Juan José Paso nació Juan José Esteban del Passo, hijo del panadero gallego, Domingo del Passo, de Puebla de Bugallido, Negreira, La Coruña, que en Buenos Aires pudo atesorar una modesta fortuna. Sus hijos estudiaron en el colegio Monserrat, de Córdoba. Allí Juan José Paso conoció a Juan José Castelli, se doctoró en Leyes por la Universidad de Córdoba, y enseñó Filosofía.
09/07, GENTE DE LA INDEPENDENCIA (5)
Paso, 1er. ministro de Economía, el que leyó la proclama
Juan José Paso fue el integrante de la Revolución de Mayo que más tiempo continuó en la escena política de las Provincias Unidas. Y estuvo en Tucumán.
09 de julio de 2021 - 08:00
Juan José Paso tuvo un papel destacado en el Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810.
Pintura de la Primera Junta: en el centro Cornelio Saavedra, entre Manuel Belgrano y Mariano Moreno, por detrás suyo Juan José Paso.
Luego él regresó a Buenos Aires y ya no sólo fue profesor de Filosofía en el Real Colegio de San Carlos y sino agente fiscal de la Real Hacienda. De paso, él fue uno de los fundadores del pueblo San José de Flores, hoy barrio de Flores, en Buenos Aires.
Más tarde él intentó un negocio vinculado a la explotación de oro en Lima, capital del Virreynato del Perú, y no estuvo durante las invasiones inglesas, evento que sí encontró activos a sus hermanos Vicente José, Francisco e Ildefonso.
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Lo de Lima no funcionó y Juan José regresó a Buenos Aires, se reencontró con Castelli, quien le llevó a Manuel Belgrano. Los 3 fueron partidarios del carlotismo: la coronación de la princesa Carlota Joaquina de Borbón, hermana del rey Fernando VII y esposa del rey Juan VI de Portugal (y Brasil).
En ese contexto, Paso pidió la remoción del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros, cuando participó del Cabildo Abierto del 22/05/1810, enfrentando al fiscal Manuel Genaro Villota, quien argumentaba que el Cabildo de Buenos Aires debía esperar el pronunciamiento de los otros Cabildos del Virreynato.
En cambio Paso enunció la teoría llamada 'hermana mayor': Buenos Aires removía al virrey y convocaba a representantes de los otros Cabildos del virreinato.
La propuesta de Paso obtuvo 20 votos, que sumados a las de Juan Nepomuceno Solá, Pascual Ruiz Huidobro, Cornelio Saavedra y J. J. Castelli reunieron 155 votos a favor de destituir al virrey contra 69 que respaldaban su permanencia.
El 25/05/1810, Paso fue nombrado secretario de hacienda de la Primera Junta. Es decir que Paso fue el primer ministro de Economía de las Provincias Unidas.
Paso hizo equipo con Mariano Moreno, el otro secretario de la Junta.
También cruzó a Montevideo a explicar lo que había sucedido pero fue expulsado, comunicándole a la Junta por su intermedio, que Montevideo estaba en contra "hasta tanto (Buenos Aires) reconozca la soberanía del Consejo de Regencia que ha jurado este pueblo obedecer".
Político avezado
Paso y Moreno se opusieron a la incorporación de los diputados del interior a la Junta. Complicado de explicar porque Paso había propuesto remover al virrey y convocar a representantes de los otros Cabildos del virreinato.
Moreno perdió el debate y, de inmediato, Paso respaldó a Cornelio Saavedra y Domingo Matheu. Los 3 fueron los únicos miembros de la Primera Junta que permanecieron en la Junta Grande después de la Revolución del 5 y 6 de abril de 1811.
En septiembre de 1811 firmó en Montevideo el muy polémico armisticio con el virrey Francisco Javier de Elío: la Banda Oriental quedó para el gobierno de Montevideo.
Se atribuye a Paso parte de la organización de los desórdenes de fines de 1811, que provocaron que el Cabildo reemplazara a la Junta Grande por un Triunvirato que integró Paso, Feliciano Chiclana y Manuel de Sarratea y Juan José Paso.
Una de las acciones de aquel Triunvirato fue la expulsión de Buenos Aires de los restos de la Junta Grande. Otra fue otorgar poder a uno de sus secretarios, Bernardino Rivadavia, a quien se le atribuyeron modos autoritarios pero escasa capacidad de ejecución.
Luego, Paso chocó con Chiclana, y ambos renunciaron en abril de 1812 pero a Chiclana no le aceptaron la renuncia y a Paso sí.
Entonces, dicen, Paso comenzó a 'controlar la calle', erosionando al ex Triunvirato.
Rivadavia se había opuesto a que Manuel Belgrano presentara batalla en Tucumán. La victoria del Ejército del Norte fue el evento que necesitaban Paso y la Logia Lautaro para declarar su rebeldía.
En el siguiente acto, 3 regimientos, dirigidos por José de San Martín, ocuparon el centro de la ciudad y forzaron la renuncia de Sarratea y Chiclana.
Entonces hubo un 2do. Triunvirato: Paso, Antonio Álvarez Jonte y Nicolás Rodríguez Peña... dominados por la Logia Lautaro.
Pero reforzaron el Alto Perú y la presión sobre Montevideo, además de convocar la Asamblea General Constituyente del Año XIII... que también dominó la Logia Lautaro, que fue un desastre en la gestión de todo.
En abril de 1813, Paso fue quitado del Triunvirato pero ya llegaba la época del Director Supremo.
Paso fue enviado en misión diplomática a Chile para buscar a Cornelio de Saavedra de quien se sospechaba que estuviera conspirando.
En 1815 participó del derrocamiento de Carlos María de Alvear, fue designado Auditor General de Guerra del Ejército y luego segundo Asesor General de Gobierno de la Provincia de Tucumán.
Al año siguiente, Paso fue diputado por Buenos Aires y secretario del Congreso de Tucumán. Por lo tanto, él fue quien leyó el Acta de la Independencia aquel 09/07/1816.
Paso fue un defensor, tal como San Martín, Belgrano y Martín Miguel de Güemes, de la monarquía constitucional, que no prosperó.
Tucumán
San Miguel de Tucumán fue elegida sede del Congreso porque estaba ubicada en el centro del territorio del ex Virreinato y porque las provincias se negaban a concurrir a Buenos Aires.
Fray Cayetano Rodríguez le explicó a un amigo: “Ahora encuentras mil escollos para que el Congreso sea en Tucumán. ¿Y dónde quieres que sea? ¿En Buenos Aires? ¿No sabes que todos se excusan de venir a un pueblo a quien miran como opresor de sus derechos y que aspira a subyugarlos? ¿No sabes que aquí las bayonetas imponen la ley y aterran hasta los pensamientos? ¿No sabes que el nombre porteño está odiado en las Provincias Unidas o desunidas del Río de la Plata?”
San Miguel de Tucumán era una pequeña localidad de 12 manzanas, dominadas por las torres de sus 4 iglesias y del Cabildo.
La vida era tranquila pero al mediodía, la plaza se poblaba de carretas, vendedores ambulantes y gente que iba y venía entre las pulperías y las tiendas.
Por las noches había tertulias como en Buenos Aires, pero desde las 22:00 regía el toque de queda: era zona de guerra y había que refugiarse en las casas.
Los primeros en llegar a Tucumán fueron los diputados porteños y los cuyanos. Los restantes se fueron sumando luego, hasta que el 24/03/1816 se inauguraron las sesiones del Congreso con la presidencia de Pedro Medrano, quien le habia confesado a un amigo: "¿No le parece a usted como a mí, que tal comisión de arengar en la apertura del Congreso es bastante peliaguda? ¡Perra! Pues bien que he dado vueltas para encontrar qué decir, y todavía no lo hallo".
Se resolvió que la presidencia sería rotativa y mensual, y se designaron 2 secretarios: Juan José Paso y José Mariano Serrano.
El Congreso sesionó en la típica casa colonial de Francisca Bazán de Laguna, "la mejor productora de empanadas de todo el Tucumán", ubicada en la Calle del Rey N° 151.
La primera cuestión fue el reemplazo del renunciante director supremo Ignacio Álvarez Thomas. Fue elegido para el cargo el diputado por San Luis, coronel mayor Juan Martín de Pueyrredón.
Medrano opinó asi de Pueyrredón: "Hay hombres más virtuosos, pero no tan políticos. Los hay más sabios, pero no tan discretos. Los habrá más santos, pero no tan vivos y perspicaces. Juan Martín tiene de aquellas virtudes las que se necesitan y tiene sobre todos los virtuosos la política, la perspicacia, la destreza, y lo que vale más que todo, la opinión".
Pueyrredón viajó de inmediato a Salta para confirmar a Güemes como comandante de la frontera norte tras la derrota de Rondeau en Sipe-Sipe.
Fue evidente, a medida que avanzaban las sesiones, que existían importantes diferencias en cuanto al proyecto de país que pensaban los diputados porteños, los del Interior y los altoperuanos.
Sin embargo, había un importante y muy tardío punto de acuerdo posible: estaban dadas las condiciones para la Declaración de la Independencia.
9 de Julio
La presión de influyentes dirigentes nacionales —entre ellos el general José de San Martín, gobernador de la Intendencia de Cuyo— forzó el inicio de la demorada discusión sobre la Declaración de Independencia.
La votación se concretó el 9 de julio, cuando presidía Francisco Narciso de Laprida, de la Provincia de San Juan.
Aquel martes, el secretario Paso leyó la propuesta de Independencia que fue seguida de la aclamación de todos los diputados. No hubo votación, todos de pie, entre vítores y aplausos, dijeron que sí, que querían que "las Provincias Unidas fuesen una nación libre e independiente de los reyes de España y su Metrópoli".
Luego, cada uno de los diputados confirmó su voto en forma individual, y se redactó el Acta de la Declaración de la independencia.
Ningún país reconoció en ese momento la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
10 días después, el diputado Medrano propuso completar la Declaración con un agregado que se aceptó: “(que) l as Provincias Unidas fuesen una nación libre e independiente del rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli, y toda otra dominación extranjera...".
Esto reflejó otros debates que persistían.
El 21/07/1816 fue jurada en la sala de sesiones por los miembros del Congreso, ante la presencia del gobernador, de Manuel Belgrano, el clero, los integrantes de las órdenes religiosas y demás corporaciones.
Sin embargo, luego de la Declaración de la Independencia fue evidente que no habría acuerdo en cuanto a la forma de gobierno ni la organización territorial.
Personaje permanente
Trasladado el Congreso desde Tucumán a Buenos Aires, él participó en la redacción del Estatuto Provisional de Gobierno de 1817 y de la Constitución unitaria de 1819.
En Buenos Aires fue sancionada la Constitución de las Provincias Unidas de Sud-América en abril de 1819.
La comisión redactora estuvo integrada por el presbítero Antonio Sáenz, Teodoro Sánchez de Bustamante, Diego Estanislao Zabaleta, Mariano Serrano y Juan José Paso.
Grave error de los 5 redactores: un texto de carácter centralista que enfrentó al poder porteño con los caudillos del Litoral, origen de la Batalla de Cepeda (01/02/1820) en la cual el Directorio fue derrotado.
Paso y sus colegas desperdiciaron 3 décadas hasta que se aprobó un texto constitucional, también con una historia oscura pero, en definitiva, el que llegó, con algunos cambios, hasta 2021.
Más adelante, Paso fue asesor del Director Supremo, José Rondeau, y rescató al almirante Guillermo Brown al aconsejar a Rondeau que lo perdonara, durante un juicio por deserción.
Paso siguió en escena, ya sea preso por Manuel de Sarratea, su adversario político desde el 1er. Triunvirato, o bien diputado provincial en Buenos Aires entre 1822 y 1824, presidente del cuerpo legislativo, y redactor de las leyes del Banco de Descuentos, promoción de la imprenta y organización del Ejército Nacional.
También fue diputado por Buenos Aires al Congreso de 1824 apoyando la nominación de Rivadavia como 1er. Presidente de las Provincias Unidas del Río de la Plata, votó la Constitución de 1826, apoyó el breve gobierno de Manuel Dorrego y fue asesor de Juan Manuel de Rosas.
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