( N. de la R.: Mercedes Marcó del Pont es un caso muy extraño. Ella estaba por ser despedida de la Administración Kirchner, que no le quería renovar el mandato como presidente del Banco de la Nación Argentina, pero terminó en la presidencia del Banco Central porque Mario Blejer, el candidato de Amado Boudou, no prosperó. Economista muy limitada en cuestiones monetarias y con demasiados preconceptos como para investigar y aprender, Marcó del Pont tiene una única obsesión: afirmar que las críticas que le hacen proviene de economistas ortodoxos, y que son erradas. Ahora, ella es incapaz de fundamentar algo de todo lo que afirma. Que se vendan muchos vehículos 0 Km. no tiene nada que ver. Lo interesante de la siguiente visión de Economía & Regiones es que fue redactada, en parte, por Rogelio Frigerio (nieto), un tema muy sensible considerando que Marcó del Pont fue promovida por el otro Rogelio Frigerio).
EL MODELO YA NO ES SUSTENTABLE
Luces amarillas: el Tesoro Nacional vive del Banco Central
La sociedad argentina es voluntarista. Cree aquello que necesita creer o desea soñar aunque resulte irrealizable o insostenible. Ya ocurrió con la Convertibilidad. Por lo tanto es muy relativo advertir que hay señales preocupantes de la economía. Pero a quien quiera enterarse, aqui va algo de Economía & Regiones:
23 de marzo de 2011 - 20:46
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Economía & Regiones). El cierre del programa financiero depende cada vez más del uso de reservas del BCRA, lo cual explica la preocupación del Gobierno por contener las importaciones y cuidar la oferta neta de dólares de la economía.
> Durante los últimos años, la política monetaria del BCRA ha sido siempre expansiva, pero la situación del 2010/2011 es muy diferente a la de 2004/2009.
> En 2010/2011 la expansión monetaria tiene como objetivo financiar al sector público, lo cual deteriora el balance del BCRA.
> Este creciente financiamiento al Tesoro (que terminaría siendo alrededor de $ 25.400 millones superior a lo originalmente pautado en el proyecto Presupuesto 2011), deteriora el grado de cobertura de las reservas en relación a los pasivos monetarios del Central.
> En 2011, el BCRA deberá emitir, aproximadamente, $ 77.000 millones, de los cuales el 77,3% ($59.500 millones) corresponde a asistencia financiera al Tesoro Nacional y sólo el 22,7% ($17.500) se debe a la intervención cambiaria.

La preocupación del gobierno nacional por contener las importaciones y cuidar la oferta neta de dólares de la economía se entiende cuando se analizan las necesidades financieras del sector público y se observa que el Gobierno es cada vez más dependiente del financiamiento y de los dólares del BCRA.
La ecuación es sencilla: cuanto más altas sean las importaciones, y por ende más reducida sea la oferta neta de dólares, el BCRA va tener que perder una mayor cantidad de reservas para prestarle al Tesoro y más se deteriorará el balance de la autoridad monetaria.
La política monetaria del BCRA ha sido siempre expansiva durante los últimos años. Sin embargo, la situación del 2010 / 2011 es muy diferente a la de 2004 / 2009.
Entre 2004 y 2009 la expansión monetaria estuvo fundamentalmente abocada a intervenir el mercado cambiaria; lo que generó una mejora en el balance del BCRA.
Por el contrario, en 2010 / 2011 la expansión monetaria tiene como objetivo financiar al sector público, lo cual deteriora el balance de la autoridad monetaria.
En otras palabras, en 2004 / 2009 el crecimiento de la base monetaria se debía a la emisión para comprar el exceso de oferta de dólares y acumular reservas. Esta política engrosó el balance del Banco Central: por el lado del activo se acumulaban reservas, mientras que por el lado del pasivo, se incrementaba la base monetaria y las LEBACs y
NOBACs.
Puntualmente, en esos años el activo y el pasivo del Central crecieron US$ 24.000 millones (+43%) y US$ 16.600 millones (+34%) respectivamente.
De este modo, el patrimonio neto del BCRA creció un 130% (+US$ 7.400 millones) en el período.
El aumento del patrimonio neto del Central se debió a que el crecimiento de las reservas superó a la expansión de la base monetaria y de los papeles de deuda del BCRA, mejorando el balance y el patrimonio neto.
Las reservas internacionales crecieron US$ 33.848 millones (+240%), mientras que el pasivo monetario y las LEBACs/NOBACs se incrementaron en US$ 16.416 MM (+104%) y US$ 11.068 millones (+339%) respectivamente.
La relación entre las reservas internacionales y la base monetaria del BCRA aumentó sostenidamente.
El exceso de reservas por sobre la base monetaria pasó de US$ 2.000 millones (2004) a US$ 15.700 millones (2009). Si se agrega la base monetaria junto con las letras y notas del BCRA (lo que llamaremos base monetaria ampliada), la diferencia entre ambos agregados monetarios pasó de un saldo negativo de US$ 5.337 millones (2004) a otro positivo de US$ 1.415 millones (2009).
En pocas palabras, en ese período la proporción de reservas en relación a la base monetaria y las LEBACs se acrecentó sustancialmente.
Sin embargo, gran parte de este diferencial de crecimiento a favor de las reservas se debe a la depreciación del tipo de cambio, que licúa los pasivos monetarios y la deuda nominada en pesos del BCRA.
La depreciación del tipo de cambio nominal jugó un rol fundamental ya que, sin ella, en lugar de mejorar, la relación entre reservas y pasivos monetarios y/o no monetarios del BCRA hubiese empeorado sostenidamente entre 2007 y 2009.
En otras palabras, si el dólar no se hubiera encarecido nominalmente entre 2007 y 2009, la relación entre reservas y los pasivos del BCRA se habría deteriorado, impactando negativamente en el patrimonio neto de la autoridad monetaria.
Ahora bien, en 2011 esperamos que la relación entre base monetaria y reservas empeore sustancialmente dado que profundizaría la dependencia del Tesoro respecto del financiamiento del BCRA.
Es decir, en 2011 el Central va a tener que emitir más y dilapidar aún más reservas -que en 2010- para financiar al sector público.
De acuerdo con nuestras estimaciones, las necesidades totales de financiamiento del sector público nacional ascenderían aproximadamente a $87,800 MM, que serían cubiertas en un 81% ($71.000 millones) por el Banco Central.
Es importante aclarar que el financiamiento de la autoridad monetaria al Tesoro terminaría siendo alrededor de $ 25.400 millones superior a lo originalmente pautado en el Proyecto presupuesto 2011.
En este marco, el creciente financiamiento del BCRA al Tesoro deteriora la calidad del activo de la autoridad monetaria y deteriora el grado de cobertura de las reservas en relación a los pasivos monetarios del Central.