Córdoba suma enemigos en la guerra contra las "apps" de transporte

El antecedente inmediato del conflicto entre Córdoba y las “apps” es el caso de Uber, plataforma estadounidense que intentó numerosos desembarcos en la segunda ciudad más poblada del país, pero se encontró con trabas. En medio de una compulsa judicial, la reconocida plataforma fue objeto de sanciones.

Para la Municipalidad de Córdoba, las empresas virtuales exceden los permisos establecidos por ordenanzas locales. Cabe recordar que en Córdoba es el municipio el encargado de expedir las licencias de transporte particular, mejor conocidas como las “chapas” de taxis y remis, que son repartidas mediante sorteos en cupos limitados y con altos costos.

Precisamente, uno de los factores para la aplicación de la política “anti apps” en Córdoba fue la presión de los gremios de taxistas y remiseros locales, que sostienen reclamos constantes y una virtual cacería de conductores presuntamente ilegales.

DiDi

La app DiDi llega a Córdoba.

Córdoba multa a las apps

Al menos para el caso de Uber, la Municipalidad de Córdoba estableció severas sanciones desde la gestión como intendente de Martín Llaryora y ahora bajo el mando de Daniel Passerini. El principal objetivo para disuadir el funcionamiento de la plataforma fueron las multas directas a los conductores, que deben pagar cifras millonarias para recuperar los vehículos que son incautados si se los detecta prestando servicio.

Para la compañía china DiDi, con presencia en más de 15 países, la realidad no sería diferente. Tanto en su servicio de autos como también de motos, los conductores serían objeto de sanción, aunque la empresa anticipó que “aguantará” las multas a sus choferes.