ECONOMÍA

REESTRUCTURACIÓN

Las fechas del Gobierno para lanzar la propuesta para la deuda con apoyo político

Según lo estipulado, en 15 días el Gobierno presentará lineamientos generales y en marzo, llegará la oferta final. Los tiempos son cortos, pero confían en que el apoyo será amplio. Planean recolectar el apoyo del Congreso y del Fondo Monetario Internacional antes de presentar su plan económico integral y la propuesta formal de canje para los bonistas. "El cronograma es ajustado. Pero la resolución de la deuda es una condición necesaria para que la economía se estabilice", sentenció un analista.

El Gobierno le realizará una oferta a los acreedores en la segunda semana de marzo. Antes, del 12 al 14 de febrero, recibirá a la misión del FMI. Así se desprende del cronograma diseñado por el Ministerio de Economía para la reestructuración de la deuda, que confirma que la última semana de marzo es el plazo límite para "la aceptación" de la propuesta.

En la agenda, se informa sobre la reunión del miércoles entre Martín Guzmán y Kristalina Georgieva, en Roma. También la próxima semana, el Senado discutirá el proyecto de ley de Sostenibilidad y se invitará a los agentes de información, asesores financieros y bancos colocadores a presentar ofertas de asesoramiento respecto del proceso de renegociación. 

En resumen, son 3 pasos para la semana próxima:  
- la invitación a los intermediarios entre los acreedores externos y el Estado Nacional para el canje a presentar sus ofertas; 
- la reunión entre Guzmán y la directora gerente del Fondo en el Vaticano; y 
- el tratamiento en el Senado de la iniciativa.

Con el aval del Congreso abrochado, llegará la misión del FMI, que estará en Buenos Aires del 12 al 14 de febrero, para auditar el estado de la economía y "escuchar los planes del Gobierno para el futuro", tal como dijo ayer el vocero del organismo, Gerry Rice.

En esa segunda semana de febrero también, el ministro de Economía presentará los lineamientos del Análisis de Sostenibilidad de la deuda pública en el Congreso.

Será el primer paso formal en la presentación de la propuesta oficial, en el que adelantará los primeros detalles del programa económico, proyecciones de crecimiento, déficit fiscal y disponibilidad de divisas, entre otras cosas. Es que, justamente, la estrategia oficial es que ese plan cuente con el aval del Fondo para sentarse ante los acreedores privados con mayor respaldo. A partir de allí, se iniciará un período de diez días de reuniones e intercambio al respecto con los bonistas y a fin de mes se elaborará un informe sobre los comentarios de los tenedores.

"Vemos positivo del anuncio que el Gobierno esté buscando el apoyo del Congreso y el FMI antes de discutir una potencial oferta con los tenedores de bonos, con el objetivo de mostrar mayor soporte político a la oferta de deuda y credibilidad al programa económico", plantearon desde la consultora 'Balanz'.

La primera semana de marzo, en tanto, se determinará "la estructura final de la oferta". El documento ratifica que, después de que se conozca la propuesta a los tenedores de bonos (en la segunda semana de ese mes), se realizarán reuniones informativas -road show- durante 15 días.

Al final del mes, expirará el período de aceptación de la oferta. El Gobierno necesita, para avanzar en la reestructuración de la deuda con jurisdicción extranjera, el aval del 75% de los tenedores de bonos con una sola serie. Para los que tienen más de una serie, precisa el acuerdo del 85% del total con un mínimo de dos tercios de cada una, en el caso de los títulos emitidos en el canje 2005; y dos tercios del total con un mínimo del 50% de cada una, en los que se colocaron de ahí en adelante.

"Nuestra primera impresión es que el anuncio es algo optimista, con solo un mes y medio entre los primeros lineamientos del plan económico y la fecha límite para aceptar la oferta, incluyendo diez días de reuniones informales y dos semanas de negociaciones formales con los tenedores de los bonos para determinar la oferta", analizó Balanz.

Según LCG, se deben reestructurar US$218.600 millones, de los cuales US$67.000 millones son títulos bajo ley extranjera.

Sin cláusulas de acción colectiva que estipulen un piso de aceptación, se espera que la oferta que reciban los tenedores de bonos con ley local dependa del resultado de la propuesta para los acreedores externos.

El foco de los analistas se posó en el poco tiempo disponible para alcanzar esas voluntades. "Será apretado el cronograma para renegociar la deuda, la clave estará en que la propuesta a presentar por el gobierno este previamente consensuada con los acreedores", planteó el economista Christian Buteler. 

Por su parte, Juan Ignacio Paolicchi, de 'Eco Go', sentenció: "El cronograma es ajustado. Pero la resolución de la deuda es una condición necesaria para que la economía se estabilice".

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