Marvel estrena la serie más woke de Spider-Man hasta la fecha (aunque juren que no)

Spider-Man regresa en una nueva serie animada de Marvel que dice no ser woke, aunque los cambios en personajes icónicos no hacen mucho para sostenerlo.

Por GERMÁN MOLKUC

Marvel estrenó este miércoles 29/01 su nueva serie animada del Hombre Araña, "Tu amigo y vecino Spider-Man", que llegó prometiendo algo fresco y alejado de los típicos clichés. Pero, aunque el protagonista dice lo contrario, la serie no tarda en mostrar que es otro producto woke del estudio más que una adaptación honesta del trepamuros.

Cambiando de color: el blackwashing en Spider-Man

El intento de darle una vuelta de tuerca a los personajes clásicos del universo Spider-Man se vuelve cuestionable al observar los cambios de raza impuestos por los creadores. La serie, que trata de ser más moderna y representativa, tiene la brillante idea de hacer blackwashing con algunos de los personajes más emblemáticos de la franquicia. Para quienes no están familiarizados con el término, se refiere a la práctica de cambiar la raza de personajes históricamente representados como blancos en los cómics, simplemente para “diversificar” la trama, sin ofrecer un argumento que lo justifique.

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"Tu amigo y vecino Spider-Man", la nueva serie de Marvel sobre el trepamuros, se estrenó este miércoles 29/01 y trae un reparto variopinto de personajes. Aunque algunos de ellos son tan emblemáticos que el público se cuestiona cómo Marvel se atreve a tocar su raza.

¿Quién se atreve a tocar la icónica figura de Norman Osborn, el malvado Duende Verde? Pues Marvel, claro. En "Tu amigo y vecino Spider-Man", Osborn (a quien Willem Dafoe encarnó de manera inolvidable) no solamente es negro, sino que su hijo Harry, quien siempre fue pelirrojo de rasgos europeos, también fue transformado en un personaje negro. Y, por si todo eso no fuera el colmo, Tombstone (Lonnie Lincoln), un villano que es albino en los cómics, ahora es negro también y es compañero de Peter.

Todo esto sin ninguna explicación contextual que justifique estos cambios. En lugar de construir personajes nuevos y auténticos, parece que el truco es cambiar de color a los existentes para hacerlos más "progresistas". ¿De verdad esto es lo que significa ser inclusivo o solo es un lavado de imagen? Los cambios, en lugar de sumar, parecen más bien una muestra de que, para Marvel, lo importante es dar la impresión de diversificar sin representar realmente a las minorías.

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El cambio que más chocó fue el "blackwashing" realizado a Norman Osborn y a su hijo Harry. Los dos son emblemáticamente famosos en los cómics por haber llevado el manto del Duende Verde, pero en una pobre estrategia de parte de Marvel los hicieron negros.

Y claro, más allá de la polémica sobre los personajes, la serie se presenta como una versión alternativa del universo de Spider-Man, donde reemplazan a Tom Holland por Hudson Thames como intérprete. El hecho de que se trate de un "universo alternativo" da pie a cambios en los personajes, pero que eso se utilice como excusa para alterar porque sí la esencia de personajes tan queridos no deja de ser algo innecesario.

El actor asegura que la serie no es "woke", pero... ¿está seguro?

Hudson Thames, quien pone la voz a Peter Parker/Spider-Man en esta nueva serie, se muestra preocupado por ser etiquetado en un contexto "woke", y por ello, en una entrevista con Collider, aclaró que su mayor temor era que la serie se volviera "molesta y woke". No obstante, los cambios en los personajes parecen indicar todo lo contrario. El actor, en su intento por tranquilizar a la audiencia, asegura que la serie "no es molesta" y que está "muy bien escrita", pero lo que le falta en su declaración es el análisis de cómo las decisiones de los creativos parecen contradecir sus palabras.

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Hudson Thames, el actor que presta su voz en inglés a Peter Parker/Spider-Man, aseguró en una entrevista que le alegra que la serie no sea "molesta ni woke". Pero hasta ahora, toda la evidencia parece decir lo contrario.

La contradicción es evidente: un Spider-Man que se quiere mantener "fresco y moderno" pero que, en el fondo, cae en los clichés de una corrección política vacía. Si de verdad la serie no fuera woke, ¿por qué hacer estos cambios tan obvios y poco justificados? ¿No sería más fácil crear personajes nuevos con una representación auténtica, en lugar de modificar a los viejos?

Lo más irónico es que, mientras el actor sale a defender la serie, el guion y los cambios de personajes parecen ser una clara forma de encajar en lo que muchos denominan "woke", pero de la manera más superficial. Tal vez la única molestia real es ver cómo una de las franquicias más queridas de la cultura cae nuevamente víctima de un espacio de experimentación sin fin.

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