Nicolás Sarkozy recibió en París al 1er. ministro italiano, Mario Monti, en París, mientras la crisis de la Eurozona sigue agravándose.
Luego, Monti será recibido el miércoles 11/01 por la canciller alemana Angela Merkel.
Y los mandatarios se reunirán en Roma el 20/01, para impulsar la integración fiscal de la Eurozona.
"Europa es una creación que no tiene precedentes, es un edificio en el servicio de la paz. No podemos permitir que se destruya el euro, que es el corazón de Europa. Si salta el euro, tarde o temprano será la paz lo que esté en tela de juicio", dijo Sarkozy.
El Presidente francés también ha pedido a las instituciones europeas "que hagan su parte"para afrontar la crisis de deuda de la Eurozona, como ya han hecho los gobiernos, en lo que puede ser una nueva presión velada sobre el Banco Central Europeo (BCE).
Monti, en un tono más sosegado que Sarkozy, también advirtió sobre el peligro de las divisiones en Europa.
"Creo que el riesgo principal de esta crisis (....) es el desarrollo de la incomprensión (...) entre las poblaciones" en el interior de Europa, "entre el Norte y el Sur", por eso hay que luchar para que "no nos dividamos y podamos seguir unidos", subrayó Monti en un discurso de conclusión de un coloquio con líderes políticos y empresariales internacionales.
El lunes 09/01 también habrá una reunión entre Sarkozy y Merkel para preparar la cumbre de la Unión Europea del 30/01.
En el mismo foro que Monti, el ministro polaco de Finanzas, Jacek Rostowski, se pronunció por una mayor integración europea, pero advirtió de que eso debe hacerse sin generar divisiones entre los países de la zona euro y el resto de los miembros de la UE que quieran implicarse, y que deben tener derecho de voto.
Si se materializan esas divisiones entre los dos grupos de Estados europeos "sería catastrófico para el conjunto de Europa".