En el mundo actual, que está especialmente atento a la salud y a los hábitos debido a la crisis por el COVID-19, tiene sentido considerar cómo la comida rápida podría afectar el sistema inmunológico. Diversos estudios se han hecho sobre el tema y todos llegaron a una conclusión similar: la comida rápida es, en última instancia, dañina para el sistema inmunológico, aunque la situación es un poco más complicada que eso.
COVID Y DEFENSAS
Esta comida debilita el sistema inmunológico, según estudios
El sistema inmunológico es la defensa natural de su cuerpo contra diversas infecciones, por ejemplo las bacterias y los virus. El cuerpo ataca y destruye los organismos que lo invaden. En momentos donde esta parte del organismo es fundamental para protegernos del COVID-19, entérese cómo cuidarlo bien.
05 de abril de 2021 - 22:58
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En 2018, la Universidad de Bonn realizó un estudio o que exploraba la relación entre la comida rápida y el sistema inmunológico. Colocaron a un grupo de ratones en lo que determinaron que era una dieta "occidental": alta en grasas, alta en azúcar y baja en fibra. Esencialmente, un modelo para la "nutrición" de la comida rápida.
Después de un mes, descubrieron que el sistema inmunológico de los animales estaba teniendo una reacción interesante. Habían "desarrollado una fuerte respuesta inflamatoria en todo el cuerpo". El estudio comparó esta respuesta con la forma en que reaccionaría su sistema inmunológico después de ser infectado con "bacterias peligrosas".
Otro dato interesante es que cuanto más tiempo esté un cuerpo expuesto a alimentos poco saludables, más agresivo se volverá el sistema inmunológico. Esto suena a que podría ser algo bueno: ¿quién no querría un sistema inmunológico poderoso que esté listo para funcionar? Pero ese sistema no está destinado a estar en un estado constante de activación intensa, y cuando lo está, se reprograma por completo.
El estudio continuó mostrando que una vez que el sistema inmunológico desarrolla esta respuesta a la comida rápida, no hay vuelta atrás. Cuando los ratones volvieron a sus dietas bajas en grasas (es decir, "dejaron la comida rápida"), sus niveles de inflamación bajaron, pero la forma en que sus células inmunes habían sido reprogramadas permaneció igual.
"Sólo recientemente se ha descubierto que el sistema inmunológico innato tiene una forma de memoria. Después de una infección, las defensas del cuerpo permanecen en una especie de estado de alarma, de modo que pueden responder más rápidamente a un nuevo ataque", dijo el profesor Dr. Eicke Latz, director del Instituto de Inmunidad de la Universidad de Bonn.
La investigación universitaria vinculó la respuesta inmunitaria inflamatoria con afecciones como la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares. "Estos cambios a largo plazo pueden estar involucrados en el desarrollo de arteriosclerosis y diabetes, enfermedades relacionadas con el consumo de la dieta occidental", se lee en el comunicado del estudio. Entonces, si bien siempre supimos que la comida rápida no era saludable, la forma en que afecta su sistema inmunológico podría hacerla aún más peligrosa de lo esperado.
Otros estudios, como el publicado en The American Journal of Clinical Nutrition, muestran una conexión entre un alto consumo de azúcar y un sistema inmunológico debilitado.
Teniendo en cuenta que la comida rápida es principalmente azúcar y carbohidratos refinados, que su cuerpo procesa como azúcar, existe el argumento de que consumir estos platos regularmente en realidad podría estar debilitando su sistema inmunológico.
La próxima vez que busque comida chatarra, tenga en cuenta que no solo está afectando su peso, sino que puede estar disminuyendo su resistencia a bacterias, virus y parásitos.