ARCHIVO >

Cómo ampliar la cobertura de los servicios de salud a los empleados de las pymes

POR YOLANDA ARENALES (*) Ginés González García no ha logrado resolver, como ministro de salud, la ampliación de la cobertura sanitaria en el país, tema muy delicado en días de pobreza generalizada. El ministro –fiel a sus inicios- cree que las obras sociales deben seguir resultando el eje del sistema, con un subsidio del estado que se lo resta al dinero que debe ir a los hospitales públicos. el tema de la salud no es un exclusivamente argentino y como un aporte al debate, aquí va lo que ocurre hoy dìa en USA:

Más de 41 millones de personas carecen de seguro médico en USA, según datos del Departamento del Censo. Muchos son empleados de pequeños negocios cuyos dueños no pueden pagar los altos costos que implica ofrecer ese beneficio para sus trabajadores. Sólo en 2001, los costos del cuidado médico subieron unos US$ 67 millones, o sea casi el 14%. Debido a esto, muchos pequeños negocios han cancelado sus planes de cobertura médica para sus empleados, esta tendencia amenaza a millones de trabajadores, dado que el 52% de la fuerza laboral en el sector público es empleada por pequeños negocios. Según un estudio de la Fundación Familiar Kaiser, el 48% de los trabajadores sin seguro médico trabajaba para compañías con menos de 25 empleados, mientras que el porcentaje se elevaba al 33% en el caso de los negocios con menos de 10 empleados. Sin embargo, en las empresas con más de 500 trabajadores el porcentaje es sólo de un 7%. Según Terry Neese, presidenta de Mujeres que Impactan en las Políticas Públicas (WIPP), una organización nacional que representa a 9.1 millones de mujeres propietarias de negocios, las primas de seguro de salud se han elevado para este año entre un 12% y un 72%. "Los pequeños empresarios quieren ofrecer este beneficio a sus trabajadores, pero simplemente no lo pueden pagar", indica la empresaria. Neese es una firme defensora de la Asociación de Planes de Salud (AHP) que prevé el proyecto de ley Justicia de Salud en los Pequeños Negocios (HR660), aprobado por la Cámara Baja la semana pasada con un voto de 262-162. # Costos elevados Según la senadora republicana por Maine Olympia Snowe, la medida permitiría a los pequeños negocios agruparse para comprar en bloque planes de seguro médico o crear sus propias redes de seguro del mismo modo que ya lo hacen muchas grandes compañías, obteniendo las reducciones de precio de las que éstas se benefician. "La vertiginosa subida de los precios de los seguros médicos simplemente está aplastando a los pequeños negocios", comentó la senadora, quien considera que con las AHP los precios podrían reducirse entre el 13% y el 30%, entre otras razones porque la tramitación administrativa del sistema es más eficiente cuando se agrupa bajo ella un gran número de asegurados. Para Scott Hauge, presidente de Cal Insurance & Associates, una agencia de seguros con 30 empleados, los costos de los beneficios médicos que les ofrece se están convirtiendo en una carga difícil de llevar. "Para mí, la subida de este año ha sido de un 38%, lo que me supone pagar US$ 20.000 más para mantener el mismo nivel de cobertura", explica este empresario, que duda poder seguir asumiendo el 100% de los costos de seguro médico que en la actualidad ofrece a sus trabajadores. "Asociarse está bien, pero sería más efectivo a nivel estatal que nacional como propone el proyecto de ley", dice Hauge, señalando que las asociaciones de empresarios dentro de un estado conseguirían mejores precios. Algunos estudios indican que las asociaciones nacionales sólo causarán una reducción de un 6% en los costos del seguro de los negocios en California, mientras que las estatales conseguirían un 23%. Ello se debe a que cuanto más miembros haya dentro del estado, mejores precios se conseguirán con las aseguradoras que operan en él. # Pros y contras El proyecto está ahora pendiente de aprobación por el Senado, dejando abierto el debate entre los defensores y detractores de la medida. Aunque todos coinciden en admitir que es necesario facilitar el camino para que los pequeños negocios puedan ofrecer seguro a sus empleados, la solución que esta ley propone no es la acertada para algunas de las partes involucradas. Esta es la cuarta vez que la Cámara Baja aprueba un proyecto de ley sobre este tema sin que hayan tenido éxito en el Senado. "El principal problema es que la ley es de carácter nacional y no exige que se cumplan los estándares que cada estado fija en cuanto al tipo de prestaciones que va a cubrir", dice Jodi Coffey, portavoz de Regence BlueShield. Coffey explica que la mayoría de las legislaciones estatales prohíben, por ejemplo, la discriminación de los asegurados en función de su estado de salud, algo que no tendría que respetarse si se aprueba esta ley federal, lo que en palabras de Mary Nell Lehnhard, vicepresidenta de Asociación Blue Cross y Blue Shield (BCBSA), permitiría "escoger a los trabajadores más saludables, estableciendo primas más elevadas para los grupos de mayor edad o con más probabilidades de enfermarse". Blue Cross y Blue Shield, que controlan ahora más de la mitad de la cobertura para pequeños negocios y hasta un 80% en algunos estados en particular, están gastando millones de dólares para matar el proyecto de ley, según una editorial de The Washington Times. Neese considera que las grandes aseguradoras serán el principal obstáculo para que la ley se apruebe en el Senado, lo que en su opinión se debe a que éstas ven amenazados sus ingresos por el abaratamiento de las primas que la nueva medida supondría. Sin embargo, organizaciones ajenas a esta industria también muestran su preocupación ante la nueva ley. "No cabe duda de que los propietarios de pequeños negocios merecen mejores opciones de seguro médico para sus empleados, pero la HR660 no es una buena solución, porque se traduciría en peores condiciones para el consumidor", dice Ami Gadhia, de la Unión de Consumidores. Gadhia explica que la nueva legislación no es buena para ningún tipo de trabajador, ya que aunque los más sanos pagarían menos, sus coberturas serían mínimas, mientras que a la vez las personas con más alto riesgo de enfermedad serían penalizadas con primas muy altas. Sin embargo, para Nydia Velázquez, congresista demócrata por Nueva York, la ley sería un primer paso para hacer más extensivas las coberturas médicas. # Próximos pasos Velázquez indica que según el Instituto de Investigación Consad, las AHP, tal como están diseñadas en la medida aprobada por la Cámara Baja darían cobertura básica a 8,5 millones de trabajadores que ahora carecen de seguro médico. Aunque los autores y simpatizantes de este proyecto de ley sostienen que es la solución para reducir el creciente número de trabajadores que carecen de un seguro médico, algunos sectores de pequeños negocios sostienen que la cantidad (de asegurados) no justifica la reducción en la calidad de los servicios que recibirá la mayoría de los empleados. "Por supuesto que la idea de unir a los pequeños negocios para crear un sistema de compra [de seguros] más eficiente es muy atractiva, pero no se trata de ‘robar a Pedro para pagar a Pablo’", expresó Todd McCracken, presidente de la Asociación Nacional de Pequeños Negocios (NSBA), quien considera que serían los trabajadores más necesitados los que quedarían excluidos de obtener primas a precios razonables. Para la NSBA es primordial que cualquier legislación en este sentido mantenga las garantías de las regulaciones estatales, y abogan por el establecimiento de planes en los que las asociaciones en vez de nacionales sean estatales. Sin embargo, otras asociaciones empresariales como la Federación Nacional de Negocios Independientes, con más de 600.000 miembros en todo el país, manifestaron por escrito al Congreso su apoyo al proyecto de ley HR660, señalando que "permitiría a los pequeños negocios las mismas elecciones, accesibilidad y reducidos precios de los que disfrutan las grandes compañías". --------------------------- (*) La Opinión, Los Angeles, California, USA, 2003.