CONSPIRACIONES

¿QUIÉN FILTRÓ LA INFORMACIÓN?

Inédita crisis USA / Reino Unido, justo cuando había que accionar contra Irán

Donald Trump contaba, tal como ocurre siempre en USA, que el Reino Unido acompañara como fiel escudero las iniciativas de Washington DC. El antiguo imperio se comporta como colonia, ya se sabe. La idea era externalizar el bloqueo naval a Irán y hacer que los aliados abordaran los buques-petroleros en las vías fluviales. Pero ahora está todo mal entre USA y el Reino Unido, ante la difusión de correspondencia secreta del embajador británico. Y todos quieren saber quién fue el autor de la filtración. Obviamente apuntan a Rusia, sin pruebas. En cualquier caso, brillante operación de inteligencia.

Justo cuando USA intentaba formar una "coalición" que "asegure la libertad de navegación tanto en el Estrecho de Hormuz como en Bab al-Mandeb", tal como dijo el jefe del Estado Mayor Conjunto estadounidense, general Joseph Dunford (las vías fluviales que conectan el Golfo Pérsico con el Golfo de Omán y el Mar Rojo con el Golfo de Adén, respectivamente), voló por los aires la posibilidad de que el Reino Unido y USA sean socios en el empeño bélico.

Irán siempre denunció que los ataques no identificados tanto en el Golfo de Omán como en el Ormuz apuntaban a militarizar la zona.

Dunford anunció que USA ya estaba en contacto con "varios países" para ver cuáles "tienen la voluntad política" de apoyar el proyecto.

En verdad, USA no debería esforzarse al respecto: aunque Dunford no lo entienda, resultaría sencillo obtener de la ONU una aprobación para asegurar las vías navegables tal como ocurrió en su momento con Somalía, durante la epidemia de piratas. Sería una coalición legal, y no ilegal tal la que armó USA en 2003 para la invasión a Irak.

Pero USA busca otro camino, quizás porque no esperaba la crisis en el vínculo político-diplomático con su aliado, el Reino Unido.

El secretario de Relaciones Exteriores británico, Jeremy Hunt, ha confirmado al diario londinense The Sun que se está investigando si los informes del ahora ex embajador británico en Washington DC, Kim Darroch, en los cuales criticó a la Administración Trump, fueron filtrados deliberadamente por un "Estado hostil".

Darroch aparece en el centro de un gran escándalo político al difundirse el contenido de los cables diplomáticos en los que califica a Donald Trump de "inepto", "disfuncional" e "incompetente". 

Trump, por su parte, anunció que su país "ya no tratará más" con el embajador británico y lo llamó "un tipo muy estúpido".

Es decir que Trump exigió a Londres que cambie el embajador en Washington DC. Y Darroch renunció de inmediato.

Pero, aún cuando el Reino Unido lo concrete con celeridad, el asunto luce terrible para el prestigio del Presidente estadounidense, expone la hipocresía de los ingleses respecto de Trump y demuestra un 'vacío de seguridad' en una de las cabeceras de la Organización del Tratado del Atlantico Norte.

No faltan quienes afirmen que fue una devolución de Rusia a las actividades británicos que intentaron involucrar a Putin en un supuesto envenenamiento de un disidente ruso residente en el Reino Unido, algo que Moscú siempre negó.

Las autoridades británicas consideran un ataque cibernético como eje de la investigación oficial sobre las filtraciones de los informes de Darroch.

"Por supuesto, sería muy preocupante si se tratara de un Estado extranjero hostil. No he visto ninguna evidencia de que ese sea el caso, pero tomaremos la investigación de la fuga muy en serio. Se van a seguir todas los canales de investigación para tratar de entender cómo sucedió esto", señaló Hunt.

Aunque el canciller británico no mencionó a Rusia por su nombre, el Reino Unido ha apuntado repetidamente al Kremlin como presunto responsable de ciberataques e interferencia electoral, acusaciones que han sido siempre rechazadas por Moscú.

Los principales tabloides británicos, como The Sun, The Daily Mail y The Mirror, no tardaron en sugerir que bajo el término "Estado hostil", el secretario de Relaciones Exteriores ponía las miradas en Rusia.

Asimismo, The Sun indicó que "Irán y China, que también tienen poderosas capacidades cibernéticas, también están bajo sospecha, bajo la teoría de que un intermediario fue usado para pasar" los cables diplomáticos a los medios.

Una fuente del diario en el Gobierno británico sugirió que el culpable de la fuga de los informes podría ser alguien con intención de dañar las relaciones entre Londres y Washington.

"Una gran pregunta que nos hacemos ahora es ¿quién sería el mayor ganador con la filtración? Sin duda, la respuesta es un Estado hostil que quiere causar división, porque ha tenido éxito", destacó la fuente.

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