COPA CIUDAD DE MENDOZA

Godoy Cruz le ganó (3-2) a San Lorenzo (que sigue sin ganar en 2012)

Godoy Cruz derrotó por 3-2 a San Lorenzo y se quedó con la Copa Ciudad de Mendoza tras el 1-0 que había conseguido frente a San Martín de San Juan. En cambio, el equipo de Leonardo Madelón quedó sumido más profundamente en un mar de dudas.

 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) Festejo y pura ilusión en Mendoza. Godoy Cruz se muestra firme y asentado como equipo, transmite optimismo de cara a la doble competencia (Torneo Clausura y Copa Libertadores) y anoche mostró sus credenciales para ganar por 3-2 y asegurarse la Copa Ciudad de Mendoza. Otra derrota más para San Lorenzo, que no le encuentra la vuelta a sus carencias futbolísticas y preocupa de cara a este complicado semestre.
 
Movimientos aletargados e imprecisos dominaron los primeros momentos del partido. Con San Lorenzo queriendo dominar las acciones, pero sin demasiadas virtudes como para conseguirlo. 
 
Y con el equipo local apostando solamente a los pelotazos para Castillón, activo y rápido delantero. Ninguno se destacaba, ninguno rompía el molde. Y los tiros a los arcos se producían desde posiciones lejanas. 
 
Pero pasada la media hora de juego, ambos conjuntos se despabilaron; entendieron que el espectáculo que estaban brindando era muy pobre y que tenían que ser más picantes. 
 
Es cierto que las fallas defensivas ayudaron, pero en los últimos once minutos se marcaron cuatro goles. ¿Cómo? Sí, cuatro. Fue Godoy Cruz el primero que acertó: a los 35, Ramírez, uno de los más codiciados del verano, amortiguó con el pecho un centro de Rojas y, sin dejar picar la pelota, fusiló a Migliore. 
 
A los 39, San Lorenzo reaccionó: el uruguayo Bueno -productivo refuerzo- dejó a Ibáñez sin reacción con un cabezazo fortísimo luego de una lucida jugada de Kalinski. Madelón, el DT azulgrana, todavía no se había calmado cuando volvió a sentir palpitaciones: 
 
Migliore se esforzó por desviar un potente tiro libre de Cabrera, pero no pudo hacer nada a los 44, cuando el zurdo Rojas se llevó la pelota con la cabeza y definió ante la salida del ex arquero de Boca. Los mendocinos volvían a sonreír. Pero en el primer minuto del descuento, Bueno recibió de espaldas, giró, habilitó a Bazán y éste cruzó un zurdazo que superó el esfuerzo de Ibáñez.
 
Al descanso se fueron 2-2 tras una ráfaga de goles y dejaron una buena imagen desde el punto de vista del espectador. 
 
En el complemento primó el poderío colectivo de los de Nery Pumpido por sobre las individualidades y la voluntad azulgranas. Y ya a los seis minutos, Cabrera apareció por izquierda, su tiro pegó en el primer palo, pudo mandar el centro y por el medio Tito Ramírez sólo tuvo que empujar el balón para el tercero.
 
Castillón, desde afuera, pudo haber aumentado, y en la respuesta de los de Boedo Leonardo Sigali casi la mete en contra. Después, el ingresado Leandro Caruso casi consigue el cuarto con un tiro cruzado y desviado, y por último el local consiguió dominar sin demasiados gastos ni sobresaltos y se aprovechó de la creciente impotencia visitante.
 
Al final, toda la alegría y la esperanza para lo que vendrá quedó en Mendoza, mientras San Lorenzo sabe que deberá potenciar las virtudes que hoy lo llevaron a reaccionar dos veces y disminuir las equivocaciones que lo hicieron perder sus últimos encuentros.