afectaron a toda Beirut, e inclusive a todo el Líbano, que ya venía atravesando décadas de crisis, se encontraba en situación de 'default' financiero y no contaba con recursos para afrontar los gastos de la pandemia.
La explosión en sí provocó más de 218 muertos, 7.500 heridos y US$ 15.000 millones en daños materiales; el siniestro dejó a 300.000 personas sin hogar.
La explosión se escuchó en Siria, Israel, Palestina y hasta la isla de Chipre, a más de 240 km (150 millas) de distancia.
El incidente fue catalogada por el Servicio Geológico de Estados Unidos como un evento sísmico de magnitud 3.3, y es una de las explosiones artificiales no nucleares más poderosas de la historia.
El gobierno libanés declaró un estado de emergencia de 2 semanas pero no pudo contener la indignación popular al trascender que esas sustancias explosivas habían quedado almacenadas por culpa
- de la burocracia,
- de la crisis política que acumula el país y
- de la incapacidad del liderazgo para prevenir desastres.
Testimonio a 10 km del infierno
A más de 10 km del epicentro, relataron Rami Ruhayem y Paul Adams, corresponsales de BBC News en Oriente:
Hasta ahora, los funcionarios han rechazado las solicitudes del investigador principal, el juez Tarek Bitar, de levantar la inmunidad de varios legisladores de alto rango y jefes de seguridad para que puedan ser interrogados por sospecha de negligencia criminal, así como de homicidio con probable intención.
Los funcionarios incluyen al primer ministro interino Hasan Diab; los exministros de Obras Públicas y Transporte, Yousef Finianos y Ghazi Zeiter; el exministro de Finanzas, Ali Hasan Khalil; y el exministro del Interior, Nouhad Machnouk, así como el jefe de Seguridad General, el general de división Abbas Ibrahim.
Backstage y caos
¿Cómo llegaron al puerto de Beirut las 2.750 toneladas de nitrato de amonio?
BBC:
El nitrato de amonio es un compuesto que puede ser utilizado como fertilizante pero también en la fabricación de explosivos. Si no se almacena en las condiciones adecuadas, como parece ser el caso en la capital libanesa, puede resultar muy peligroso.
El director general de Aduanas, Badri Daher, y el encargado del puerto, Hassan Koraytem, advirtieron en repetidas ocasiones, en vano, sobre el peligro que suponía mantener el nitrato de amonio sin las medidas de seguridad requeridas.
La pregunta por qué se descuidó el nitrato de amonio durante 6 años requiere una respuesta que, aparentemente, es difícil de hacer pública.
Las 3 hipótesis
El juez encargado de las investigaciones sobre lo ocurrido informó las 3 hipótesis sobre el estallido.
- un ataque aéreo,
- un posible atentado,
- un incendio debido a una falla humana.
El principal punto de la investigación apunta a un “error humano” durante unos trabajos de soldadura en una de las naves del puerto, pero no descartan las otras dos premisas.
Francia, que participa de manera privada en la investigación, por la muerte de 20 ciudadanos galos en Beirut, descarta una de las premisas de las investigaciones libanesas, sin aclarar cuál.
El magistrado libanés, Tarek al Birar, que señaló que el análisis “avanza al 80%”.
Macron
El presidente francés Emmanuel Macron intentó ocupar un protagonismo en la crisis. Al final de cuentas, Líbano es una ex colonia francesa.
Desde la explosión, Macron ha visitado Líbano en 2 ocasiones. Él insistió en formar un gobierno estable. Pero la inestabilidad es inalterable.
A 1 año de la explosión en el puerto de Beirut, no hubo avances. Macron acaba de inaugurar una conferencia internacional para gestionar ayudas para la población libanesa.
Una vez más, Macron criticó la incapacidad de los líderes políticos del país para “hacer a un lado sus intereses personales”.
En un evento virtual en el que también participó el presidente libanés Michel Aoun, el mandatario francés resaltó que la prioridad es formar un gobierno enfocado en atender la emergencia social del país y que las ayudas no serán un "cheque en blanco" a su clase política.
Macron envirá algo más de 100 millones de euros al Líbano y 500.000 dosis de vacunas contra el Covid-19.
Él tuiteó: "Francia continuará sosteniendo y ayudando a la población del Líbano".
Hace 3 semanas, el entonces primer ministro en funciones, Saad Hariri, renunció a su cargo tras 9 meses sin lograr formar gobierno. Macron siempre lo ayudó y no logró nada.
Hariri no llegó a un acuerdo con el presidente Aoun sobre el gabinete de 24 integrantes.
A finales de julio, encargaron que lo intente el empresario Najib Mikati. Todavía no ha prosperado en su empeño.