La declaración de L-Gante; La Tota Santillán condenado

Noche de fiesta, peleas y traición

Durante su declaración, L-Gante dijo que la familia del denunciante “eran de extrema confianza mía y conocidos, convertidos en familia amiga desde el momento que yo llegue al barrio”. Incluso aclaró que la esposa del hombre es una de sus seguidoras y que participó en algunos videos todavía a estrenar.

Para el músico, G.T. era “como un padre” pero que, en los últimos meses, “cada acercamiento que hizo fue para pedirme dinero, para pedirme que lo acompañe en ollas populares, para pedirme que lo acompañe a regalar golosinas, junto al intendente el día de los Reyes Magos y para hacer campaña política junto a él y sus superiores”

Sin embargo, L-Gante siempre se negó a dichas peticiones porque no quería estar vinculados con funcionarios municipales o “añadir más problemas a mi legado artístico”.

Para concluir, el joven artista de 23 años, quién se negó a responder las preguntas de la fiscalía, aseguró no tener problemas de adicciones pero admitió ser “consumidor de marihuana”.

“Me apetece para regular el estrés. Nada más que agregar, fin”

¿No todo es lo que parece?

Aparentemente, según declaró Elián, R. le contó que “G.T. la había ido a buscar para denunciarme y le dijo qué tenía qué decir: que yo tenía olor a alcohol, que estaba alterado y que tenía un arma”.

En ese momento, ante el fiscal, L-Gante habló de cómo, según él, el denunciante había cambiado los hechos para perjudicar a su persona. “Creo yo que si una persona estaba obligada... Tranquilamente tuvo la oportunidad de decirle algo a los policías, ya que habíamos frenado ahí”

“También R. me dijo que había declarado que yo amenazaba con golpear a G.T., pero que en ningún momento le había dado un golpe o algún contacto. Que eso había sido lo que querían que diga y lo que dijo. Yo no le dije nada a R., aunque por dentro no lo podía creer y volví hacia la barbería, pase la tarde ahí, con mi hija”.

Una mañana confusa para L-Gante

Cuando a la mañana siguiente el cantante se despertó a horas de la tarde, fue hasta el barrio Bicentenario y cuando pasó por la barbería de su amigo, fue cuando le llegaron los rumores de todo el conflicto que ocurría.

De acuerdo a su versión, al enterarse “de los rumores”, decidió ir a la casa de su amigo apodado “El Marihuana”. “Me encontré con M. y le dije si quería venir a dar unas vueltas conmigo. En el momento que estoy partiendo de la casa de él, R. venía caminando por la esquina hacia su casa”.

“Yo ya iba circulando, no recuerdo si estaba en moto o en auto, creo que iba en moto, si. Freno a saludar a R. y, en ese momento, le digo: ‘Qué quilombo el de ayer‘. Y ella me dice: ‘Si, G.T. me vino a buscar para ir a hacerte la denuncia y que yo de mi declaración‘."

L-Gante: “Me dijeron que no me haga drama”

Casi llegando al final de la declaración, L-Gante dijo que llegando a la estación de servicio de YPF, luego de haber hecho las paces y, supuestamente, haber aclarado todo lo que era una discusión de sus acompañantes, el artista aseguró que “me dijeron que no me haga drama, y les dije ‘bueno, los dejo acá si no hay problema’. Respondieron que no, le doy cuatro mil pesos, primero desciende G.T. Yo le doy los cuatro mil pesos a R., y vuelvo a encender el vehículo y me vuelvo a mi casa del country”

Según el músico, creyó que todo había finalizado ahí, así que volvió a su casa a dormir y aseguró que para ese momento ya eran las 9 u 8 de la mañana.

El detalle clave de la declaración de L-Gante

Mientras el artista seguía contando lo sucedido aquella noche, algo que dijo no pasó desapercibido para los investigadores del caso, en especial cuando L-Gante indicó que “bajé de Acceso Oeste en la bajada que está a la altura de la estación de servicio Puma y la fábrica de La Serenísima, de los camiones. El semáforo estaba sin funcionamiento y en el cruce del semáforo había un control policial, que estaban los conos, el patrullero y un solo personal vi yo en ese operativo”.

Gracias al recorrido mencionado, los efectivos le dieron valor a la denuncia contra el cantante ya que, la declaración de las víctimas coincidía con imágenes de cámaras de seguridad y el análisis de antenas de telefonía celular.

El recorrido en auto

Continuando con su declaración, Elián dijo que “después de partir de la casa de R., paso por mi casa donde estaban todos los patrulleros y mis amigos, hablé con la Policía. Estando G.T. y R. y un pibe que me traje del boliche que me estaba acompañando en el auto, le digo por la ventana y en forma chistosa ‘el que estaba haciendo quilombo es este’, señalando a G.T. que estaba atrás”. Con respecto a ese último comentario, el acusado aseguró que “todos se rieron”.

“Esta vez nos dirigimos al lado céntrico de Rodríguez, tomando el recorrido del paso a nivel de la zona del cementerio de General Rodríguez. Todo esto charlando. Yo notaba a R. muy presionada, porque lo sé y porque ella misma me lo hizo saber, de que estaba a favor de las palabras de G.T., por temor a que G.T. la deje sin trabajo”.

“A todo esto, charla y discusión entre ellos, llega un momento en el recorrido que tomé Ruta 6 para retomar el recorrido con dirección a Rodríguez nuevamente, pero por del lado de Acceso Oeste”

La declaración

Cuando L-Gante comenzó a relatar lo sucedido la noche del 27 de mayo pasado, dijo que en la madrugada de aquel día realizó un espectáculo en un boliche porteño. En el mismo momento, sus mejores amigos, a quien él llama “La Mafilia”, disfrutaba de la noche en la discoteca Río de General Rodríguez.

Dicho grupo tuvo una pelea en la puerta del club nocturno ya que, uno de sus amigos, se subió a su auto, avanzó sin bajar a la calle y casi atropella a una vecina de la zona de 53 años.

“Cuando digo que voy a ir para allá, me entero de que había surgido esta pelea en el boliche. Me comentaron que esta gente, G.T., sus familiares, los funcionarios municipales, R. (la mujer de 53 años) tuvieron una pelea con mis amigos”

“Hicieron un acto de vandalismo hacia un auto de un amigo mío. Esto es lo que me comentaron”.

Elián relató que llegó al lugar al mismo tiempo que los policías pero él se desvió y vio a G.T acompañado de otras personas. “Frené a la altura de su casa. Ahí se me acercaron sus hijos, su esposa y demás gente que lo acompañaba en el boliche y en la pelea que tuvieron (...) todos querían hablar a la misma vez, me querían hablar. Yo jamás bajé del auto”.

“Mi reacción ahí era ignorar a sus hijos, esposa y demás personas, yo solo quería hablar con G.T. de macho a macho, esas fueron mis palabras. A la vez, le preguntaba quién había tirado tiros en mi casa, a lo que responden que ellos no tienen armas. A todas esas palabras, una encima de la otra, G.T. se sube del lado derecho de la parte trasera del BM”.

El cantante aseguró que el denunciante se subió a su camioneta de manera voluntaria, que él jamás lo amenazó o lo obligó a nada. Ya arriba del vehículo, L-Gante le preguntó al funcionario que fue lo pasó, quienes estuvieron involucrados y porque.

“Él me dijo: ‘Vamos a lo de R’. Cuando llegamos, estaba ella y le digo a R. que si podía ascender al auto, así teníamos esta charla y yo lograr comprender cuál era el conflicto que había sucedido mientras no estaba. Que también era lo que G.T. quería lograr aclarar las cosas”.

L-Gante: Continúa detenido

El artista Elián Ángel Valenzuela, mejor conocido como L-Gante, quedó imputado por un delito contra el funcionario público Diego Gastón Torres. Se lo acusa de secuestro y amenaza con arma de fuego pero, en su declaración, admite haber estado en el auto con el hombre, pero negó todo lo demás.

L-Gante aceptó hablar en la sede de la UFI N° 9 de General Rodríguez, pero se negó a responder preguntas del fiscal Raúl Villalba. Además, tampoco quiso firmar el acta correspondiente, por lo que sólo se dedicó a contar su versión de los hechos.

Los hechos que se le imputaron

Los hechos presentados en el debate oral por el fiscal fueron por lo ocurrido hace 10 años, en 2013, cuando el conductor de TV vivía junto a su expareja y dos de sus hijas en el barrio de Belgrano.

En ese momento, según el expediente del caso, comenzó a insultar a la mujer, le arrojó sobre la cama y la amenazó con una tijera con la que le iba a sacar un ojo. El fiscal indicó que cuando la mujer pudo restablecerse para salir de la habitación, el conductor la empujó, por lo cual cayó al piso, donde "comenzó a patearla y a golpearla con un cinturón".

En el verano de ese mismo año, “La Tota Santillán” y su pareja se encontraban viajando por la ciudad de Mar del Plata cuando el humorista aceleró a toda velocidad mientras le decía: “Te voy a matar en el acantilado y nadie te va a encontrar”.

En Santiago del Estero en agosto de 2014, durante una discusión, Carías tomó del cuello a la mujer y comenzó a ahorcarla. Cuando quiso pedir ayuda, el acusado la encerró en el baño y la zamarreó, mientras le impedía gritar poniendo un puño en su boca. “¿Así que querés gritar?”

Lo qué dijo la Tota Santillán

En Nosotros a la mañana (el Trece), Santillán había expresado que era inocente al presentarse en los tribunales junto a su abogado, Juan Pablo Merlo.

“Quiero muchísimo a la mamá de las nenas. Extraño mucho a mis hijas. No las veo desde el 2019, solo las veo por Zoom. Ya sé lo que le voy a decir al juez”

Condenado pero libre, por ahora

La pena establecida por el Tribunal N°7, superó la pedida dos semanas atrás por el fiscal acusador Oscar Ciruzzi, quién había requerido cuatro años y seis meses, según confirmó la agencia Noticias Argentinas.

Por el momento, Santillán seguirá libre mientras la condena en su contra no sea confirmada por la Cámara Criminal y Correccional. El juez Alejandro Achával, consideró responsable a “La Tota Santillán” de los delitos de amenazas agravadas por el uso de armas, privación ilegítima de la libertad agravada por ser cónyuge y lesiones leves agravadas por haberse cometido en el marco de la pareja, en el marco de violencia de género.

La Tota Santillán: Condenado a prisión

El conductor televisivo y productor musical Ricardo Daniel Carias, conocido como "la Tota Santillán", fue encontrado culpable de hechos de violencia contra su ex pareja y madre de dos de sus hijas.

Fue condenado a cinco años y medio de prisión por golpear y amenazar de muerte a su ex esposa. Además, es encontrado por intimidaciones a una empleada y a su ex suegro.

Masacre de Monte 2019

La Masacre de Monte es conocida con ese nombre debido a que ocurrió en la localidad bonaerense de San Miguel del Monte. Fue el 20 de mayo de 2019, cuando cinco jóvenes, cuatro de ellos menores de edad, viajaban en un Fiat 147 por las afueras del pueblo fueron víctimas de una persecución policial injustificada que incluyó disparos por parte de los oficiales.

El seguimiento terminó cuando las víctimas chocaron y murieron cuatro de ellos. Según los testigos, los policías "estaban en posición de tiro" y tuvieron "intención de rematar" luego de producirse el impacto del vehículo contra un camión.

La pena de los policías

Rubén García y Leonardo Ecilape recibieron la pena máxima, cadena perpetúa. Mientras que, los efectivos Manuel Monreal y Mariano Ibáñez fueron sentenciados a 15 años de cárcel.

García y Ecilape fueron condenados por el delito de "homicidio agravado por abuso de función como miembro de las fuerzas policiales calificado por el empleo de armas de fuego" y "violación de los deberes de funcionario público".

Por otro lado, Monreal e Ibañez, fueron sentenciados por "tentativa de homicidio agravado por el abuso de la función policial y por ser cometido mediante el empleo de arma de fuego" de las mismas víctimas.

Masacre de Monte: Se conoce la condena

La jueza del Tribunal Oral en lo Criminal N° 4 de La Plata dictaminó las sentencias para Rubén Alberto García, Leandro Ecilape, Manuel Monreal y Mariano Ibáñez, por las muertes de Aníbal Suárez, Danilo Sansone, Camila López y Gonzalo Domínguez en mayo de 2019.

El veredicto de culpabilidad se leyó el 17 de mayo, cuando se los sentenció a los acusados por el delito de “homicidio agravado por el abuso de la función o cargo policial, y por ser cometido mediante arma de fuego”, y tentativa de homicidio para el caso de Rocío Quagliariello, la única sobreviviente.