No son reconocidos por Moscú. Pero a esta altura del partido ya nadie duda que el Grupo Wagner responde a los intereses del país presidido por Vladímir Putin. Investigaciones llevadas a cabo recientemente, sacan a la luz que este grupo de mercenarios llevan combatiendo en territorios donde las fuerzas armadas rusas no pueden meterse hace ya más de 5 años.
RESPONDEN A LOS INTERESES RUSOS
El grupo Wagner, mercenarios que luchan para Putin
Este misterioso cuerpo paramilitar actúa como brazo de apoyo en conflictos donde Rusia está comprometida o involucrada. Están presentes principalmente en Ucrania y Siria, pero cuenta también con soldados en Venezuela. Pese a las presiones, el gobierno de Vladímir Putin jamás ha reconocido la existencia de estos soldados secretos.
¿Quienes son?. Paramilitares de origen principalmente ruso miembros de una compañía creada por el ucraniano Dmitriy Valeryevich Utkin. Este hombre fue teniente coronel y comandante de brigada de una unidad de las fuerzas especiales de la Dirección Principal de Inteligencia de Rusia hasta 2013. Ese mismo año se sumó a la empresa a Moran Security Group creada por militares retirados rusos para combatir la ciber-piratería. Al poco tiempo encabezó el "Cuerpo Eslavo" para proteger los campos petrolíferos y los oleoductos en Siria.
Luego de meses allí, la mencionada organización entró en debacle a partir de la derrota en ese país a manos de grupos rebeldes sirios que culminó con la muerte de numerosos miembros. Pese a ello, en 2014 Utkin resurgió junto otros sobrevivientes en la región de Luhansk, en Ucrania, durante el avance ruso para anexarse Crimea, y allí se habría llevado adelante la primera campaña del Grupo Wagner. El nombre de la compañía proviene del fanatismo del militar por el Tercer Reich: Utkin eligió el nombre del grupo en homenaje al compositor preferido de Hitler.
No obstante, quien ahora está a cargo de la organización es Yevgeni Prigozhin, un oligarca muy cercano al presidente ruso, Vladimir Putin.
Desde 2014 hasta ésta parte el grupo ha participado en distintos focos de conflicto. La guerras en Ucrania, Siria y Libia los mantienen ocupados por estos momentos
En Ucrania , intervino en 2014 ayudando a los separatistas prorrusos, lo que generó una ola de acusaciones encabezadas por Ucrania, los Estados Unidos y sanciones por parte de la Unión Europea.
Pero fue por su campaña en Siria que tomaron repercusión mundial. Mientras luchaban en Deir ez-Zor, un ataque aéreo de la coalición internacional que lidera Estados Unidos provocó la muerte de decenas de militares rusos.
"Hemos confirmado que al menos cuatro ciudadanos rusos murieron el pasado 7 de febrero de 2018 en la provincia siria de Deir al Zur", dijo al medio EFE Ruslán Levíev, director del Conflict Intelligence Team (CIT), un grupo que investiga desde 2014 todo lo relacionado al accionar militar ruso que el gobierno no cuenta.
"Nos siguen llegando nuevos nombres de contratistas rusos muertos en ese bombardeo, y creemos que cuando se confirme, estaremos hablando de una treintena de mercenarios rusos muertos en ese bombardeo", completó Levíev.
Hasta ese entonces las actividades del grupo Wagner estaban ocultas, pero luego Rusia debió responder ante el pedido de investigación que exigió el opositor Grigori Yavlinski, candidato a la presidencia de Rusia en los comicios de Febrero, con respecto a las muertes de sus compatriotas.
Desde el Kremlin salieron a decir que "no había militares rusos en la zona del bombardeo y que los milicianos pro-Al Assad actuaban por su propia cuenta".
Lo cierto es que hay evidencia documental de la existencia del grupo Wagner a partir de documentos firmados por el propio presidente Vladimir Putin.
Los luchadores Wagner recibieron medallas por valentía y coraje, algunos a título póstumo, por sus acciones tanto en Ucrania como en Siria.
Ahora están luchando en Libia en apoyo al general libio Jalifa Hafter que busca tomar la capital desde el mes de abril y desplazar al gobierno actual. El Ejecutivo libio, respaldado por la ONU, ya denunció a Moscú de usar paramilitares para extender su influencia sobre el país, productor estratégico de petróleo.
Todo esto se da en un contexto en el que Rusia cuenta aún con presencia militar en Siria y está tratando de expandir su injerencia en África.
Asimismo, también estarían recientes en Venezuela para para “defender a Nicolás Maduro” en medio de la creciente presión internacional.
Con respecto a su accionar, cuentan con un centro de entrenamiento en el sur de Rusia y operan bajo el control de los servicios de seguridad y militares rusos. "Sin una señal del Kremlin, no se mueven", señaló para el medio Euronews el analista y editor de un reconocido diario ruso Pavel Felgenhauer.
Pueden ganar 150.000 rublos (más de 2.000 euros) al mes, aunque de comprometerse por tres o 6 meses sus salarios ascenderían al doble. Un comandante también puede ganar el triple. En caso de muerte, una familia recibe menos de 50.000 euros, un monto nada despreciable para los rusos.
La última novedad tiene que ver con el descubrimiento de una clínica privada en San Petersburgo, en la cual asisten a los heridos de guerra, cuyos directivos son familiares y amigos del presidente Vladimir Putin.