SOCIEDAD

"LA CUARENTENA ME ESTÁ AFECTANDO"

El joven que chocó contra la embajada china habría sufrido un brote psicótico

Anoche, un joven de 24 años embistió con su auto el portón de la embajada de China en Buenos Aires porque, dijo, quería hablar con el embajador. Previamente, había difundido un video en el que decía: "Se la verdad del COVID-19​. Sé que la CIA está detrás del COVID y necesito ayuda de la Embajada China". Los médicos que lo revisaron establecieron que padece "Síndrome Delirante Agudo con peligro para sí mismo y para terceros", por lo que fue internado y se le realizarán las pericias correspondientes. Días antes, le había enviado un mensaje a sus compañeros de la facultad excusándose por su actitud, y explicó: "la cuarentena nos está afectando a todos... Y bueno, a mí me afecta de otra manera".

Anoche, Gastón Sanda (24 años) manejó desde su casa de Tigre hasta Saavedra, donde pidió hablar con el embajador de China en Buenos Aires, Zou Xiaoli. Desesperado y ante la falta de respuestas, decidió acelerar y embistió contra el portón de la embajada, en Avenida Crisólogo Larralde 5349.

Adentro del vehículo había una nota con su DNI, su dirección y su número de teléfono. Ya lo había hecho en un video que publicó en redes sociales: "Se la verdad del COVID-19​. Sé que la CIA está detrás del COVID y necesito ayuda de la Embajada China, por favor viralicen".

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La nota que dejó Gastón Sarda dentro de su auto.
La nota que dejó Gastón Sarda dentro de su auto.

Cuando llegó la policía pudieron detenerlo de inmediato, ya que no opuso resistencia, y los investigadores revisaron el auto para descartar que hubiera explosivos. Así, la hipótesis del atentado habría quedado descartada. Le imputaron el delito de "intimidación pública" a cargo de la Secretaría 18 del Juzgado Federal N°9.

Según publica Clarín, ahora el joven permanece internado y a disposición de la Justicia. Los médicos que tuvieron la posibilidad de revisarlo establecieron que padece "Síndrome Delirante Agudo con peligro para sí mismo y para terceros", por lo que dispusieron si internación en una clínica privada de la Ciudad de Buenos Aires.

Allí será contenido y asistido hasta que personal del Cuerpo Médico Forense efectúe las pericias correspondientes para determinar su grado de imputabilidad.

Hace algunos días, en grupos de estudiantes de la facultad, Gastón ya había difundido un video en el que se excusaba por algunos mensajes que había enviado a sus compañeros de cursada virtual.

“Hola soy Gastón, soy alumno, como ustedes”, se presentó desde su casa de Tigre. “Quería decirles que sin querer mandé un mensaje porque en este momento, como que la cuarentena nos está afectando a todos... Y bueno, a mí me afecta de otra manera", les explicaba.

"Quería decirles que en realidad no fue nada y que estoy bien, nunca me lastimaría ni haría nada, estoy completamente perfecto. Sano físicamente y de acá arriba (señalándose la cabeza). Es algo temporal que ya va a pasar”, cerró.

Según los investigadores, habría sufrido un brote psicótico, algo que se confirmara luego de que le realicen las pericias psicológicas.

# Qué es un brote psicótico

Los especialistas lo definen como una ruptura de la realidad de forma temporal y durante este periodo de tiempo la persona que lo sufre no distingue si lo que le sucede es real o ficticio. Puede ser provocada por diversas causas, pero la más frecuente es una fuente de estrés potente y constante en el tiempo o debido a un consumo de alguna droga, principalmente todas aquellas que poseen un principio activo de tipo alucinógeno. Puede tener muchas causas orgánicas o psíquicas, como intoxicaciones o enfermedades mentales.

Antes de que la persona padezca un brote psicótico, se puede observar un patrón de comportamiento generalmente caracterizado por:

> Autolesiones:  normalmente la gente que padece de esta enfermedad usualmente golpea su cabeza.

> Hacer ruidos, acompañadas de caras extrañas.

>  Hacer daño a compañeros, amigos o incluso a veces a sus familiares.

> Descuidar la apariencia, forma de vestir, hábitos de higiene, etc.

> Aislamiento social

> Absentismo laboral / escolar

Unos días después de presentar estos comportamientos, la persona acaba padeciendo una alucinación o un delirio, con la consecuente descompensación. Es muy frecuente que la persona deba ser hospitalizada de urgencia para poder ayudarla.

Los brotes psicóticos pueden aparecer en mayor o menor grado durante la vida, pero un brote se diagnostica cuando los síntomas sean muchos más que lo normal, sucedan con más frecuencia, tengan una intensidad relevante y, en definitiva, que interfieran en la vida diaria de la persona afectada.

Durante un brote psicótico, la realidad percibida por la persona afectada se ve alterada de modo que no se puede comportar normalmente en su entorno.

El brote puede durar unos días, semanas o meses pero, con el tratamiento médico apropiado, lo normal es que la persona se estabilice y vuelva a la vida diaria. Si los síntomas y los brotes persisten, entonces la vida de la persona se puede ver afectada mucho, poco o nada dependiendo del tipo de vida que lleva y del desarrollo de la enfermedad.

Los delirios y las alucinaciones, ambos presentes en el brote psicótico, no son lo mismo ni se expresan del mismo modo. Los primeros suelen manifestarse en el trastorno delirante o paranoide, mientras que los segundos son típicos de la esquizofrenia.

Los delirios son falsas creencias. Es decir, creencias erróneas de la realidad sobre un hecho u objeto existente. Son, en otras palabras, una distorsión de un estímulo externo que está presente. Por ejemplo, cuando alguien sufre delirios puede ir caminando por un centro comercial y creer que la gente que se cruza está espiándole para luego darle la información a la policía.

Por otro lado, las alucinaciones son percepciones falsas, como oír, ver o sentir algo que en realidad no existe. Los pacientes con esta condición realmente escuchan o ven cosas, pero esos objetos o voces no están ahí realmente, son invenciones de la mente.

Cuando una persona sufre un brote psicótico necesita tratamiento inmediato. Puesto que este es un trastorno grave, el paciente suele ser ingresado para que pueda recibir el correcto tratamiento farmacológico y psicológico. La administración de fármacos antipsicóticos es necesario para estabilizar al paciente, pero el apoyo psicológico también es imprescindible.

En algunos casos (por ejemplo, el trastorno psicótico inducido por sustancias), el paciente no vuelve a sufrir brotes psicóticos en su vida. En otros casos, como la esquizofrenia, los brotes psicóticos pueden volver a aparecer con cierta frecuencia.

Es muy importante aclarar que brote psicótico y esquizofrenia no son lo mismo: la esquizofrenia es un tipo de trastorno psicótico de larga duración, mientras que un brote psicótico es una manifestación aguda que tiene una breve duración. El brote psicótico se considera un síntoma positivo de la esquizofrenia.

La nota que dejó Gastón Sarda dentro de su auto.

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