Pruebas Aprender 2021: deterioro educativo preocupante

Las evaluaciones Aprender 2021 fueron tomadas en diciembre del año pasado, solo a los alumnos de sexto grado del nivel primario en casi 20.000 escuelas de todo el país, en las disciplinas de Lengua y Matemática. Se analizó el desempeño de aproximadamente 623.000 chicos.

La situación más alarmante es en Lengua. El 44 % de los alumnos tuvo un desempeño básico o inferior en esa área. Los chicos mostraron un deterioro significativo en la comprensión de textos, 25 puntos porcentuales más que en la última prueba del 2018. Es decir que los chicos llegan casi con un pie a la secundaria con severos problemas para comprender un texto.

El propio Ministro de Educación, Jaime Perczyk reconoció el retroceso e ineptitud de los alumnos en aquella área: "Centralmente lo que muestra son dificultades en Lengua".

En Lengua el 22,3% mostró un desempeño "por debajo del básico", y el 21,7% fue "básico". En el 33,6% de los alumnos fue "satisfactorio", y en el caso de 22,4% fue "avanzado". En 2018, el porcentaje de alumnos con desempeño “por debajo del básico” había sido del 7,1% y, con resultado “básico”, del 17,6%.

Se evidencia una notable caída. Solo dos de cada diez alumnos (22%) están capacitados para comprender sin ningún tipo de dificultad las preguntas que tengan que ver con los textos narrativos. La comprensión lectora consistía sobre diversos tipos de textos literarios y no literarios. Se investigó sobre varias capacidades cognitivas: interpretar, extraer y reflexionar, y evaluar.

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Las pruebas Aprender también reflejaron la enorme brecha de aprendizaje y rendimiento escolar entre los sectores socioeconómicos más altos y más bajos. Los estudiantes de los niveles socioeconómicos más bajos obtuvieron los peores resultados. Un gráfico indica que el 42,4% de los alumnos que conforman el nivel socioeconómico alto logró un nivel avanzado en Lengua. En el otro extremo sólo 6,6 por ciento alcanzó dicho nivel en el área.

En Matemática también se percibe una caída pero más leve. El 23,1% de los alumnos mostró un desempeño "por debajo del básico" y el 22,1% fue "básico", mientras que en el 39,1% de los casos fue "satisfactorio" y sólo en el 15,7% fue "avanzado". En la comparativa con 2018, el porcentaje de estudiantes con rendimiento por debajo del básico había sido del 19,6%.

El Ministro de Educación, Jaime Perczyk reconoció la alarmante situación educativa del país. “Los resultados de las evaluaciones reafirman que es necesario que las chicas y chicos sumen más días y horas de clase porque eso significa más conocimiento y mejor educación”, expresó.

Aunque Perczyk atribuyó el descenso del rendimiento al impacto de la pandemia y al “desfinanciamiento del sistema educativo" del gobierno anterior, la realidad es muy distinta. La respuesta del gobierno frente a la pandemia y no la pandemia en sí impactó severamente en la educación. Es decir, el descuido y la inoperancia de la actual gestión con el sistema educativo del país.

Durante los dos años de pandemia las escuelas permanecieron prácticamente cerradas, producto de la ineficiente cuarentena eterna del gobierno que él integra. En esta línea muchas escuelas no contaron con un eficiente equipo virtual para la instrucción de clases y los docentes tampoco tenían el conocimiento tecnológico y técnico para impartirlas.

Ante la preocupante situación el ministro aseguró que revertir el problema educativo "lleva mucho tiempo, mucho trabajo, mucha inversión", y proyectó que el período para recuperar los aprendizajes "no baja de los tres años".

Entre las medidas necesarias para la reconstrucción, destacó la importancia de mejorar las condiciones socioeconómicas de los estudiantes, el nivel educativo de la familia y extender el calendario escolar con más días y horas de clase. También comunicó un programa de capacitación docente con una inversión de 3 mil millones de pesos.