MOTOR

GP DE RUSIA

Ganó Lewis / Mercedes que se habló tanto de Ferrari...

El problema ya venía antes de la preclasificación: la ira de Charles Leclerc (Ferrari) el pasado Gran Premio de Singapur, en el que Sebastian Vettel (Ferrari) logró la victoria. Para el Gran Premio de Rusia, una carrera que se lleva disputando en el circuito semiurbano de Sochi y que siempre ganó Mercedes,  Vettel quedó a 0s425 de Leclerc en el último segmento de la clasificación disputada en Sochi, y fue desplazado de la pole position por el Mercedes de Hamilton y el Ferrari de Leclerc, quien en Rusia consiguió su 6ta. pole position de 2019, la 4ta. de forma consecutiva. Imparable. Extraordinario. Ahora tendrá que llevarlo a la competencia.

En carrera, el número '16', el monegasco Charles Leclerc, arrasó de nuevo con su compañero Sebastian Vettel, aunque en el comienzo todo fue diferente. 

La clasificación marcó la 9na. ocasión consecutiva en que Vettel, 4 veces campeón mundial (con Red Bull Renault), clasificó detrás de su joven compañero de equipo, en su 2do. año en Fórmula 1.

"Pienso que, obviamente, hoy Charles era más rápido, por lo que es bastante sencillo ver dónde él es más rápido, pero se trata de un poco aquí y allí. No creo que haya ningún patrón que destaque diciendo que siempre es más rápido en el mismo tipo de curvas. Como he dicho, obviamente el último par de carreras ha sido más reñido de lo que pareció en el resultado, así que ya veremos qué pasa mañana", dijo Vettel, intentando que todo pasara lo menos traumático posible.

Pero en carrera intentó arrasar... con tanta mala fortuna que agitó todo y fue Lewis Hamilton quien pesó en el río revuelto.

El británico -que ha ganado las 6 veces que se corrió el GP de Rusia- se aprovechó de la mala planificación de Ferrari y de su propia buena suerte: un safety car, cuando Hamilton no había parado, le permitió ingresar el Mercedes a boxes y fue un repostaje que cambió el curso de la competencia. 

Por lo demás, Bottas (el otro Mercedes) impidió el ascenso de  Leclerc al 2do. lugar, y el circuito de Socchi fue otro 1-2 de Mercedes. 

El podio: Lewis Hamilton, Valtteri Bottas y Charles Leclerc.

El monegasco dijo, por los micrófonos, que "ha sido una pena no tener el otro coche en el podio" (Vettel), admitió que "los Mercedes siguen mucho más rápido que en la clasificación", y sobre el supuesto incumplimiento de Sebastien Vettel a las órdenes de Ferrari: "Siempre creeré en el equipo y la táctica era que me pasara Vettel en el rebufo, en la recta". 

El Mundial de 2019 tiene otra vez un gran protagonista: Lewis Hamilton, quien mantiene una insuperable sociedad equipo-piloto.

Cuando todo indicaba que habría un 1-2 de Ferrari, terminó en el 1-2 de Mercedes.

Mercedes, gran referente de la era turbohíbrida, logró su 8vo. doblete de la temporada, lo que no lograba desde Silverstone, en julio. Hamilton tiene 107 puntos de margen sobre Leclerc y 110 sobre Verstappen. Será su 6ta. corona de pilotos.

La carrera

Domingo soleado a orillas del Mar Negro, con 35ºC sobre el asfalto, y los neumáticos medios de Hamilton y Bottas vieron pasar a los Ferrari, tal como había ocurrido en Spa, Monza y Singapur.

Pero, en sus conversaciones de radio, exhibieron graves problemas domésticos. Todo muy italiano aunque los pilotos seran un alemán y un monegasco. 

Vettel luce amotinado y Leclerc lo padece como puede. 

Desde boxes habían advertido al tetracampeón (con Red Bull, no con Ferrari) de ceder el puesto, pero también conminaban al monegasco a acercarse más para lograr el adelantamiento. De ese tira y afloja, a un chispazo del incendio, se enteró todo el circuito. El resultado fue que Vettel no levantaba el pie y su compañero no lograba ponerse a tiro.

En la vuelta 21, el jefe de operaciones, Mattia Binotto, llamó a boxes a Leclerc, para montar los neumáticos amarillos. La estrategia opuesta de Mercedes, que debía aguantar lo más posible antes de poner las gomas blandas. 

"Parece que no hay demasiada degradación", afirmaba Hamilton desde su habitáculo. 

Leclerc, el nuevo ídolo de Maranello, pisó a fondo el acelerador, para convencer a su gente de que merecía el liderato.

Vettel aventajaba en 5 segundos a Hamilton cuando en la vuelta 26 ingresó a boxes. Ferari debía ordenar su 1-2 rojo... y festejar su 2da. victoria consecutiva. 

Pero 3 giros después, el MGU-K de Vettel (así se llama el motor eléctrico de la unidad de potencia), se desplomó. Vettel dijo bien audible: "Traigan de regreso los jodidos motores V12".

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