La realidad de Villa Gesell ha cambiado drásticamente. Lo que alguna vez fue un imán para el turismo joven, con boliches y calles llenas de grupos de amigos, hoy muestra un rostro más sereno. Las familias ahora dominan las playas y el centro, reflejando un cambio profundo en la identidad del destino.
CAMBIOS DRÁSTICOS
Villa Gesell sin jóvenes: Por qué le gana Mar del Plata
Con una vida nocturna casi inexistente y restricciones que desalientan al público joven, Villa Gesell redefine su identidad frente al turismo.
20 de enero de 2025 - 23:55
El cierre de boliches emblemáticos como Dixit y Le Brique marcó el declive de la movida joven en Gesell. Actualmente, Pueblo Límite es el único bastión de la vida nocturna, pero opera con horarios limitados y una asistencia muy reducida en comparación con años anteriores.
Según Carlos López, titular de la Cámara de Empresarios de Discotecas y Bares de la Provincia de Buenos Aires (CEDIBBA), la situación refleja no solo el impacto del caso Fernando Báez Sosa, sino también decisiones políticas que han desalentado al público juvenil.
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“Se tomaron medidas restrictivas que generaron un ambiente hostil para los jóvenes, como controles excesivos y prohibiciones que afectan la experiencia turística. Esto ha provocado que muchos elijan Pinamar o Mar del Plata, donde la oferta es más amplia y flexible”, señala López.
Este giro, aunque celebrado por algunos sectores, preocupa a empresarios vinculados al entretenimiento nocturno.
La economía local y el turismo en transición
El cambio en el perfil de visitantes no solo transformó la dinámica social, sino que también impactó la economía. Jorge Cocco, de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Afines de Villa Gesell, explica cómo los empresarios locales han tenido que adaptarse: “La ciudad se orientó al turismo familiar. Los hoteles, departamentos y comercios se ajustaron para atender a este público, pero se perdió la actividad que generaba el turismo joven”.
Mientras tanto, en Pinamar y Mar del Plata, la situación es diferente. Balnearios con after beach, eventos musicales y una política más flexible con el entretenimiento nocturno atraen a millas de jóvenes.
La tendencia marplatense son las fiestas que se arman en la playa, frente al mar. En cambio, en las calles de Gesell, las noches son más tranquilas y los visitantes jóvenes se sienten desplazado.
De esta forma, aunque Villa Gesell sigue siendo un destino turístico atractivo, el cambio de perfil deja en claro que la ciudad atraviesa una etapa de transición. Cabe recordar también que el caso Fernando Báez Sosa, quien fue asesinado a golpes en la puerta del famoso boliche Le Brique, también marcó un antes y un después en la vida nocturna en Gesell.
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