Se calienta la pelea por el futuro de la CGT

Pero el contraataque del moyanismo no tardó en llegar. El jefe del sindicato de Dragado y Balizamiento, Juan Carlos Schmid, fue el primero en responder:

 

"Cuando uno no puede mejorar el silencio, lo mejor que puede hacer es callarse la boca. Será el congreso de la CGT el que decidirá. Por un lado están las declaraciones altisonantes de Barrionuevo y por el otro la conducta intachable de Moyano", arremetió Schmid en declaraciones a radio La Red.

 

Ayer, tras resaltar la "falta de diálogo" entre Moyano y el Gobierno, Barrionuevo planteó que el jefe de la CGT debería convocar a un paro y lanzó: "Termina su ciclo en junio. Junio es la fecha de vencimiento de Hugo". A mitad de año, efectivamente, vence el mandato del camionero al frente de la central obrera.

 

Ayer, desde el kirchnerismo, la primera réplica a los dichos del gastonómico había corrido por cuenta de Aníbal Fernández. "Hacerse cargo de los dichos de un bocón como Barrionuevo, no me haga perder tiempo en semejante cosa", dijo el ex jefe de Gabinete.

 

Pese a la dura crítica a Barrionuevo, Schmid admitió que el vínculo con la Casa Rosada "está atravesando un momento difícil" y cuestionó que el Gobierno haya relegado a la CGT. "Los pedidos se han hecho por medio de notas. Si el Gobierno se sentó con la Mesa de Enlace, con la Iglesia, con Techint, no entiendo porqué no puede hacerse una reunión", comparó.

 

En la misma línea, añadió que "la relación se ha tensado" y atribuyó la distancia a que los de Moyano y Cristina Kirchner son "dos liderazgos fuertes".

 

Por otra parte, Schimid ratificó que la CGT no aceptará el 18 por ciento como tope para negociar salarios, aunque intentó mostrarse conciliador.

 

"No escuché a nadie del Gobierno ni de la cartera económica que haya dicho 18%. Pero si alguien lo dice, las paritarias dejan de ser libres", advirtió. Sin embargo, enseguida matizó: "Alrededor de todo esto siempre ha habido un comportamiento de madurez del sindicalismo argentino. El diálogo ha funcionado a pleno".

 

Por último, Schmid negó que la convocatoria a un paro nacional esté siendo evaluada por la CGT, aunque deslizó una advertencia. "No veo en el horizonte esa situación, aunque lo que ocurre en las provincias, los sueldos estatales, la ley antiterrorista, son señales preocupantes".

 

No obstante, concluyó: "No veo que se agite una situación de protesta contra el gobierno nacional".