No los une el amor sino el espanto que representa que el gobierno porteño prorrogue otra vez una concesión vencida hace 2 décadas. Una nueva extensión, la 8va, de los contratos de acarreo es lo que pretende evitar el denominado "Frente Anti-grúas", que integran en la legislatura de la Ciudad de Buenos Aires fuerzas tan disímiles como el kirchnerismo, el peronismo no K, los libertarios de Javier Milei y la izquierda troskista.
EN LA CABA
Acarreo: El espanto que unió a Milei con los K
Un megabloque opositor en la legislatura porteña busca dar de baja el sistema de acarreo vigente. Pero está complicado el quórum.
El acarreo de autos está en manos de 2 empresas, BRD y Dakota-STO. La concesión está vencida desde 2001, pero el gobierno de la CABA otorgó sucesivas extensiones al considerarla un servicio público. Las empresas pagan un canon mensual de $55 mil. A fines de julio, el Ejecutivo porteño hizo un llamado a licitación cuyos sobres se abrirían hacia fin de año.
Sin embargo, el "Frente Anti-grúas" quiere dar de baja el actual funcionamiento del sistema de acarreo hasta que se regularice la situación de la concesión, lo que pretende conseguir en una sesión especial convocada para este jueves.
El pedido fue acompañado de 28 legisladores, 3 menos de lo que se requiere para el quórum. El megabloque opositor necesitará entonces de la colaboración del oficialismo local, es decir de Juntos por el Cambio.
La esperanza está en que esa colaboración provenga de la Coalición Cívica de Elisa Carrió, y de Republicanos Unidos, el espacio de Ricardo López Murphy que en la legislatura lidera Roberto García Moritán.
Sin embargo, el vendaval desatado por Carrió en la interna de JxC a nivel nacional dejaría poco margen para que alguno de los espacios saque los pies del plato.
Por caso, desde la Coalición Cívica ya anticiparon que no dará quórum, pero que presentarán un proyecto para que el gobierno porteño no tenga posibilidad de prorrogar el servicio con aquellas 2 empresas a partir de los 90 días de realizada la adjudicación de la nueva licitación.
Desde Republicanos Unidos, no obstante, dejaron trascender que aún debaten qué postura tomar.