ECONOMÍA

DESPIDOS

Polémica con Techint porque incumplió la conciliación obligatoria

Techint fue, semanas atrás, una de las firmas que se sumaron al acuerdo solidario lanzado por el gobierno nacional, pero esta semama despidió a 191 empleados. Ayer el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires dictó la conciliación obligatoria para impedir los despidos pero la empresa la inclumplió.

El Grupo Techint busca fórmulas para poder mantener operativa sus actividades en la localidad bonaerense de Campana, donde el holding de la familia Rocca posee una de sus principales plantas de la Argentina.

En el establecimiento que es operado por su filial Siderca, trabajan cerca de 3.000 operarios y viene siendo golpeada por una fuerte crisis, producción en baja por la caída de los mercados internacionales, en especial el de Estados Unidos.

También siente los rigores del mercado local, donde los problemas económicos de la Argentina se replican en las actividades de Vaca Muerta, región en la que el holding de la familia Rocca ha inyectado varios miles de millones de dólares a través de su petrolera, Tecpetrol.

En este marco, desde la conducción de Techint se decidió reducir la planta de personal de su planta de Campana que, según fuentes gremiales, afectó a entre 200 y 300 trabajadores que habrían sido despedidos.

La decisión generó una fuerte disputa con el gremio de la UOM y repercutió también en el Gobierno, teniendo en cuenta que los despidos se llevaron a cabo a pesar de la vigencia de un acuerdo con el sector empresario para evitar desvinculaciones, por lo menos en los próximos 90 días.

Con una fortuna cercana a los US$6.600 millones, Paolo Rocca fue uno de los principales hombres de negocios del país que ya mantuvo reuniones con el presidente Alberto Fernández en privado, y participó de algunos eventos públicos junto a otros importantes miembros del gabinete del Frente de Todos.

Según fuentes del mercado, en alguno de esos encuentros, ya habría informado sobre los problemas que vienen sufriendo algunas de sus empresas como la de Campana, donde se producen tubos para gas y petróleo que casi de manera exclusiva se destinan a abastecer la demanda de Vaca Muerta.

Con este marco de fondo, la empresa llevó a cabo un esquema de suspensiones y pago del 90% de los salarios que aplicó hasta fines del año pasado. Pero, según denuncian desde la UOM, con el inicio del 2020 hubo despidos.

De hecho, en declaraciones radiales, el secretario general de la UOM, Abel Furlán, explicó que la empresa ya había amenazado con 191 despidos que se concretaron el lunes por la noche, si no se acordaba un nuevo esquema de suspensiones.

El dirigente admitió que su gremio está en condiciones de seguir aceptando el mismo esquema de suspensiones con el pago del 90% de los salarios.

Sería la propuesta que la UOM llevaría ayer a una mesa de negociaciones abierta en la sede del Ministerio de Trabajo bonaerense, seccional Campana, y a la cual asistirían ejecutivos de peso de Techint.

La reunión fue convocada por la cartera laboral de la provincia que goberna Axel Kiciloff y tal como se anticipaba, se terminó dictando la conciliación obligatoria para retrotraer los despidos y avanzar en negociaciones.

Sin embargo, según publicó hoy el 'Diario de Izquierda', los despidos siguen adelante: a las 21:00 se debía realizar el ingreso de los trabajadores a la planta después de que en horas de la tarde se dictara la conciliación obligatoria, pero al llegar los trabajadores a la portería junto a varios compañeros de trabajo, a representantes del sindicato y del Ministerio de la ciudad de Campana, no pudieron ingresar por los molinetes de la planta sin que haya ningún emisario por parte de la empresa. 

En la entrada lo único que había era una copia de la empresa que decía "Se comunica al personal desvinculado (…) temporalmente reincorporado recomenzará a devengar salarios en condiciones análogas a las aplicables hasta el momento…". 

Es decir que pretende pagar los salarios mientras dure la conciliación obligatoria pero sin permitir el ingreso a planta de los trabajadores violando de esta manera el dictado del Ministerio de la Provincia que gobierna Kicillof. 


 

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